Jimin esperó a que Yoongi llegara a su lado para pedirle que lo empujara en el columpio. Yoongi no reprochó, lentamente se colocó detrás del rubio para empujar desde su espalda, escuchando la risa de Park, al mismo tiempo que se elevaba cada vez más alto en el juego infantil.

Jimin se miraba realmente feliz y contento. Después de un rato Yoongi dejó de empujar al notar que Jimin ya iba rápido y alto. Caminó al columpio siguiente, sentándose ahí, meciéndose lentamente con la ayuda de sus pies, sintiendo la brisa golpear en su rostro, escuchando de fondo la risa divertida de Jimin.

—Hace mucho que no me subo a uno de estos —casi gritó, sin borrar la hermosa sonrisa que iluminaba su rostro.

—Yo también, mamá dejó de llevarme a los juegos infantiles desde que cumplí los diez —Yoongi comentó.

Jimin poco a poco dejó de mecerse hasta que logró quedar al nivel del mayor, mirándolo ahora con atención.

—Sabes... En la escuela dicen mucha mierda de ti —Jimin habló sin intentar sonar grosero—. Y una de esas es que asesinaste a tus padres —se quedó en silencio por un momento—. Yo no lo creo.

Yoongi permaneció mirando al frente sin inmutarse. Podía sentir la mirada de Jimin a su lado. Largó un suspiro para después mirarlo.

—No me gusta hablar de este tema... Creo que es por ello que todos creen en ello, porque prefiero decir que lo hice a contarles toda la maldita historia —su voz sonó dura, pero cansada.

—Tranquilo, Yoonie, yo no necesito que me cuentes esto, te lo dije antes, yo creo en ti —una de sus manos tocó la de Yoongi.

Yoongi asintió, quedándose en silencio nuevamente. Jimin también guardó silencio sin soltar la mano del mayor, mostrándole todo el apoyo que Jimin le ofrecía.

—El rumor inició desde que entré a la Universidad... Admito que mi vida no era buena, de hecho, sigue sin serlo, tengo tanta mierda guardada... —suspiró—. Para ese tiempo estaba tan jodido, hice tantas cosas de las que ahora me arrepiento, pero nunca podría asesinar a mis propios padres. Ellos me querían, a pesar de tener que cargar con toda mi mierda ellos eran los únicos que me decían: "Hey, Yoongi. La estás cagando" Entonces intentaba no volver a caer en lo mismo —rio un poco, sonando tan amargo el sonido al dejar su garganta—. Ellos me amaban, hasta cuando perdía la cabeza y explotaba con todo, cuando llegaba drogado y alcoholizado, aun cuando el sonido de mi voz era alto y les gritaba mil insultos... Ellos eran los únicos que seguían creyendo en mí, que en algún momento esa etapa se acabaría y me centraría en estudiar, en tener un mejor futuro, sentar cabeza e incluso darles nietos con mi pareja. Ellos malditamente creyeron en mí —su voz sonó molesta, podía sentir sus lágrimas al borde de sus ojos.

Jimin sintió sus propias lágrimas mojar sus ojos, apretando más fuerte la mano de Yoongi en forma de  apoyo.

—Me ganaba la vida haciendo varias cosas como pelear, entregar droga, y muchas mierdas así. Había tenido una pelea con uno de los "mejores" peleadores, la gente enloquecía por ese enfrentamiento, apostaban como idiotas, el dinero para el ganador era demasiado, incluso pensé que si ganaba no tendría que hacer ninguna de esas mierdas y mis padres y yo podríamos comer por tres meses, sin importarnos el dinero —suspiró—. Gané la pelea, jodí a ese estúpido, me llevé el dinero a casa y todo estuvo bien, pero mis padres se negaron a tomar toda esa cantidad, mi madre incluso lloró y golpeó mi pecho al pensar que estaba haciendo algo muchísimo más ilegal que una pelea. Mi papá parecía decepcionado, pero sabía que aquel dinero ayudaría para la casa. Al final aceptaron, pero no completo, solo tomaron lo que necesitarían para la cena de esa noche. Me fui a beber y no llegué a casa hasta el día siguiente —sus labios se apretaron fuerte, sus manos se cerraron en puños, incluso había comenzado a temblar del enfado.

Jimin lo notó, sintiendo tanta pena por el mayor, sabía que la parte fea estaba por suceder así que se preparó mentalmente.

—Al entrar a casa todo estaba desordenado, los sillones estaban caídos en el suelo, las sillas también. Había vidrios rotos, las luces seguían encendidas, tuve miedo. Fue la primera maldita vez que tuve miedo en toda mi puta vida —escupió con odio, apretando sus dientes—. Corrí dentro de casa, al llegar al comedor me los encontré... Fríos, pálidos, sus cuerpos sin vida. Había sangre, había mucha sangre, Jimin —Yoongi lo miró—. Corrí hasta ellos, incluso la resaca se había ido, lloraba sin control mientras intentaba buscar su pulso, hasta el más débil que me indicara que estaban vivos... No había, llevaban muertos muchas horas. Corrí escaleras arriba en busca de algo que mágicamente los pudiera traer a la vida, ahí fue cuando lo noté, el cuarto de mis padres y el mío estaban desordenados. Busqué entre todas mis cosas, el dinero de la pelea no estaba, entonces supe que aquel bastardo había ido por mi dinero, acabando con la vida de mis padres —una lágrima corrió por su mejilla, tan dolorosa, tan fría—. Lo que llegó después fue jodido, los vecinos alertaron a la policía, ellos llegaron y me encontraron rompiendo lo que quedaba de una mesa, me sentía tan jodido, tan derrotado, pero a la vez tan furioso y con ganas de romper algo. Debido a mi estado y todo el alcohol que llevaba en mí, ellos decidieron que yo era el asesino, así fue como me encerraron. Ni siquiera pude estar en su funeral, no me pude despedir y aquel bastardo seguía libre... La noticia llegó a todo Daegu, decían que yo los había asesinado, tiempo después logré comprobar que yo no fui, la policía seguía yendo a casa hasta que encontraron algo que delató al culpable, al fin logré salir, pero mi vida ya estaba jodida. Algunos de los estudiantes de Daegu se fueron a Seúl, yo también lo hice, escapé de esa mierda, pero al reconocerme, todos esos bastardos de Daegu expandieron el rumor, así fue como todos comenzaron a lanzarme mierda tras mierda, para ellos era un asesino y preferí dejarlo así, que me temieran para que ninguno de esos imbéciles intentaran meterse conmigo.

Jimin no aguantó más, se bajó del columpio para llegar hasta Yoongi y abrazarlo con fuerza, llorando en su pecho mientras le decía cuanto lo sentía.

¡Hola!

¿Qué les pareció?

Ahora ya saben un poco más de la historia de Yoongi

Dejen aquí lo que le quieran decir a Yoon ⬇

Espero que les esté gustando ❤

¡Adiós!