Día 27

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

What the hell am I doing here? ⊹

Apurando el resto de su cerveza, Park Chanyeol deseó no haber hecho caso al consejo de su amiga. El sexo, le había dicho esta, no va a sanar un corazón roto, pero un culo roto podría ser más divertido que encerrarse en su departamento a juntar moho. Y sí, reconocía que, aunque las palabras y la expresión de su amiga fuesen groseras y estúpidas, traían algo de razón.

La ruptura de su compromiso hace ya casi un año lo sumió en un estado de negación tal, que se metió de lleno en su trabajo e ignoró cualquier tentativa de relaciones sociales que le aparecieran en el camino. Además, estaba el asunto de sexo-gay-rico-pero-mal-visto que lo ponía nervioso. Tras separarse de Junghwa, era recurrente en sus fantasías la presencia de otro hombre tocándolo, seduciéndolo y haciéndole cosas que lo ruborizan furiosamente. Pero, francamente, no se veía a sí mismo en un romance con uno. Y tampoco sexualmente comprometido, porque le espantaban sus propios deseos. Y lo avergonzaban terriblemente, puesto que la educación cristiana que creía haber superado todavía lo mortificaba.

Mas Bae Irene era tan convincente cuando le soltaba aquellos discursos progres y otros tantos defendiendo las minorías ya no tan minorías y la libertad y la exploración y el autodescubrimiento, etcétera, etcétera, que se vio llegando al pub Pennyroyal tea y pidiendo un Gylean.

Tenía que reconocer que su reticencia a venir se borró cuando halló un ambiente tranquilo y discreto. No podía verse en un sitio con música demasiado alta y luces parpadeantes y cuerpos danzantes y sudorosos. Anticuado como se sabía, todavía prefería entablar conversación, y escuchar artistas locales en lo que bebe algo. Por eso, no fue difícil animarse con la banda de jazz que se presentó como Exo-soul.

—Son increíbles —dijeron a su lado y casi pensó que no hablaban con él por lo que vio de rabillo de ojo—. Mi primo es el saxofonista, ¿a que es talentoso?

Chanyeol observó al muchacho que se acercó a la barra y sintió un tirón en el estómago ante lo guapo que era. No era una belleza dura, de rasgos agresivos, sino suaves y juveniles. El mismo, además, vestía de traje como él. Tal vez saliendo del trabajo y llegándose hasta el pub para aliviar el estrés de la semana laboral.

—Lo es —asintió, bebiendo para dejarle al otro el intento de continuar conversación, pero pensó que mejor lo dejaba en claro él—. Mira, sé por qué estás aquí.

Las cejas se levantaron y la sonrisa que apareció dejó a Chanyeol momentáneamente sin habla.

—¿Sí? ¿Y qué hago aquí? —empujó la charla el otro, se le notaba divertido.

—Irene —dijo sin más, notando en la confusión del otro su punto—, no puede quedarse de brazos cruzados y dejarme solo —aunque de pronto se le ocurrió algo—. ¿O será que tú también...? Olvídalo, ya no importa. ¿Cómo te llamas? ¿En qué planta estás? Seguro sabes mi nombre, así que evitemos las presentaciones absurdas.

—Kim Seokjin, y de verdad, eres divertido. Me gusta.

—Por supuesto que te gusto, ¿no te mostró alguna foto mía antes de enviarte conmigo? —Chanyeol abrió los ojos asustado y aferró su vaso—. Dime por favor que no te envió mi perfil de Grindr, ¡ni siquiera sabía que estaba registrado allí hasta que un sujeto del trabajo me abordó en el baño! Fue vergonzoso, hombre, no te burles.

—Lo siento, pero reconoce que es gracioso. —La risa de Seokjin lo era, pensó Chanyeol.

La charla fluyó sin torpezas. Seokjin, descubrió gratamente Chanyeol, era un hombre divertido. No tuvo que lidiar con coqueteos burdos. Le fue sencillo y le halagó la evidente atracción de Seokjin. No recordó cuándo fue la última vez que se sintió tan confiado ligando. Aunque tampoco podía contar sus tentativas de ligues anteriores cuando lo que había buscado era orgasmos fáciles y sin nombres. Sin embargo, él confiaba en sus reacciones, como la aguda intuición que no le falla en los negocios e inversiones, para dar con la resolución de que Kim Seokjin podría ser un buen partido.

Sonrió pensando que Irene, de enterarse que estaba midiendo a su candidato como un prospecto, lo golpearía con la tablilla de gráficos de acciones. Aun así, se fijó el pendiente de agradecerle por ser tan metiche como para enviarle a Seokjin en una cita a ciegas totalmente trillada.

Frente a frente, sus rodillas se tocaban. Chanyeol por poco se corre cuando vio aquel pantalón de vestir formal tensarse en los muslos de Seokjin y lo prometedor que se veía su entrepierna. Por no decir que el que se haya desanudado la corbata y quitado el saco, como él aunque dudaba verse así de sensual, le daba un aspecto de modelo de perfumes o parecido. Irene, maldita loca, ¡gracias por este hombre!

La banda Exo-soul, tras un descanso en el que se presentó una solista y dos hermanos, volvió a tocar. Pero la hora corría rápido, al parecer, porque nuevamente se estaba despidiendo y Chanyeol observó a Seokjin llamar la atención de la mujer tras la barra para pagar su consumición.

—¿Eh? ¿Nos vamos?

—¿Quieres venir conmigo? —la boca de Seokjin brillaba en las luces tenues del pub y Chanyeol se vio incapaz de despegar sus ojos de ella—. Umm, ¿Chanyeol?

—No traje el coche, pero podemos caminar hasta mi casa —propuso, y en un arranque de valentía llevó la mano al pecho de Seokjin, para juguetear con los botones de su camisa.

Habían en su cabeza escenarios cachondos de Seokjin y él, pero el alcohol y el porno posiblemente no evitaran que, llegado al momento de concretar, esté nervioso. Las mamadas y las pajas con extraños en el baño de alguna discoteca no le dieron la suficiente instrucción sobre el sexo gay. Pero no se iba a echar atrás. Estaba más que dispuesto a intentar coger con Seokjin. Cogerlo o dejar que lo coja. ¡Anda que le gustó como para ser así de flexible!

—¿Hyung?

Chanyeol desvió la vista de Seokjin, siguiendo la mano que se posó en uno de los anchos hombros, para dar con un muchacho de piel morena y sonrisa encantadora. Este sacudió suavemente a Seokjin, pero lo observaba a él con curiosidad.

—Jongin, los alcanzo en la camioneta —Lo despachó Seokjin sin darle una mirada, aunque le explicó cuando este se fue—. Es mi primo, del que te hablé, el saxofonista.

—Oh, ¿te vas?

Soltó antes de poder esconder la desilusión. Seokjin tomó las manos que seguían sobre su pecho y tiró de ellas para acercarlo. Fue entonces que lo besó. Y si Chanyeol que se percibió achispado por el alcohol y mucho más acalorado por la presencia de Seokjin, no perdió un segundo antes de arrojarse a la boca contraria. La había deseado, ansiado probar la textura de semejantes labios que podrían haberlo asfixiado de no ser porque pudo mover la cabeza y permitirse un poco de espacio para tomar aire. ¿Cómo es que parecía un adolescente dando su primer beso? No, no podía dejar que Kim Seokjin se fuese de allí con la impresión de que era un idiota. Por lo que enredó una mano en el cabello negro de Seokjin y lo apretujó contra sí, devorándolo con la paciencia, pero insistencia necesaria, para dejarle en claro que sería una terrible equivocación no volver a verse.

Por fortuna, Seokjin captó el mensaje y le respondió con su lengua, jugando a probar y tentar, hasta que no pudieron alargar el beso porque voces lo llamaban. Suspirando con fastidio, Seokjin cortó el beso, no sin antes darle otro más húmedo y bruto, y se sentó recto en el banquillo. Chanyeol, que por lo caliente de su rostro y lo pesada de su respiración supuso que debía verse algo ridículo, le sonrió contento.

—Tiempo de ser honestos —dijo Seokjin con un brillo travieso en sus ojos. Buscó su saco y del bolsillo extrajo una tarjeta de presentación—. No tengo la más mínima idea de quién es Irene, pero cuando la veas, dale las gracias de mi parte por obligarte a salir.

Se despidió con otro beso de un aturdido y avergonzado Chanyeol, que le vio el culo mientras se marchaba. Bajó la vista y leyó Kim Seokjin, Lic. en Letras, Universidad Nacional de Seúl. Y un correo y un número. Oh, bien, al menos no rompería la regla de la empresa de no relaciones entre el personal.



Nota:

Con lo que me cuesta ser constante, Wattpad no me dejó publicar a tiempo el día 27, loco. Cuando apenas tenga escrito el otro, bueh, vamo' con el día 28 como si nada pasó jaja

En fin, para quienes lleguen aquí y no sepan a quienes se menciona; por orden: Chanyeol, integrante de la banda Exo; Irene, líder de Red Velvet y tercero, Dios.  Todos talentosísimos, claro está. Lamento si la calidad de la imagen no hace justicia a estos seres divinos, culpa de wattpad, como siempre.

En multimedia el cover de Creep que hizo Chan y que amo ♡ Como soy pésima para poner título, vamo' con frase la canción jajaja

Tenía pensado ya hacer un Jinchan, Anaka, pero no sabía cuando y luego vi la imagen de tu historia y listo, aquí 'ta.

Miedo a una relación se me ocurrió como algo bajón, pero quise hacer algo gracioso porque sí.

Quejas:

:)



Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro