❝Invitación❞

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Daia veía la última invitación a su fiesta de cumpleaños en su escritorio, con sus ojos entrecerrados veía el pergamino como si tratará de quemarlo.

-¡Solo entrega la maldita invitación!- Se quejó Oliver saltando a su cama.

Ella decidió no responderle, pero de igual forma guardó el pergamino en su chaqueta negra y suspiró.

-Te veo después del partido- Comenzó acercándose al castaño-Eres muy talentoso, sé que vas a jugar pronto- Aseguró besando su frente.

-Eso espero porque estoy cansado de estar en la banca, te amo pelirroja-

-¡Yo igual chico quidditch!-

La chica cerró la puerta de su habitación y bajó las escaleras hasta la pequeña sala de estar del departamento que compartía con su mejor amiga en Londres.

Sin embargo Casey Holly estaba ahora mismo en Escocia, ahí había estado los últimos cuatro meses, jugando para las arpías de Hollyhead, y no, no es coincidencia su apellido, su madre es la dueña del equipo.

Había días en que ella realmente extraña a Holly, encontrarla dormida en el sillón en una posición completamente extraña era su parte favorita del día y ahora no está, la hacía sentir sola.

Salió del apartamento cerrando la puerta tras ella y bajó las escaleras que la llevarían a las calles londinenses repletas de muggles que no sospecharían que ella iba pensando en su castaña mejor amiga que debía estar volando en una escoba ahora.

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Al llegar la hora en que tenía que asistir todo el personal del ministerio a una reunión en lo que se le llama "el domo", que es donde el ministro da sus discursos, Daia se armó de valor para entregar la última invitación que permanecía en su bolsillo.

Salió con todos los demás magos y brujas sombra detrás de su jefe, al llegar al lugar cada uno se fue por su lado y ella se decidió a buscar a su último invitado antes que a Percy.

Tragó seco cuando vio a unos metros a dos hombres con túnicas negras que hablaban y sonreían apoyados en una estatua.

Se acercó mientras pensaba en qué le iba a decir, pero en ese momento no se le ocurrió nada, ¿Cómo era posible? Había estado practicando por una hora, pero claro que ella nunca fue buena en cosas familiares.

-Buenas tardes-Llamó la atención de los dos mayores.

-Daia/Malfoy-Respondieron Sirius Black y James Potter a la vez.

-Sirius, quisiera darte algo-

-Dime tío, Daia, por favor- Pidió el ojigris con una sonrisa amable.

Ella lo consideró por un segundo, realmente estaba no acostumbrada a llamar así a nadie, nunca tuvo un tío o una tía, pues Bellatrix Lestrange, la única tía que había conocido, fue encerrada en Azkaban cuando ella tenía 5 años.

-Por ahora va a ser Sirius ¿Si?- Ofreció los más amable que pudo, él hacía un esfuerzo y ella podría hacerlo también.

-Como desees pequeña, ¿Qué querías darme?-

-Un laxante- Contestó James irónico.

-Un pergamino para ti y un golpe para él- Contestó la Malfoy señalando al Potter al decir lo último.

Le extendió el pergamino a Sirius que sonrió al leer su contenido, parecía tan feliz de tener una invitación a la fiesta de su sobrina.

-Ahí estaré pequeña, lo prometo, muchas gracias-

-Bien, te veo ahí Sirius y puedes llevar un cita si quieres-Ofreció la pelirroja antes de irse.

-Como si Canuto hoy en día tuviera citas- Se burló el azabache de nuevo.

-Cállate que ni siquiera haz besado a alguien en 4 años-Contestó Sirius a su amigo.

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Al volver al departamento de misterios los magos y brujas sombra no dejaban de reír de la imitación de Damon, uno de los magos sombra y que a parte posee el don de la metamorfomagia, imitaba al ministro casi a la perfección.

-Debemos luchar-Decía el metamorfomago que fingía ser el ministro de magia-Y es muy fácil para mí decirlo desde la comodidad de mi...-

Todos dejaron de reír y él de hablar al ver que el departamento estaba lleno de arreglos florales de color escarlata y una enorme "D" hecha con rosas estaba en medio de todo.

-¡¿Quién hizo que mi departamento parezca el jardín de El Edén?!- Gritó Kingsley.

-Ya escuchaste Damon, quítate la ropa-Bromeó Aurius al chico.

-Nadie quiere ser castigado de esa forma-Siguió Daia-Dijo El Edén no el infierno-

Una risas se escucharon haciendo que Damon le saque la lengua a su compañera de trabajo.

Finalmente la chica Malfoy avanzó y tomó la tarjeta en medio de la enorme "D" de rosas, se sonrojó al ver que tenía su nombre.

-Al parecer es mi culpa-Anunció a todos haciendo que se rían.

-Comparte de la amortentia que usaste chica- Contestó la voz burlona de Nymphadora.

Todos se voltearon para ver a los visitantes que llegaban por el pasillo, aurores, genial como si se llevarán tan con los magos sombra.

Nymphadora Tonks, James Potter, Sirius Black y un hombre que ciertamente parecía de todo menos auror, Remus Lupin, se acercaban por el pasillo.

-¿Qué significa que es tú culpa Daia?-Preguntó Kingsley a su alumna sin prestar atención a que los dos Sub-jefes del departamento de aurores se reían de cómo lucía el lugar.

-Es que la tarjeta tiene mi nombre, pero yo no sabía señor-

-¿Algo que quieras compartir con la clase Malfoy?- Se burló Damon provocando que Daia lo vea mal.

Pero Kingsley no bromeó al hacerle una señal a la ojigris para leer la nota en voz alta ante todos.

-Te voy a matar pasa arrugada-Murmuró la chica antes de iniciar.

❝Primer regalo de Veinte regalos para ti, mi adorada pelirroja...

Feliz cumpleaños adelantado Daia Narcissa Malfoy, te amo muchísimo.

Aún cuando no estoy contigo ahora te juro que te pienso todos los días, te extraño.

Atte: C. Holly❞

La nota hizo sonreír a la Malfoy, Holly y sus enormes regalos nunca faltaban en su cumpleaños ¿Cómo pensó que lo había olvidado este año?

Desde pequeñas Casey Holly y Daia Malfoy competían por quién daba a quien los mejores regalos en sus cumpleaños, una batalla reñida según Percy y Oliver.

-Parece que Malfoy tienen novio, que lindo, hasta parece que tiene corazón-

-Cállate Damon, no sabes nada- Soltó enojada la Malfoy.

-Suficiente, Daia saca este jardín de mi departamento ahora y luego vas a mi oficina, Potter, Black, Tonks, vengan conmigo- Terminó Kingsley.

Daia suspiró antes de hacer lo que su jefe le había pedido, sabía que ahora su departamento estaría probablemente a reventar de flores, pero no podía dejarlas ahí.

Al terminar se puso su capa del uniforme que la identifica como una bruja sombra y se dirigió a la oficina de su jefe, una vez tocó la puerta y le dieron permiso de entrar se acercó a Kingsley y se quedó en silencio.

-Daia, la misión de Sirius y Nymphadora para recaudar información fue todo un éxito, sabemos donde se escondieron varios de los mortífagos que atacaron el mundial- Informó el jefe del departamento de misterios.

-¿Y me lo vas a decir o adivino?- Preguntó sonriendo la pelirroja.

-Veo que la irreverencia no es sólo contra mi- Murmuró James Potter cerca de la pelirroja.

Ella lo vio molesta y estuvo a punto de decirle que realmente no es irreverencia si él no tiene mayor autoridad frente a ella, pero se quedó callada al ver la mirada de su jefe.

-Se esconden en Brasil, querida, viajarán ahí en dos semanas, luego de tú cumpleaños-

-¿Cómo dijo?-

Nota:

Buenassssss❤️

No me morí gente, solo tenía exámenes. 😂❤️

¿Qué les pareció el capítulo de hoy?🥺❤️

¿Tienen alguna teoría? 🤔

¿Qué piensan de la amistad de Daia, Oliver, Percy y Holly? 🥺❤️

Casey Holly mi patrona. 🛐🛐

¿Se dan cuenta que él grupo de ellos se conforma por el chico y la chica quidditch y por los dos pelirrojos?🥺❤️💚

¿Qué piensan de que Sirius se este esforzando por conectar con Daia? 🥺🥰

¿Qué creen que pase en la fiesta de Daia? 😶

¿Y en Brasil? 😶

¿Qué piensan hasta ahora de Daia y James? 🥺❤️💚

Bye. ❤️💚