—Estudiantes, esto va en el examen —amenazó el profesor al ver que nadie le prestaba atención— Empezaré a borrar —volvió a amenazar con una sonrisa al ver que todo el mundo empezaba a copiar como si su vida dependiera de ello—.

Maldito profesor. Fue lo que pensó el pelinaranja antes de copiar lo más rápido que su mano permitiese.

—JiMin, te ves muy estresado hoy —dijo el peligris mientras jugaba con la mano del mayor—.

—No es nada Hyung —respondió restándole importancia— ¿Algo interesante el día de hoy? —preguntó mientras tomaba su leche de fresa—.

—Una chica de mi salón se trago una pluma brillante —dijo el mayor riéndose con su peculiar risa — ¡Tenía brillitos en la lengua! —exclamó explotando de risa y los demás le siguieron—.

—Ahora que lo mencionas —dijo el moreno calmando su risa — Hoy me llego una carta muy rara. Creo que es para ti, JiMin —explico con un poco de confusión entregándole el papel—.

¿Podrías darle esto a el chico que parece un Mochi?
Aja, si gracias :)🔪

¡Hola Mochi!

Disculpa por no poder dejar esta carta de nuevo en tu mochila, pero en mi defensa ¡Había mucha gente allí!

Todavía no es el momento de que sepas quien soy JiMinie y no lo intentes, perderás tu tiempo hermoso.

Cambiando de tema...

Me enteré de que te inscribiste en el concurso de talento, voy a estar allí, aunque no sepas quien soy voy a darte todo mi apoyo Mochi~

Nos leemos luego bonito~

—Ese tipo te sigue enviando cartas? —pregunta el mayor tomando la carta y leyéndola rápidamente — Y por lo que veo no sólo son un par —dijo mirando fijamente a su mejor amigo— ¿Cuántas cartas te a enviado? —preguntó seriamente entregándole la carta—.

—¿La primera cuenta? —preguntó a lo que el mayor sólo se encogió de hombros — Lleva cinco y no pienso denunciarlo Hyung —se adelanto al ver que su amigo quería tomar la palabra — Se lee muy buena persona, estudia con nosotros. No creo que nada malo pueda pasar —explico tomado sus cosas y llevándose — Voy a ir temprano a clases, nos vemos Hyung's —dijo llevándose y saliendo de la cafetería—.

Su admirador era buena persona, el pelinaranja lo sabía.