Este fuego en mi piel
Esta quema
Deseo
Me está convirtiendo en pecado

LA GUERRA NO ERA UN LUGAR PARA EL AMOR según Satinne, sólo para el deseo momentáneo y la pasión desenfrenada que una muerte inminente a la vuelta de la esquina puede provocar en los instintos más primitivos que guardamos los humanos.

Al llegar a casa después de un largo tiempo fuera de Arbezela debido a la guerra, Satinne fue recibida por la Marquesa viuda Faith Cornox, su hermana mayor y quien se suponía sería la heredará del ducado Whalfort de no haber desafiado a padre por amor, el más grande de los pecados según madre. Palabras irónicas de la duquesa del hogar de lo profano.

━━━ ¡Ja! Gane de nuevo ━━━ celebró la mayor en la habitación frente al tablero blanco y negro.

Mientras, una dama de nombre Kara terminaba de poner los toques finales en el traje de la actual duquesa Whalfort para la ceremonia donde los dos héroes de guerra recibirán un emblema de la mano del emperador.

━━━ Estas distraída ━━━ declaró la viuda cruzada de brazos ━━━ Yo nunca pude ganarte, y mira esto. ¡Casi no pusiste resistencia!

━━━ Desearía haber dormido más ━━━ respondió ella, recibiendo un bufido de su hermana y una sonrisa de Kara, pues la dama, quien creció prácticamente a su lado, sabía que estaba mintiendo.

¿Cómo decirle a su hermana que estaba harta de todo? Tan solo un simple juego de mesa le traía recuerdos de las cruel estrategias en el campo de batalla, las vidas inocentes perdidas frente a sus ojos y aquellas que arrebato con sus propias manos por sus fines egoístas.

Por más que lo deseará, Satinne no podría mostrarse cansada de la guerra frente a su hermana mayor. No ahora que tenía el favor del emperador, no ahora que el hijo del conde Meetnard le había jurado lealtad y no ahora que Metheora Starlight, la mujer más devota de las estrellas y la más grande benefactora del templo astral, parecía sonreír en su dirección.

━━━ Tengo hambre ━━━ musito cuando Kara coloco el último de sus largos cabellos carmesí en su lugar ━━━ ¿Podemos comer algo antes de irnos?

━━━ Galletas de nuez ━━━ declaró la viuda con una sonrisa traviesa y el corazón de Satinne se animo una vez más. Su hermana mayor era un alma joven en el cuerpo de una mujer que perdió lo que más amaba de una manera injusta. No, Satinne no estaba siendo egoísta, lo que hacía era por amor a su familia, a su hermana.

KARMINNE RIO EN SUS ADENTROS AL VER A SU PROMETIDO tan nervioso por su cercanía. La ceremonia del emblema era algo un poco aburrido según la rubia, pero necesario para honrar a los héroes de guerra que lucharon por el honor de Arbezela.

En Celestinna, no había emblema de metal o ceremonia tan formal y corta a la vez. Un gran banquete sería ofrecido a los héroes, quienes podrían pedir un deseo en el templo sagrado de la mano de un miembro de la familia real a Nyax, la diosa de la creación que veneraban, para finalizar con un discurso de agradecimiento del emperador.

Pero no estaba en Celestinna. Estaba en Arbezela por orden de su padre para conocer a su prometido, el tímido príncipe Haveron, quien sólo podía hablarle de frente cuando mencionaba la magia.

Oh el príncipe Haveron, dulce y tierna criatura que parecía tan irreal, su ángel en la tierra. Los hijos del emperador Jaider parecían ser tan diferentes unos de otros como se podía, algo intrigante que podía llegar a fastidiar debido a la caprichosa princesa. Le agradecía a la diosa que su padre no decido comprometerla con el príncipe Kamal, o se habría vuelto loca con el joven de lengua afilada y su nada confiable madre, Benela Verdi, quien parecía manejar todo desde las sombras.

━━━ ¡Estimados ciudadanos de Arbezela, escuchenme! ━━━ comenzó el emperador mirando al pueblo ━━━ ¿Recuerdan lo que ocurrió ese fatídico día hace ocho años? ¿Cuando el ejercicio de las islas Orian inició aquel ataque brutal, nos arrebato nuestras tierras y mato a nuestros ciudadanos?

El pueblo grito, colérico de recordar esa época de sufrimiento y dolor. La rubia vio a Haveron hacer una mueca de tristeza ante el sufrimiento de las personas abajo y sonrió. El sería un emperador amado por su gente, pues se preocupaba por todos.

━━━ Sin embargo nuestro gran creador, Astotellia, nos concedió su gloria y nos ordenó que retomaramos las tierras que nos robaron! ━━━ una vez más, el pueblo grito. Esta vez de gozó y satisfacción ━━━ ¡Es por eso que hoy les anuncio que seguimos sus ordenes y recuperamos con éxito las tierras que le pertenecen a Arbezela de manera legítima! ¡Bajo la protección de Astotellia, el sol jamás dejará de brillar sobre el imperio de Arbezela!

Que palpable fue la emoción, y que satisfacción sintió la rubia al ver que el emperador Jaider había utilizado con sabiduría los refuerzos que solicito a su padre y su confiable amigo Marcus Ehnard había regresado ileso.

━━━ Dio un magnífico discurso, su majestad. ━━━ dijo la princesa Ariana a modo de anunciar su llegada al emperador ━━━ Yo, Ariana de Secramise, primogénita de Roserice de Secramise, saludo a Jaider de Secramise, emperador de Arbezela.

Karminne iba del brazo de su prometido cuando vio al emperador flaquear ante la presencia de su hija y suspiró.

━━━ ¿Crees que sea posible que me escotes a mis aposentos antes de lo esperado, Haveron? ━━━ pidió la rubia al de cabellos naranjas queriendo evitar a la albina. El ojiverde se sonrojo con violencia al tener los grandes zafiros de su prometida encima y asintió sin hablar, pues temía decir algo indebido que la hiciera enojar.

━━━ ¿Podría yo, Ariana, tener el privilegio de entregarle el emblema de honor al duque? ━━━ aquella pregunta pareció despertar algo en Karminne, pues su sangre hivio casi como si estuviera al fuego vivo cuando el emperador despreció al príncipe Bavilo y favoreció a su hija.

Y finalmente la bomba estalló cuando Haveron bajo la cabeza, frustado por no poder ayudar a su hermano mayor debido a que el ojiverde se consideraba demasiado débil.

━━━ Su majestad ━━━ llamó la rubia cuando el emperador coloco el emblema del duque Phantom en manos de la princesa ━━━ Si la princesa Ariana tendrá el honor de entregar el emblema del duque Phantom, me parece justo que el príncipe Bavilo entrege el de la duquesa Whalfort.

Silencio.

La cara de la princesa era un poema que la joven De Nox deseo plasmar en un papel para conservarla por siempre y reírse de ella.

Uno por uno, los nobles y demás personas del salón apoyaron a la heredera de Celestinna. "Es lo justo" decían algunos. "El emperador no se negara, el príncipe Bavilo es su primogénito ahora" murmuraron otros pensando en el difunto príncipe Ares. "Se negara, solo le concede estas cosas con la princesa" se atrevieron a soltar unos pocos y el emperador fruncio el ceño. El era Jaider de Secramise, el emperador invencible, era justo.

Pero también un padre débil ante su hija. Y conocía bien a Claude como para saber que su hija no hablaría sin in plan de respaldo.

━━━ El príncipe Bavilo de Secramise tendrá en honor de entregar el emblema a la duquesa Whalfort ━━━ declaró el emperador tras unos eternos segundos.

Karminne sonrió levemente al ver un brillo de alegría en los ojos del príncipe mayor al ser tomado en cuenta por su padre, mientras una tímida sonrisa se poso en los labios del pelinaranja. Ariana estaría furiosa quizás, pero no importaba.

━━━ Gracias ━━━ musito el ojiverde sin poder creer lo maravillosa que era su prometida y sin notar el tenue rosa en las mejillas de la rubia.

SATINNE FRUNCIO EL CEÑO CUANDO VIO A LA PRINCESA bendecir a Nell en lugar del emperador, quien permanecía detrás de ella. ¿Era alguna especie de broma? Se suponía que el emperador les entregaría los emblemas, no una princesa mimada.

Cuando su momento llegó, Satinne solo pudo perderse en el sonido de la brisa y los reclamos del emperador gracias al beso escandaloso y con intención profana que la princesa le dio a su compañero de batalla.

Unos pasos firmes pero de alguna manera nerviosos de acercaron a ella. La mujer sólo se dejó bendecir sin despegar la mirada de la banda morada en el pecho de chico, quien apenas la revasaba con unos cuatro centímetros. La voz del príncipe se perdía en la brisa y casi acariaba sus oídos como la seda. Estaba nervioso, era algo adorable a sus ojos.

━━━ Duquesa Satinne Whalfort, le otorgó el emblema de honor, de modo que siga consagrandose para prestar servicio a nuestro imperio. ━━━ la voz suave y firme del joven fue como un consuelo para su orgullo herido al pensar que quizá el mismo emperador había desistido de entregar el emblema y su esfuerzo en batalla no ubiera servido de nada.

━━━ Yo, Satinne Whalfort, acepto este honor, y juro servir al imperio de Arbezela con cuerpo y alma hasta el fin de mis días ━━━ la mujer alzó la mirada y por un momento el tiempo se detuvo para los dos.

Gracias a la iluminación del sol mañanero y la hermosa decoración, la joven duquesa tuvo ante sus ojos la aparición de un ángel que parecía tener las alas rotas. Había escuchado del príncipe Bavilo, actual primogénito del emperador, un joven parecido a su padre que cada día se esforzaba por ser mejor, pero siempre era aplastado por al perfecta princesa.

━━━ Dicen que la guerra es un arte ━━━ le dijo ella frente a el cuando estuvo de pie ━━━ Pero mis ojos nunca habían visto a un ser más hermoso que usted...

Mi emperador, declaró y pensó la duquesa en su mente al inclinarse una vez más frente al príncipe Bavilo, un ángel en la tierra, algo mejor que un dios encarnado.

El príncipe sintió su corazón estallar, pues la duquesa era una mujer valiente, hábil y hermosa que lo estaba alagando. El emperador fruncio el ceño. La princesa bufo molesta por que Bavilo se convirtió en el centro de atención del lugar, mientras Nell Phantom solo pudo sentirse extrañamente disgustado.

Holis

Que opinan? Les gusto?

Por que creen que a Karminne le desagrada Ariana?

En fin, adiós