Taehyung la abrazó fuertemente mientras ella miraba a sus padres con una sonrisa. Jungkook se quedó con ellos hablando sobre algunas otras cosas de SunHee mientras el mayor entraba en casa con la pequeña en brazos.

—Se acaban de ir, hyung —dijo Jungkook en cuanto cerró la puerta.

—Muy bien, nosotros nos divertiremos mucho ¿Verdad, SunHee? —la miró con una sonrisa resplandeciente.

La pequeña asintió feliz. Jungkook los miró y sonrió, ese chico ponía su mundo de cabeza, antes se hubiera negado a cuidar de ella pues SunHee después de un rato era un desastre, corriendo de aquí para allá, eso ponía un poco nervioso a Jungkook, pero le reconfortaba que Taehyung estuviera con él. El chico era bueno con los niños y eso estaba bien, se sabía comunicar con ellos, hacerlos entrar en razón y divertirse hasta para leer un aburrido libro.

Taehyung tomó a la pequeña en brazos comenzando a hacerle cosquillas. Jungkook se rio un poco mientras los miraba. En su mente se pasaron unas imágenes de ellos dos con sus propios hijos, sonrió grande, lo que veía era lindo. Pero sacudió su cabeza en cuanto escuchó la voz del mayor.

—¿Qué sucede, bebé? —le preguntó preocupado.

—Nada, solo estaba pensando —le sonrió, acercándose a ellos para luego besar la mejilla de Taehyung y acariciar los cabellos de SunHee.

—¿Quién quiere jugar al caballito? —preguntó alegre el mayor.

SunHee comenzó a gritar que ella y luego Jungkook hizo lo mismo haciendo reír a Taehyung.

🌸🌸🌸

—Compré algo antes de ir por ustedes, cenáremos en casa hoy, me quiero quedar aquí contigo mientras estamos en la cama acostados... —Jimin sonrió y caminó hasta él para besar sus labios.

—Eso suena a una idea perfecta —le sonrió.

Yoongi volvió a besar sus labios, caminando hasta la cocina por la comida para luego sentarse en la sala a comer mientras miraban una película. Cuando terminaron caminaron hasta la habitación de Yoongi. Jimin se acostó en la cama y Yoongi se quitó su camisa para estar más cómodo. Jimin rápidamente se abrazó al mayor, dejando su cabeza en su pecho en cuanto este se acostó a su lado.

—¿Estás cómodo? —le preguntó mientras besaba su frente.

—Un poco, sí —sonrió.

—Ven aquí —lo tomó de sus piernas y lo subió a su cuerpo.

Jimin quedó sentado en las piernas de Yoongi, luego se recostó un poco para acercarse a sus labios.

—Minnie, tenemos que hablar de algo muy importante —dijo serio.

Jimin sintió miedo y su piel erizarse.

—Yo te amo, te amo mucho, también a SunHee y... Encontré otro empleo, me aceptaron, es una nueva empresa y al no tener mucho personal me pagarán bien, entonces quiero que vayamos a comprar una casa para vivir juntos... ¿Qué te parece? —preguntó. Jimin lo miró con una sonrisa.

—Me parece perfecto, Yoonie ¿Por qué no me lo habías dicho antes? —le preguntó sonriente.

—Quería que sea una sorpresa, me imaginé llevando a mis dos bebés con los ojos cubiertos hasta la casa y cuando les quitara las vendas decirles que esa sería nuestra nueva casa y que ya no estaríamos separados, pero después de pensarlo un poco, lo mejor sería escoger la casa juntos —Jimin lo besó en cuanto el mayor terminó de contar.

—Te amo tanto —Jimin dijo y Yoongi sonrió ante ello.

—¿Crees que podamos ir a mirar algunas casas? Mamá y papá están enterados de esto así que papá me regaló uno de sus autos, todavía no lo trae, está en su casa, pero pronto lo tendré y los dos nos podremos mover mucho más fácilmente para salir por SunHee —Jimin lo miró feliz mientras asentía.

—¿Te lo regaló? —preguntó asombrado y tan maravillado con lo bueno que era el padre del pálido. Yoongi asintió.

—Sí, mis padres tienen más dinero del que aparentan y papá ama los autos así que pensó que uno de ellos podría ser para mí y para mí familia. Aunque ellos tienen dinero no me gusta pedirles, soy mayor de edad y puedo conseguir mi propio dinero... Algunas veces es un poco frustrante y penoso, pero estoy muy agradecido con ellos.

—Es cierto y estoy feliz que pienses así. Me alegra por ti, cada día me doy más cuenta de que eres el indicado y que nunca me equivoqué con escogerte —se acercó a sus labios.

Se besaron un poco más hasta que los besos se volvieron caricias suaves y roces. Jimin amaba estar así con Yoongi pues el mayor era más vulnerable y cariñoso. El celular de Yoongi comenzó a sonar, Jimin se levantó un poco de sus piernas para tomarlo. Se lo entregó, Yoongi lo tomó mientras contestaba.

(Al teléfono)

—¿Dónde estás, Yoonie? ¿Te parece venir a cenar conmigo?  Acabo de preparar una deliciosa comida que aprendí en Londres.

Yoongi maldijo para sus adentros. Suspiró y entrelazó su mano con Jimin mientras este besaba y daba pequeñas mordidas en su barbilla.

—Te lo dije una y otra vez, para ser más claro, se acabó todo desde hace mucho tiempo. Olvídate de mí, me da gusto que seas una persona nueva, ahora usa eso para conocer personas, no sabes, capaz y encuentras un novio que haga lo que yo ya no hago, que te ame.

Jimin paró de besarlo para mirarlo atentamente. Yoongi lo miró y le sonrió un poco antes de acercarse a sus labios.

—Pero Yoonie...

Yoongi se acercó a Jimin, siguiendo con lo que anteriormente hacían antes de que Young Soo los volviera a interrumpir. Los labios del mayor recorrieron todo su cuello, soltando besitos y dejando pequeñas mordidas. Un gemido se escapó de los labios de Jimin sin él darse cuenta de eso. Yoongi sonrió y lo besó nuevamente antes de volver a hablar.

—¡Min Yoongi! ¿Qué fue eso?

—¿Te dije que estoy ocupado? mi novio y yo estamos en algo muy importante... Deja de llamar y buscarme.

—¡No Yoonie, tú eres mío!

—Temo decirte que lo dejé de ser desde hace mucho tiempo, ahora deja de llamar, no creo atender tus llamadas, ni hoy, ni nunca. Supéralo, Young Soo.

Colgó la llamada sin esperar a que diga algo más. Miró a Jimin mientras se reía de lo que acababa de pasar con su loco ex. Jimin lo miró con una sonrisa, luego le preguntó por él, sintiendo como todo el cuerpo de Yoongi se tensaba.

—Amor, te lo diré todo porque no debería haber secretos entre nosotros ¿De acuerdo? —Jimin asintió mientras se bajaba de las piernas de Yoongi para los dos quedar sentados en la cama.

—¿Quién es? —preguntó. Yoongi colocó un cabello de Jimin detrás de su oreja.

—Es mi exnovio —le dijo, Jimin lo miró con los ojos abiertos grande.

—Y tú... —Yoongi negó.

—Es historia, dejé de sentir algo por él desde el momento en que me dejó —dijo simple. Jimin lo miró con pena, pero con una feliz sonrisa en sus adentros.

—¿Te dejó? —preguntó bajito.

—Sí, bebé... Él era un chico muy lindo conmigo, pero cuando se trataba de que esté con mis amigos se trasformaba, era muy celoso, me prohibía salir con ellos porque decía que me querían para ellos mismos y muchas estupideces así... Un día se fue dejándome con el corazón roto, admito que lo quise, pero cuando se fue comprendí muchas cosas y ese amor desapareció, solo sentía rencor y odio por ese chico. Se fue a Londres, un psicólogo lo ayudó y está curado, ahora piensa que puede venir, besarme y fingir que no pasó nada, pero la verdad es que yo ya no siento nada por él. Minnie, tú me gustas y te amo como nunca había amado a nadie, así que no te preocupes por él —le sonrió.

Jimin se acercó a sus labios y lo besó alegremente, ahora sabía porque Yoongi se ponía así, Seokjin había tenido razón cuando se trataba de un asunto o persona delicada para Yoongi.

—Espera... ¿Dijiste besar? —preguntó. Yoongi maldijo, después suspiró.

—Minnie hay algo que no te he dicho y me siento muy culpable por esto... —volvió a suspirar. Jimin mordió su labio intentando no llorar.

—¿Qué sucedió? —preguntó con la voz a nada de quebrarse.

—Me pidió encontrarnos para pedirme disculpas, su psicólogo le dijo que lo tenía que hacer en persona y con toda la gente a la que jodió. Yo fui el más jodido de todos, es por eso que se encontró conmigo primero. Al principio no quise aceptar pues es mi ex, pero luego me contó todo y acepté con la condición de que en cuanto lo perdonara, me iría de ahí —suspiró—. Nos encontramos, llegué dispuesto a decirle que lo perdonaba para al fin salir de ahí. Me sentía incómodo con su presencia, había algo que no me gustaba para nada, él tenía un aura muy rara y sí, estaba cambiado, pero creo de lo que debería de cambiar es esto —señaló su cabeza.

—¿Y qué pasó después? ¿Eso era todo? ¿Solo se encontraron sin que me dijeras nada? —preguntó, suplicando porque diga que sí, pero Yoongi negó.

—Eso no es todo... Acepté que me contara lo que sucedió y el motivo por el cual se fue, entonces me quedé escuchándolo, era como si estuviera hablando con algún viejo amigo, te juro que no sentía nada más que amigos —entrelazó sus manos—. En todo momento no paré de pensar en ti, en SunHee, en tus besos, en lo feliz y agradecido que estoy porque estés conmigo... Cuando me percaté de la hora me levanté dispuesto a irme, entonces él... Me besó —las lágrimas de Jimin bajaron rápidamente—. Y yo... Yo no le correspondí, pero tampoco lo alejé... Me sentía tan perdido, tan abrumado, sentí que la herida se volvía a abrir... Rápidamente borré mis pensamientos al mantener a una persona en mi cabeza, y esa eres tú... —confesó. Jimin lloró fuerte.

—¿Es por eso que estabas así conmigo cuando te besaba? —Yoongi asintió lentamente.

—Me sentía mal, por eso cuando me besabas recordaba su beso y me sentía jodido por dentro y por fuera... —Jimin lo empujó un poco.

—Quiero ir a casa —dijo llorando.

—No, amor, por favor, te prometo que no pasó nada más, ya no lo amo, estoy muy lejos de sentir algo por él que no sea molestia o desagrado —le dijo. Jimin lo miró con sus ojos rojos e hinchados—. Te prometo que no volveré a contestar ninguna llamada de él, ni encontrarnos, no tengo nada más que hacer con él porque tú eres mi pareja, el chico con el que quiero estar y cuidar de nuestros hijos, porque sí, cada que te miro nos imagino teniendo más hijos, siendo felices con ellos como lo somos ahora con SunHee —Jimin se abrazó a Yoongi mientras lloraba—. Perdóname bebé, si jodí esto lo siento tanto, nunca pensé que eso sucedería, pero permíteme hacerte olvidarlo, demostrarte cuanto te amo y cuanto quiero seguir con mi vida junto a mis bebés, con SunHee, contigo y con todos los bebés que tengamos —Jimin seguía llorando en su pecho ante la confesión.

—Te odio tanto ahora mismo... Pero solo quiero besarte y abrazarte... —dijo con voz rota.

—Está bien amor, acepto que me odies porque yo también lo hago, desde que eso sucedió lo hago y más porque estás llorando por mi culpa, por mi jodida culpa... No te pediré que hagas como que nada sucedió, pero si te quiero pedir que no me dejes después de esto, me estoy esforzando en ser un buen padre y un buen novio por ti, por darles todo lo mejor de mí, eso que nadie más ve, porque yo soy solo de ustedes... Soy solo tuyo y de nadie más, así como tú eres solo Mío.

¡Hola!

¿Cómo están?

Les corto el capítulo hasta aquí

Espero que les guste❤

¡Adiós!