Capítulo 8

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Decia POV

Sentía la fría pared en mi espalda, me sostenía con sus grandes manos las mías, mientras me arrancaba la ropa, no sabía que hacer todavía estaba débil tras la cirugía y mi brazo cibernético aún no me respondía correctamente, me llevaría un tiempo lograr manejarlo correctamente.

-¿Qué...qué mierda haces? -No respondió porque segundos después tenía su boca pegada a la mía.

-Espero ser el primero, en estar dentro de ti. No me gusta compartir. No te preocupes que tú serás la primera para mí; ninguna mujer había despertado esto que siento, solo tu. Cuando te vi luchar mi sexo se endureció, no entendía esa condición, hasta ahora -Azai me tenía inmovilizada, sería una hipócrita si dejara que no esté excitada, sin embargo, no se lo pondría fácil.

Comencé a forcejear, a pesar de mi brazo nuevo su fuerza era mayor me levantó con un solo brazo para llevarme a la cama, me gané un par de nalgadas, que sin dudar su mano quedará marcada. Después de esas nalgadas el calor en mi entrepierna aumentó.

-Quédate quieta, Decia -Azai termino de quitarse la ropa, estaba tan anonadada que obedecí.

Lo sentí abrir mis piernas y acariciar mi sexo con su nariz, su lengua acarició mi abertura, enviándome descargas eléctricas a lo largo de mi espina dorsal; gemí involuntariamente, Azai gruño satisfecho por mi reacción.

Me lamió a lo largo de mi canal sin detenerse, las piernas me temblaban, quería cerrar mis piernas a pesar del placer extremo que sentía, para colmo el bruto entre mis piernas las mantenía abiertas con sus grandes manos. Un calor comenzó a crecer en mi vientre, haciéndome perder la cordura, mis caderas se frotaban con fuerza en su rostro buscando alivio, mi mente estaba nublada, no podía pensar, mi mente estaba en blanco, hasta que mi vientre estalló, algo escurría entre mis piernas. No supe que era ya que el Cyborg se encargo de lamer todo lo que salía de mi sexo.

-Prepárate para recibirme -Me hablo al oído, causándome un escalofrío en mi cuerpo.

-Deja de hablar -Le respondí, estaba ansiosa, y me daba rabia porque me estaba entregando en bandeja de plata.

Se acomodó su miembro en mi entrada, sentía su calor, mi cuerpo sudaba helado pese a tener su cuerpo caliente sobre el mío. Azai es tan grande que logra cubrir por completo mi cuerpo, pude apreciarlo mientras lo miraba por encima de mi hombro.

-No se muevas, iré despacio. Por favor dime si te duele y me detendré -Hablaba en mi oído con voz ronca, sentía que me desvanecería en cualquier momento, el bruto es sensual sin proponérselo.

Su miembro caliente, duro y grande se abría espacio en mi interior, me dolía y me excitaba por partes iguales, hasta que llego a ese punto en que si continuaba mi virtud se iría para más no volver. Azai se detuvo, hablándome al oído.

-Tu dirás si me detengo o continuo. Serás mía por completo -Su respiración era errática en mi nunca. Empuje mi trasero hacia él en un una respuesta silenciosa a su pregunta.

-Lo quieres, lo tendrás -Me beso en la nuca, para luego empujar su miembro por completo en mi interior, el dolor es agudo, unas lágrimas se me escaparon de los ojos.

-Te dije que, si dolía, me lo dijeras -Volteó mi boca y me beso con posesividad.

Nos quedamos quietos mientras, el dolor se hacía pasajero, mientras mis músculos vaginales se estiraban por completo. Cuando el dolor había pasado, comencé a moverme haciéndole saber que estaba lista para continuar.

Sus embestidas fueron en aumento, su mano derecho rodeo mi cintura para tenerme controlada, el placer que sentía era indescriptible, me sentía mareada, en el ejercito nunca te preparaban para esto.

La respiración se me atascaba, comencé a jadear, el calor de nuestros cuerpos aumentaba con los minutos, mis piernas me flaquerón en el momento que el universo explotó en mi vientre. Grité en el momento de mi orgasmo, Azai no dejaba de moverse en mi interior alargando mi orgasmo, hasta que lo oí gruñir con su orgasmo, su venida me inundó haciendo que se escurriera por una de mis piernas.

Los dos caímos en la cama, Azai estaba a mi espalda, me acerco a él con su miembro en mi interior, a pesar de lo que habíamos hecho este no se ablandaba, aún seguía suro dentro de mí.

-Descansa un poco, que esto no ha terminado, quiero seguir oyendo tus gritos -Me beso en la cabeza, luego me quedé dormida.

Al día siguiente me levanté, miré el reloj de la mesa de noche, las dos de la tarde, habíamos amanecido teniendo sexo en todas las posiciones que nunca imaginé que existieran. No voy a anegarlo, algunos de mis compañeros de regimiento, mantenían revistas porno en sus mesas de noche y muchas veces no reparaban en compartirlas, ahí logré ver algunas de las posiciones que hice con Azai.

-¡MIERDA! -Grité cuando traté de levantarme, todo me dolía y peor aun quería que el siguiera montándome, lo más seguro es que pronto se acerca mi periodo.

-¿Qué sucede? -Marfa entró apuntando con un arma a todos lados.

-No, no pasa nada. Solo que me duele... -Me quedé en silencio, como le iba a contar lo que hice con su hermano.

-Nada, no pasa nada solo que me -El calor se apoderó de mi cara y la vergüenza hizo que me tapara la cara con la sabana, recordando también que estoy desnuda.

-No te preocupes, sé lo que paso entre ustedes. Por cierto, Azai, se fue a entrenar, dejándome a cargo de tu cuidado. ¿Necesitas algo? -Sentía su mirada sobre mí.

-Ropa, necesito ropa, por favor -Respondí avergonzada.

-Bien iré a buscar algo para ti. Mientras ve a ducharte e iremos a comer algo. Tu cuerpo necesita recuperar energía -La oí salir y corrí al cuarto de baño.

Al salir de la ducha mi cuerpo estaba lleno de moretones, las marcas de las manos del bruto que me cogió como loco la noche anterior.

-Aquí está tu ropa Decia -Grito Marfa.

-Me esperas afuera, por favor -La verdad no quería que me viera las marcas en mi cuerpo.

Minutos después vamos de camino al comedor común, donde había algunas personas me miraban, miradas curiosas, veían mi brazo, que hasta el momento se me había olvidado de que es cibernético. Comimos bajo la atenta mirada muchos que hablaban bajo para no ser escuchados.

-¡SE CALLAN! Si tienen algún problema con ella arréglenlo con Azai o conmigo. Ella es la mujer de mi hermano -La tomé de la mano y le pedí que nos fuéramos.

-Vamos, ya he terminado. Deseo entrenar de nuevo, me estoy oxidando -Le sonreí. Ahora entendía porque estaban molestos por mi presencia. Ellos ahora se habían vuelto mi familia.

Llegamos al área de entrenamiento, vi al hombre que me había reclamado entrenar como un gladiador, a mi mente llegó el recuerdo de lo sucedido la noche anterior regresa a mi mente y mi sexo comienza a humedecerse.

Nos sentamos a mirar, el entrenamiento de combate mano a mano, había que ser honestos, Hill había puesto mucho empeño en Azai, él es uno de los Cyborg más desarrollados que he visto en esta isla, sin involucrar a los que les incluyeron ADN animal. Suspire, me había prometido no ceder en nada con este hombre, no obstante, tenía que afrontar mi realidad, ya no hay un lugar para mi en la ciudad, esta isla ahora es mi hogar.

Un hombre llego corriendo, interrumpiendo el entrenamiento.

-Debemos poner en acción el módulo de ocultamiento. Hemos detectado aviones en la zona -Azai me miró. Entendí que tenía que ver con mi progenitor.

-Marfa lleva a todos a los refugios por si deciden bajar en paracaídas y el sistema de ocultamiento no funcione -Le hablaba a Marfa sin dejar de verme.

-Vamos a llevar a todos a los refugios -Tome a Marfa del brazo para marcharnos.

Espero que no nosencuentre porque puedo jurar que esto es obra de mi padre.



https://youtu.be/zKZwzQ6MkD4


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro