Capítulo XVI:

El vehículo en el que iban aquellos dos milicianos iba a toda velocidad por las calles de aquella Ciudad, en donde el caos se había desatado con todo su potencial, golpeando como una ola contra la costa y los zombies venían en masa. Los muertos vivientes eran abatidos por los militares y la Policía, sin embargo, éstos se reagrupaban cuando una línea caía y otra llegaba para reemplazarla. Los disparos se volvían cada vez más incesantes. Se había desatado el Infierno y el fuego iluminaba la Oscuridad, alejándola cual Sol arriba para terminar con aquella parte opuesta, pero bajo un color naranja y rojo proveniente de los edificios, negocios y domicilios que eran incendiados por saqueadores o por fallas en la electricidad.

- Wow, esto es mil veces peor que lo ocurrió hace tres años.- Miraba Earl con asombro por la ventana del lado derecho, en donde la tensión bajaba y los faroles junto a las luces de los inmuebles titilaban repetidas veces.

- Este pueblo va a caer en cualquier momento. Toma el teléfono y llama a "Defalt". Nos reuniremos con los demás en la Ciudad de Chicago.- Pidió su compañero, quien tenía la vista clavada en el camino.

No se dijo más y Earl llamó a aquel joven hacker.

- ¿Diga?.- Preguntó "Defalt" desde su escondite.

- Soy Earl, escuche, Jefe, tenemos un problema: Se nos adelantaron los zombies.- Le contó aquel miliciano.

- ¡Idiota, ¿acaso tus padres son hermanos?! ¡Les di una orden, una sencilla y era matar a Nicole y su hijo!.- Bramó el hacker, quien golpeó la mesa con el puño cerrado.

- Está furioso. Qué hijo de puta. Nosotros haciéndole el trabajo y él sentado como un Rey.- Le susurró Earl a su colega.

- "Te escuché, imbécil. Ahora póngase las putas pilas y vayan con los demás a Chicago. Ahora o se termina nuestro contrato".- Advirtió el DJ, quien colgó y dejó un profundo silencio entre los milicianos.

El amigo de Earl detuvo el coche y giró violentamente en "U", poniendo rumbo hacia aquella posición.

- Si salimos vivos de ésta, juro que yo mismo me ocuparé de la "Milicia de Pawnee". Las cosas eran más sencillas bajo el liderazgo del Capitán Hugo.- Habló aquel moreno con rabia en su voz, mientras que pisaba el acelerador de la camioneta.

- Lo sé, Bryan, lo sé, pero si no hubieran existido traidores entre las filas, aún estaríamos en lo nuestro.- Se encogió aquel rubio de hombros.

- Esos malditos, me cuesta creer que hayan vendido a Hugo al "Chicago South Club". Son hijos de puta, Earl, no son Patriotas, sino perros falderos que se venden por un puñado de billetes. No conocen nuestra causa.- Sostuvo Bryan, mientras que dejaban atrás aquella ciudad, la cual comenzaba a arder como Troya.

- Muy bien.- Dijo Takashi, quien había tomado asiento frente a las pantallas para ver la situación en la Ciudad.-

- Miren allí. Oh, mierda y yo que amaba ir a ese restaurante y lo saquean todo.- Señaló Jordi hacia ese sitio, lanzando un lamento.- Bueno, si no tocaron la "Pizzería Domino's", todo bien.

- La esperanza es lo último que se pierde, amigo.- Sostuvo el novio de Rei, quien era instruido por Saya y los conocimientos que había aprendido gracias a Aiden cuando se encontraban en la "Estación del Ctos".- Bueno, por suerte tenemos nuestra propia red eléctrica en este sitio, ya que en el resto de la Ciudad hay caídas constantes en la tensión.

- En la radio habían dicho de que había vuelto en gran parte del Estado de Ohio y alrededores.- Recordó Tobías, quien se encontraba jugando a las cartas con "T-Bone".

- Así es, pero si la Central Eléctrica de Chicago tiene fallas, entonces no puedes proveer de este servicio a toda la Ciudad.- Recalcó el castaño y de ahí pasó a otras imágenes.- Hmm, parece que "The Wards" tuvo un funesto final, salvo por los "Apartamentos Rossi-Fremont", donde los "Viceroys" de ese tal "Bedbug" se mantienen en sus posiciones junto a su líder.

- ¿Qué hay del "Chicago South Club"?.- Preguntó Jordi, quien se encontraba mirando todo en las pantallas.

No le tomó mucho tiempo al chico poder hallar la respuesta que buscaban: Ante sus ojos podían ver el "Hotel Merlaut" convertido en una especie de "fortaleza", las calles y barrios pegados a ese emblemático edificio estaban cerradas con todo tipo de barricadas e incluso se había diseñado algunas como empalizadas, donde muchos zombies habían hallado su fin y otros se revolvían con torpeza, desgarrándoles aún la carne putrefacta y regando el piso con sus intestinos. Los Mafiosos montaban guardia y mostraban su poderío armamentístico, así como logístico para aprovisionar de comida y otras necesidades a sus allegados.

- Bueno, se que es como estar de vacaciones.- Lanzó Saya aquel comentario ácido hacia la Mafia.

- Así son esos desgraciados, pero me llama la atención los "Fixers".- Dijo el peli negro Oriental.- Ellos deberían de estar en alguna parte.

- O tal vez se fueron de la Ciudad.- Oyeron la voz de Hirano, quien traía un café recién preparado.- ¿Alguien desea uno de éstos?.

- Sí, uno para mí, por favor.- Le pidió la peli rosa.- Ésta va a ser una noche muy ocupada para mí.- Recalcó, mientras que se sentaba en otra silla y trabajaba con el "Ctos".- Es raro que en Pawnee no pueda acceder a su red, es como si hubiera alguna señal de interferencias.

- O tal vez haya caído. Es probable.- Lanzó Hirano su teoría y fue preparando aquella bebida caliente, la cual repartió entre sus amigos.

Por aquel entonces, los chicos se encontraban esperando a que Aiden y Saeko volvieran de aquella ciudad junto a Nicky y Jackson. Apenas había pasado una hora, mientras que continuaban aprendiendo a cómo manejar aquel sistema y seguir con la búsqueda de "Defalt", quien estaba bien escondido, ocultando sus huellas a toda costa.

- El perímetro está despejado. Los puentes permanecen cerrados, así que somos el único bastión, junto al de la Mafia y los "Viceroys" de "Bedbug" que resisten a los zombies.- Informó Saya desde su silla.

- Sí, además de que el "Puente" que establecimos con aquella estación del "Ctos" sigue en funcionamiento junto a la red eléctrica.- Añadió Takashi, quien monitoreaba todos esos sistemas que estaban en marcha.

Solo quedaba la vuelta de aquellos que habían salido hacia las afueras de Chicago.

El coche de Aiden viajaba a toda velocidad, dejando atrás la ciudad y se internaban en la ruta para volver al punto original. Nicky permanecía callada pero podía verse una sonrisa de "complicidad" hacia su hermano, debido al asunto de Saeko. La Capitana del "Club de Kendo" permanecía a su lado, mientras que un profundo silencio yacía allí, instalado, manteniendo a todos callados hasta que fue Jackson quien articuló sus oraciones hacia su tío.

- ¿Adónde vamos?.- Preguntó el chico.- ¿Es seguro ese sitio?.

- No te preocupes, los llevaré al "Búnker", allí se encontrarán con los demás. Takashi y sus amigos deben de haber llegado.- Respondió Aiden a su sobrino, mientras que se veían un par de coches incendiándose, cosa que llevó a que Nicky le tapara los ojos a su hijo para que no viera el destino de esas personas, además de que algunos zombies, envueltos en llamas, seguían caminando e iluminaban la ruta como antorchas.

- Creo que hay algo más que me estás debiendo, hermano.- Sostuvo la rubia, mirándolo de cerca.- ¿No crees?.

- Nicky, te dije que lo hablaríamos más adelante.- Intentó poner paños fríos a la situación, ya que no era era un buen momento para discutir el asunto.

- Oh, vamos, hermano, no seas así, de seguro tienen mucho qué contarnos. Por favor, dinos cómo es que se conocieron.- Pidió Nicky para romper el hielo y el silencio que cundía allí.- Estoy segura de que la Señorita Busujima Saeko querrá decirnos lo suyo, ¿no?.

Las mejillas de la Capitana se volvieron carmesí ante esas palabras, no eran de burla ni tampoco para querer intimidarla, sin embargo, no creía que ese fuera el momento para poder relatar sobre la aventura vivida en Tokonosu. La chica no podía ocultarlo, miró a su novio desde su asiento, reflejada en el espejo retrovisor y de ahí éste se hallaba pensativo en lo que iba a decir al respecto.

- Estoy de acuerdo con tu hermana, Aiden: Debes decirlo, además, no es nada malo.- Sostuvo ella con sinceridad.

- Pero...- Iba a decir algo, sin embargo, al ver esa dulce sonrisa que tenía la peli lila le llevó a que se lo replanteara.- Sí, tienes razón, Saeko, es mejor contarlo.- Finalizó y tomó aire para dar a conocer los detalles de esa historia.

¿Cómo le contarías a alguien sobre una relación, en especial si se trataba de alguien frío como él?. Aiden vislumbró el camino, aún quedaban unos kilómetros hasta llegar a su destino, las columnas de humo provenientes de los autos volcados e incendiados seguían aumentando y eso podía presagiar de que algo más estaba por ocurrir. El coche fue ingresando en el mismo túnel de antes, por el carril de la vuelta y con las luces que titilaban repetidas veces.

- Todo ocurrió hace tres años, Nicky.- Comenzó Aiden con el relato.- Después de haber eliminado a los causantes de la muerte de Lena, decidí tomar un tiempo para descansar, además de cerciorarme de tanto tú como Jacks estuvieran a salvo, estuve buscando un sitio donde me podría alejar de las persecuciones y luchas contra la corrupción y bandas criminales, por lo que me fui a Japón. Llegué a Tokonosu, donde el destino mismo parecía estar siguiéndome a todo momento, ya que me topé con una "Central del Ctos" abandonada y no podía dejarla atrás; pero para poder acceder a ella, necesitaba a mezclarme entre la población local, por lo que escribí un "Currículum Vítae" e ingresé en la "Academia Fuyumi" cuando...- Hizo una pausa y todos los miraron, a la espera de respuestas.- Bueno, cuando llegó aquel día en el que el Mundo se hundió por completo. Fue todo un caos, un Profesor se encontraba ordenándole a un sujeto que se fuera pero no respondía, así que lo tomó del cuello pero lo mordió tan fuerte en el brazo que lo dejó muerto hasta que revivió y atacó a los otros que se encontraban allí. Estalló el caos, los zombies comenzaban a multiplicarse y había destrucción por doquier. Primero tuve mi encuentro con Takashi Komuro y Miyamoto Rei. De ahí se unieron Takagi Saya y Kohta Hirano junto a Busujima Saeko y la Doctora Shizuka Marikawa. Escapamos de la "Academia" en un bus pero tuvimos que llevarnos a un malnacido e hijo de un Senador corrupto y a sus estudiantes, encima quiso hacerse el amenazante conmigo pero logré cerrarle la boca, además de contar con el apoyo de mis amigos.- Fueron muchos acontecimientos, en donde tuvimos que sobrevivir a los zombies, tener encuentros con gente muy peligrosa y demás, pero logramos escapar de ese Infierno.-

- Se te olvida una cosa, Aiden.- Señaló Saeko con una pequeña risa.

- Oh sí, perdón, cariño.- Ofreció sus disculpas.- Bueno, ella me respaldó cuando Shido Koichi hablaba mal a mis espaldas y cuando tuvimos que dividirnos en dos para poder escapar de una emboscada zombie, la cual ocurrió a los pies del "Puente Obetsu", nos dirigimos hacia el Templo Shinto donde Saeko entrenaba "Kendo" junto a su Sensei, pero cuando llegamos, la familia de éste se habían convertidos en muertos vivientes y tuvimos que darles muerte para sacarlos de su miseria.- En aquel momento se vio una escena de los hijos del Sensei de Saeko, los cuales eran zombies y fue ella quien los mató.- Fue un momento muy duro, pero cuando hablamos de diversos asuntos, en especial de todo lo ocurrido aquí, sin olvidarme de la muerte de Clara Lile, descubrimos que teníamos algo en común: Pasamos por malos momentos, tiempos oscuros. Y fue entonces que nos declaramos, mutuamente, nuestro amor.- Relató Aiden, palabra por palabra, cada uno de los acontecimientos.

Nicky no podía creer lo que acababa de escuchar, su cerebro estaba procesando toda esa información ocurrida hacía tiempo atrás, por lo que notó que tanto Saeko y Aiden yacían mirándola desde sus puestos.

- Bueno, bueno, ¿así que mi hermano se consiguió novia en medio de la "Pandemia Z"?. Jejeje, te tengo que felicitar, Aiden y lo mismo para usted, Señorita Busujima.- Dijo la rubia a ambos.

- Por favor, llámeme Saeko, no hace falta ser tan formal.- Sostuvo la peli lila con amabilidad.

Aquella revelación fue bien recibida por la hermana del castaño Nor-Irlandés, una carga menos en su consciencia, una que pudo haber esperado pero las circunstancias no estaban de su lado con aquel desastre zombie sobre el Mundo.

Sin embargo, desde su escondite, "Defalt" estaba intentando hallar el rastro de sus enemigos, era como si intentaran camuflarse de él, pasar detrás suyo, bajo sus narices, por lo que debió iniciar una búsqueda satelital. No importaba nada si usaba uno de esos artefactos que se hallaban en el Espacio, total, la "NSA" ya estaría convertida en zombies, así que inició su labor. No le tomó mucho tiempo, su convicción crecía cuando notó que uno de los satélites había "cedido su puesto" y dio por iniciado un rastreo de las rutas.

En pocos segundos se materializó un mapa y un punto surgió allí, moviéndose. Tecleó rápido, seguro de lo que hacía y cuando pudo distinguir a los que ocupaban ese vehículo, una sonrisa de pura maldad se dibujó en su rostro.

- ¿Así que te me adelantaste, Aiden?. Qué lástima.- Se burló y de ahí empezó con la siguiente fase de su plan.- Atención, Milicia de Pawnee, tengo la posición de Aiden Pearce y su gente: Se dirige al "Búnker". Les envío las coordenada.- Informó "Defalt" y de ahí cumplió con su palabra.

Unos segundos después de haber enviado el destino de aquella gente, la caravana de milicianos puso rumbo hacia aquel sitio. Una guerra iba a estallar en cualquier momento y marcaría un antes y después en los acontecimientos presentes.

[Les aviso que el capítulo que viene va a ser más largo y más con el avance de la "Milicia de Pawnee", a prepararse.

Mando saludos y agradecimientos para daniele853, Linterna Verde Franco, Tarma Jones y los demás seguidores.

Cuídense, amigos y buen inicio de día Jueves de mi parte.].