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Aradia acelera su motocicleta antes de entrar a un pequeño estacionamiento exclusivamente del bar del Pingüino, la castaña se estaciona y se quita su casco con velocidad para dejarlo a un lado. Roth deja su mochila enfrente de ella y se asegura que lleva lo necesario para disfrazarse.

—Hoy tendrás tu merecido Falcone —asegura Aradia con una radiante sonrisa antes de analizar su arma de fuego y cargarla, prepara su navaja suiza y la guarda en su mochila de nueva cuenta para segundos después bajarse de su moto.

Aradia se desnuda con velocidad y se pone la ropa correspondiente, se pone sus altas botas negras de látex antes de acomodarse su revelador corsé de cuero negro que deje ver las diversas marcas que tiene la mujer en sus senos.

Aradia se pone su gabardina negra y se acomoda su peluca pelinegra, se pinta los labios de un rojo intenso antes de guardar todo en su bolso y comienza a caminar hacia la entrada del bar.

Aradia camina entre las bailarinas de los vestidores con agilidad antes de quedar enfrente de un guardia el cual vigilaba el ascensor que daba hacia el verdadero club y hacia la oficina de Falcone.

—Dile al Señor Falcone que quiero subir —ordena Aradia tras quedar enfrente del guardia que regresó a verla inmediatamente.

El hombre analiza el cuerpo de Aradia descaradamente e intenta contener una sonrisa al ver las largas y sensuales piernas de la mujer.

—Hoy no va a recibir a nadie —asegura el hombre intentando controlar sus pensamientos sobre el cuerpo de Aradia.

—Dile que es sobre Anika —ordena Aradia una vez más intentando mantener la paciencia, el hombre regresa a verla inmediatamente para segundos después llamar al ascensor.

Aradia sonríe satisfecha y entra a este sin dejar de sonreír, Aradia mira hacia el oficial mientras suelta un largo suspiro.

—Creo que tu amigo quiere decir algo —comenta Aradia divertida viendo cortamente el bulto en los pantalón del oficial.

Este baja la mirada rápidamente antes de soltar una maldición, Aradia se ríe al mismo tiempo que el ascensor cerró sus puertas.

Aradia mueve sus dedos ligeramente intentando controlar sus nervios, toma con fuerza su bolso y cierra los ojos para intentar repasar su plan.

—Hola, miren quién esta aquí —dice Falcone con emoción viendo el sensual caminar de Aradia la cual se va acercando a él sin ninguna expresión en su rostro.

—Perdón por molestarlo Señor Falcone —dice Aradia fingiendo inocencia ante el hombre que sonrió inmediatamente.

—No hay problema linda —asegura Falcone acercándose a Aradia la cual detuvo su caminar estando consciente de que todos los guardias la miran con atención.

—¿Podría hablar con usted un minuto? —pregunta Aradia contando rápidamente a todos los hombres que rodean el gran despacho de Falcone.

—Claro que sí linda —asegura Falcone con una sonrisa viendo como Aradia miraba a su alrededor rápidamente antes de verlo fijamente.

—A solas —pide Aradia en un susurro mientras se muerde el labio inferior ligeramente logrando encandilar a Falcone.

Bruce toca la puerta del bar con fuerza estando desesperado por encontrar a Aradia, uno de los gemelos abre la puerta y frunce el ceño confundido al no encontrar a nadie. Bruce se escabulle rápidamente pasando detrás del hombre y cerrando la puerta del bar.

Bruce camina con velocidad por el bar llamando la atención de varios guardias los cuales comenzaron a seguirlo, Bruce entra a un cuarto junto con un guardia, este cierra la puerta pero Bruce lo golpea fuertemente dejándolo inconsciente.

—N-No sé donde e-está —solloza Aradia fingiendo llorar ante Falcone ya que se encuentra sentada frente a él—. Estoy m-muy angustiada y s-sé que usted es un h-hombre muy importante.

Falcone sonríe al ver la manera en que Aradia le suplica con la mirada, la castaña había dejado su gabardina negra en sus piernas dejando al descubierto su marcado cuerpo.

—E-Estaba pensando en que u-usted podría ayudarme a e-encontrarla, e-ella desapareció hace que t-tanto que comienzo a c-creer que esta... —solloza Aradia antes de bajar la mirada y negar rápidamente logrando convencer a Falcone—. Discúlpeme de v-verdad, yo s-solo...

Aradia suelta un fuerte sollozo antes de romper en llanto, Falcone niega rápidamente antes de extender su mano hacia Aradia.

—No te disculpes linda, aquí tienes —dice Falcone extendiéndole un pañuelo limpio a Aradia la cual negó rápidamente.

—N-No gracias, y-yo tengo un p-pañuelo —asegura Aradia comenzando a buscar en su bolsa pero toma con fuerza el arma que se encuentra dentro de este.

—Señor Falcone —Aradia detiene sus movimientos al escuchar la voz de un hombre que llegó a interrumpirlos.

—¡¿Qué fue lo que te dije?! —pregunta Falcone molesto regresando su mirada hacia el hombre y haciendo que Aradia mirara en su dirección.

—Lo siento Señor Falcone pero creo que querrá ver esto —dice el hombre logrando llamar la atención de Falcone.

—Discúlpame linda —dice Falcone regresando su mirada hacia Aradia la cual contuvo su impulso de dispararle en ese momento—. Regreso en un momento.

Falcone acaricia la mejilla de Aradia y esta toma con fuerza el arma que tiene en mano pero esta escondida en su bolso, Falcone se aleja de la ahora pelinegra y sigue a su guardia.

—¿Qué carajo? —pregunta Falcone incrédulo escuchando a los dos personas del noticiero hablar sobre una llamada.

—Esta evidencia fue otorgada por el detective Gordon —habla la mujer mirando fijamente hacia la cámara—. Les advertimos que la siguiente llamada es demasiado gráfica y podría alterar a ciertas personas.

En la pantalla aparecen dos fotos, una de Anika saliendo del bar con Mitchell teniendo su rostro golpeado y otra de Falcone, se comienza a escuchar la grabación de Anika logrando poner nervioso a Falcone el cual regresó su mirada hacia su guardia.

Aradia se levanta lentamente tras escuchar la voz de Anika, toma con fuerza su arma y camina lentamente hacia donde se fue Falcone, la pelinegra ve como este se encuentra distraído con la televisión por lo que no duda en apuntarle con el arma de fuego que tiene en la mano.

—Hola papá —saluda Aradia con sarcasmo haciendo que Falcone y su guardia regresen a verla inmediatamente.

—¿Qué? —pregunta Falcone confundido viendo la seguridad en la mirada de Aradia.

—Soy hija de Vanessa Roth, ¿te acuerdas de ella? —pregunta Aradia con sarcasmo sintiendo asco al ver la pequeña sonrisa del hombre.

—Sí, claro que sí —asegura Falcone queriendo acercarse a la pelinegra—. Baja el arma por favor.

—Esto es por mi madre y por mi hermana —asegura Aradia antes de disparar hacia Falcone pero este esquiva la bala con agilidad al mismo tiempo que la luz en todo el bar se cortó.

Aradia maldice y camina lentamente por todo el lugar sin dejar de apuntar con el arma, agudiza sus sentidos pero es derribada con fuerza por el guardia de Falcone.

—¡No me toques! —ordena Aradia empujando con fuerza al hombre al mismo tiempo que su peluca cayó al suelo.

Aradia toma el arma que le arrebató el hombre antes de patearlo en la cabeza con una flexibilidad impresionante, el hombre cae inconsciente al suelo al mismo tiempo que Aradia siguió a Falcone el cual intentaba escapar.

Aradia dispara varias veces al mismo tiempo llamando la atención de los guardias de Falcone y haciendo que este se escondiera detrás de la barra de su bar personal.

Un guardia enciende la linterna de su teléfono y junto con sus compañeros miran hacia el ascensor que abrió sus puertas solos logrando confundirlos.

Uno de los hombres carga su arma y comienza a caminar hacia el ascensor teniendo un mal presentimiento, el hombre apunta hacia una de las esquinas del ascensor y tiene intenciones de disparar pero Bruce es más rápido que él.

Todos los hombres comienzan a disparar a ciegas queriendo matar al caballero de la noche pero este va derribándolos uno por uno mientras esquiva algunas balas, dos hombres comienzan a dispararle hacia el pecho pero su traje evita que alguna bala logre lastimarlo.

Bruce termina con los últimos dos hombres y se levanta rápidamente escuchando los tacones de Aradia sonar, el hombre suelta un suspiro aliviado inconscientemente al saber que la mujer sigue viva.

Aradia camina lentamente por el gran despacho antes de sentir como la empujan con fuerza, un hombre hace que Aradia quede arriba de la barra del bar de Falcone e intenta tocarla pero esta lo empuja con sus tacones con fuerza. Aradia evita que el hombre le quité el arma que tiene en manos y esquiva con agilidad al segundo hombre se acerca a ella.

Aradia da varios disparos al aires antes de lograr darle al hombre el cual cayó al suelo muerto, la castaña sonríe con satisfacción al sentir manchas de sangre en su rostro.

El cabello de Aradia comienza a tornarse de color púrpura mientras que sonríe con emoción, retoma su búsqueda para asesinar a Falcone cargando de nueva cuenta su arma.

Falcone golpea con fuerza la cabeza de Aradia con un taco de billar y logra que esta caiga al suelo aturdida.

—¿Crees que esto no me duele? —pregunta Falcone con sarcasmo agachándose para quedar arriba del cuerpo de Aradia.

Varios recuerdos llegan a la cabeza de Aradia logrando que sus ojos se llenarán de lágrimas, Falcone comienza a asfixiar a la castaña con el taco mientras la ve fijamente.

—¡Yo quise a tu madre! ¡Yo te amé! —grita Falcone presionando con más fuerza el taco en el cuello de Aradia.

La castaña se remueve bruscamente antes de rasguñar con fuerza la mejilla de Falcone, el hombre se queja pero no deja de asfixiar a Aradia.

—¡M-Mami! ¡Mami! —Aradia escucha sus propios gritos de ayuda mientras Falcone comenzaba a romper su lindo atuendo el cual su madre se había esforzado en hacer.

—¡Morirás igual que tu madre! —grita Falcone con rencor viendo fijamente a Aradia la cual soltó varias lágrimas estando segura de que morirá.

Bruce toma el hombre del brazo con fuerza y lo levanta para segundos después golpearlo con odio mientras que Aradia recuperaba la respiración, Falcone cae al suelo al mismo tiempo que Aradia se levantó y apuntó su arma hacia el asesino de su madre.

Bruce toma las muñecas de Aradia con fuerza intentando detenerla, la castaña llora desesperada mientras forcejea con Bruce.

—¡Tiene que pagar! ¡Él tiene que pagar! —grita Aradia queriendo dispararle y deseando poder liberarse de toda la culpa que la atormenta desde que tiene nueve años.

—No tienes que pagar como él —asegura Bruce obligando a Aradia para que lo mire—. Por favor, ya pagaste mucho.

Aradia ve fijamente a Bruce sin saber qué hacer, el hombre toma el arma que todavía sostiene la castaña sin alejar su mirada de esta.

—Suelta el arma —suplica Bruce en un susurro viendo como Aradia sigue llorando—. Por favor Aradia.

Aradia suelta un sollozo antes de regresar su mirada hacia Falcone que los ve agotado, la castaña mantiene un fuerte agarre en su arma antes de darse por vencida y entregársela a Bruce.

El caballero de la noche guarda el arma antes de ver a Aradia fijamente, la castaña hace un pequeño puchero con sus labios antes de que Bruce la pegara a su pecho.

—Tranquila —susurra Bruce tomando la cintura de Aradia con fuerza mientras esta llora en su pecho, el hombre se inclina para dejar un corto beso en la cabeza de la demonio.

Falcone sonríe al ver como la castaña llora desconsolada, Aradia dirige su mirada hacia Falcone y no evita en preparar su navaja para lanzarla hacia este logrando darle en su muslo cerca de su miembro.

—¡Maldita hija de...! —intenta maldecir Falcone pero Aradia se aleja de Bruce rápidamente para patear con fuerza el miembro del hombre.

Bruce toma el brazo de Aradia para pegarla nuevamente a su pecho, la castaña controla su llanto y acaricia inconscientemente la mejilla de Bruce intentando concentrarse solamente en él.

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Madres, no quiero acabar esta historia... no quiero terminarla como estoy pensando.

Espero que les haya gustado el capítulo hermosas personitas, cada vez nos acercamos más al final de esta historia.

Los amo❤️

(Este capítulo fue escrito antes de mi cita con el dentista para sacarme mis muelitas del juicio).

(Actualización de su escritora x2) 

(Bestia, les juro que me siento re hinchada, tengo las mejillas más hinchadas que Teodoro de Alvin y las Ardillas).

(No puedo comer más que gelatina y sopa).

*♘↷❝𝐌𝐎𝐀𝐍𝐀❞↶♘*

Esta es una historia original de Wattpad, actualmente igual se encuentra disponible en Inkitt y en Booknet, si la lees en otra plataforma se debe a un virus y una copia sin mi permiso.