Capítulo 21: Misterios de Luna llena...

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Bon J:
Radiohead

Bonnie:
Artick Monkeys

Bon J:
Placebo

Bonnie:
The cure

Bon J:
Sex Pistols

Bonnie:
Todas esas son actuales.

Bon J:
Ah, si?The who, Rolling Stones, Iggy Pop... También están mis poderosísimos Queen.

Sin poder evitarlo posó una diminuta sonrisa tras leer aquel mensaje. Dios, si tenía un muy buen gusto musical.

Bonnie nunca hubiera creído encontrar a alguien con quien compartiera su mismo gusto y pasión por cierto género de música. Sí, al ir a la muestra, se encontraron con varios integrantes novatos que se presentaron sin fines lucros para sentirse completos en aquel escenario. Eran muestras libres, lo que significaba que cualquiera que se considerara con un nivel propio y elevado con su instrumento poseía las características correspondientes para presentarse, era una buena forma de hacerse reconocer su eras músico independiente.

Escuchar tantas variantes, tantos instrumentos sonando de forma continua cada que pasaba uno nuevo a presentarse y como con índole propio podían hacer percibir su propio sentimientos con cada canción que tocaban. Sin embargo, el mayor género musical que abarcó la mayoría fue para su suerte su favorito, algo verdaderamente increíble, se sintió demasiado cómodo escuchándolo.

A su vez, mientras compartían los cuatros juntos, Bonnie descubrió que como él, el chico gris compartía cierto gusto musical, el rock para ser más claro, le llamaban a ambos la atención... Y como si las coincidencias no fueran suficientes, también descubrió que el menor en sus ratos libres solía practicar guitarra.

«Claro porque más "perfecto" no puede ser»

Rodó los ojos al tener aquel pensamiento y dirigió su vista hacia su teléfono nuevamente esperando que le diera una respuesta.

No iba a negar que si no estuviera tan oxidado con la guitarra ese hubiera sido su sueño a perseguir ahora, pero desde que lo dejó hace ya más de un año no sentía esa misma pasión que cuando inicio sus prácticas, solo conservaba un profundo cariño a la nostalgia de lo que un día fue, pero eso sí, seguía adorando con todo su ser escuchar música de esa índole, eso era algo que simplemente no podía dejar de lado así como así. Antes nunca había tenido tanta interacción sobre hablar de bandas —Ni cuando estuvo en clases de música en la secundaria—, y ahora fluían por si solas en la conversación que mantenía con él.

Bon J:
¿Seguiremos de esta manera hasta que estés seguro de que no soy farsante?

Bonnie:
No.

Bonnie:
Todavía falta, pero si no respondes no importa.

Bon J:
Que frío eres, nunca dejaría de responderte.

Bon J:
Por mí, has todas las preguntas de bandas que quieras ;)

El de hebras violetas bufó en su sitio antes de dejar el teléfono de lado. Ahora que estaba solo en casa era la única forma que tenia de distraerse, pero sinceramente sabia que si seguía con la plática lo más probable es que seguirían de aquella misma manera por horas, no es como si sus reacciones en el chat fueran muy diferentes de la realidad. El timbre de su celular volvió a vibrar notando la respuesta del menor.

Bon J:
Entonces... ¿te gustaría ir a otra muestra musical?

Arqueó una ceja, completamente interesado en dicha propuesta, volvió a tomar entre sus manos al aparato para observar como seguía escribiendo con atención, pero se limitó a responder primero.

Bonnie:
Chica dijo que era la última vez que se presentaban por aquí.

Bon J:
Exacto.

Bon J:
Nunca dije que fuera una presentación de ellos.

Bon J:
¿Que te parece una presentación exclusiva por parte de tu servidor? En la HS hay una sala de música, solo hay que tomar un rato libre y divertirnos un poco con las guitarras ^^

Bonnie tanteó un tanto el teléfono frente a él, dudando de que responder ahora. No era como si no le interesara, pero tampoco le llamaba del todo la atención escuchar tocar al contrario. Suspiró con cansancio antes de desviar su vista hacia otro lado... Pero bueno, tampoco es como si fuera algo aburrido, así que...

Bonnie:
Vale.

Bon sonrió tras leer aquella corta pero certera afirmación. Reposó el celular en su pecho mientras desviaba su mirada hacia concentrarla en el techo de su habitación, ahora que estaba reposando acostado tranquilamente en su cama. Cerró los ojos por breves, recordando lo bien que se sintió para él escuchar las muestras que hubieron en la pasada salida.

Bonnie se había notado tan entretenido, tal cual un niño al sentirse contento de todo lo que veía... Como le habría encantado que hubiera estado sin los anteojos puestos para observar su rostro seguramente deslumbrante observando todo aquello. Sin poder evitarlo, una pequeña carcajada salió de él de forma inconsciente en lo que quedaba vagando entre sus propios pensamientos fantasiosos de qué cara habría puesto. Abrió sus brillantes esmeraldas antes de ladear la cabeza hacia un lado y observar cómo se encontraba el estuche de su guitarra aun lado de la puerta.

No había tocado hace tiempo debido a lo ocupado que estaba desde que inició el nuevo ciclo escolar... Ahora que sabía que el mayor había accedido, le daba como un incentivo para querer tocar nuevamente aquel instrumento con suma dedicación y así poder tener presente ante sus propios ojos la mirada deslumbrante que éste le iba a otorgar, porque se iba a asegurar a toda costa de que se quitara esos anteojos.

—Las clases ya terminaron, los que van a quedarse para sus respectivos clubes el día de hoy pueden mantenerse un minuto aquí en lo que yo me retiro —comentó el docente antes de dirigirse a la puerta de salida y dejar a la mayoría de estudiantes que tenia alguna clase particular.

Bonnie ladeó el rostro desde su lugar antes de simplemente decidirse a organizar sus cosas en su mochila, sabiendo que después de esto el pelirrojo y él se dirigirían al club de teatro como era de costumbre.

—Entonces el zorro peleó contra un árbol y ambos me llamaron poste telefónico —contaba, sin notar como Bonnie arqueaba una ceja a través del cristal antes de girar en su asiento cuestionarlo por lo que decía.

—Tienes sueños extraños —dijo sin más antes de ver como Foxy alzaba los hombros y se dedicaba a jugar con un lápiz mientras sonreía minuciosamente—. ¿Seguro no tomaste nada raro?

—Bah, sueño que estoy drogado con moritas cuando me siento bien por alguna razón —explica y Bonnie no puede evitar sentirse más desorientado por aquella rara afirmación—. ¿Tú nunca sueñas cosas raras o qué? Enano.

—A veces...

Murmura de forma baja. Desde hace un tiempo no había tenido alguno de esos sueños con extraño significado de nuevo, seguía sin saber descifrarlos en su totalidad pero era irónico que ahora que estaba más cerca de conocer que era lo que pasaba con su condición no los hubiera vuelto a experimentar desde que sucedió por última vez su "peculiaridad" No sabía que pronta respuesta darle, pero ahora suponía que de alguna forma era una advertencia a que su condición podría manifestarse, aun así le llevaba a pensar que tenía algo más simbólico en la realidad que seguía sin descifrar...

Fox arqueó una de sus gruesas cejas antes de inclinarse en su asiento y mirarle.

—¿Con que sueñas? —preguntó con verdadera curiosidad, pero solo observó como el más bajo era ahora el que le retaba importancia alzando los hombros y procedía a levantarse de su asiento.

—Con hilos.

Eso dejó desconcertado al contrario que lo miró de forma rara.

—¿Tienes esos presagios de querer coser o algo? —cuestionó incrédulo provocando que Bonnie rodara los ojos y solo esperara a que el más alto también se levantara siguiéndole la acción de salir del salón—. Hoy solo voy a acompañarte y saludar, tengo que reunirme con los de mi club por lo del evento.

—Todos andas muy metidos con ese evento ¿cierto? —Expresa sin mucho interés caminando a la par del contrario—. No le veo lo interesante todavía.

—Pues tienes que comenzar a hacerlo ya que no es para menos —comenta observando de reojo al más bajo—. En esta HS se emocionan por cualquier "actividad recreativa" les gusta ser extravagantes, y recaudar fondos con eso. Ahora su grupo de raros tienen que encontrar un club para unirse, sino todo lo que planean se irá a la basura.

Bonnie escuchó atentamente cada una de sus palabras pero solo asintió sin decir mucho, ahora que tenia aquello presente se daba cuenta de que prácticamente todos ellos estaban jugando contra reloj y en la cuerda floja... No estaba seguro si con la "popularidad peculiar" que tenía el grupo en donde estaba se les iba a hacer más difícil todo eso. Suspiró con tan solo pensarlo, no tenia que martillarse de aquella manera, no era propio de él, ahora solo tenía que suponer que ellos deberían de tener la certeza de que plan hacer ahora en adelante.

—Bien, hasta aquí mi parada —dice el más alto una vez ambos se encuentran frente a la puerta del auditorio. El de hebras violetas lo observa con duda.

—¿No ibas a saludar?

—Saludo desde aquí —indica a la vez que lo empuja hacia adentro y de esta forma antes de cerrar la gran puerta mira a los presentes para hacer un leve asentimiento con su cabeza desde su lugar y luego cerrar la puerta tras él.

Bonnie solo se dispuso a bajar y situarse donde se encontraba todo el grupo hablando de sabrá qué cosa muy concentradamente, pero al instante de notarlo le dirigen una mirada y sonrisas en señal de saludo.

—Oh, pequeñín, ya era hora. Justo estábamos a punto de irnos —indica Puppet con su característica sonrisa acercándose al más bajo—. Ahora vamos a organizarnos con lo de la unión de clubes.

—Si~ ¡Ya hasta formamos una lista! —explica ahora su melliza con una sonrisa aun mas grande.

—Bien... ¿Yo me puedo quedar aquí?

Ve el rostro sonriente por parte de los hermanos pensando que iban a aceptar.... Lastimosamente no fue el caso y terminó yéndose con el grupo que consistía en Chica, Mai, Puppet, Cami... Y increíblemente cuando iban de paso por los pasillos se consiguieron a Lily y también la llevaron a rastras diciendo que solo sería un minuto y necesitaban de su ayuda.

—Pensé que Bon interferiría de nuevo por ustedes —suelta sintiendo como el de cortas hebras blancas seguía halándole hasta el salón a dónde irían—. ¿Los rechazó o todavía no le han preguntado?

Tras preguntar eso Bonnie pone especial atención, pues era un tema que también pensó por un instante. Siendo lugar que el de hebras turquesa estaba hasta el cuello de sus propias labores él no creía justo que aunque fuera por otorgar un beneficio desinteresado dejara de lado sus propios motivos.

—Oh, no. No podemos aprovecharnos de Bon-cito todo el tiempo. Ya hizo mucho por nosotros, es hora de que tengamos voz —inquiere Puppet de manera genuina sin presenciar la pequeña sonrisa que se forma en la peli-azul al escucharlo, se sentía muy feliz que ahora pensaran de aquella manera, Bonnie también se percató de ello, pero no demostró interés al respecto—. El único problema es que no tengamos voto.

El paso se vio interrumpidos cuando llegaron a la puerta de un bien conocido club en la HS, en especial para la peli-azul al saber quien estaba allí "El Club de Música" estaba escrito campante con letra cursiva y pequeños dibujos de nota musical... ¿Así que ella de esta forma interferiría? Si que eran chicos observadores. Guardaron silencio una vez decidió tocar la puerta y ver como instantáneamente el pomo de esta se movía.

Al abrirles la puerta todo el grupo observó a una chica... Era pelirroja con un degradado rubio en las puntas atados en dos peculiares moños, algo regordeta y bajita, con unos brillantes orbes color jade. Miró con sorpresa a todos por breves segundos, pero en seguida su vista se posó en la cara más familiar que los acompañaba.

—¡Lily! —soltó con animosidad antes de pegarse completamente a la nombrada para darle un gran abrazado sintiendo como ésta reía ligeramente nerviosa pero aun así le aceptaba el contacto—. No te he visto en días. Pensé que ya me habías olvidado completamente, eres tan cruel.

—Abby, no saques conclusiones, he estado ocupada —asegura una vez se despegan ambas del contacto, ella pone la boca en trompa antes de cruzarse de brazos y mirar con los ojos entrecerrados a toda esa gente que no estaba segura de haber visto—. ¿Recuerdas que te hablé del club de teatro? Ahora estoy participando allí momentáneamente y me pidieron traerlos a ti.

Ella abrió los ojos impresionada, pero luego cargó una sonrisa antes de extender la mano y ofrecer un saludo con alegría que en seguida fue sostenida por Puppet quien sonrió de manera felina.

—He escuchado muchas cosas de vosotros, me habéis tenido pillada hace un tiempo, aunque nunca los vi... Soy Abby.

—Un gusto, dulzura. Me presento en nombre de todos para decirte que como club —se aventura decir con galantería y Abby solo asiente antes de dar por concluido el contacto—. No queremos sonar inoportunos y menos porque apenas acabamos de conocerte pero...

—Ve al punto —expresa rápido el de hebras violetas cruzado de brazos al sentirse arrastrado de estar allí. Nota como todos le dirigen la mirada y la chica llamaba Abby parpadea un par de veces antes de, sin previo aviso, acercarse a él para tomarlo de las mejillas en lo que también parecía querer quitarle los anteojos con eso, pero ni loco se dejaba—. ¿¡Qué rayos!?

—¡Pero si eres una mónada! —expresa con total entusiasmo sin percatarse de las señas que cierta rubia le hacía para que se detuviera de seguir haciendo eso, conociendo como era el peli-morado—. ¡Eres súper cute, dan ganas de abrazarte y no soltarte!

Bonnie se sonrojó al sentir a la más bajita tan cerca y en seguida separó las manos que tenia sobre él para alejarla viendo como esta hacia una expresión de decepción tras notar esta acción.

—No te me pegues.

—Auh, pero con tan lindas facciones saliste tan borde —formula una vez se cruza de brazos y se dirige a su amiga—. ¿Contigo es más cercano, verdad? ¡Pregúntale hipotéticamente que qué posición puede ser!

La peli-azul se eriza completamente avergonzada antes de repicarle a su amiga que suponer ese tipo de cosas estaba mal, y más aun insinuarlas, que aquello era incomodo tanto para ella como para el chico al que le hacían la pregunta. Abby solo rodó los ojos sintiendo que su contraria sabia la respuesta pero que le estaba tomando el pelo y no le quería decir para que no comenzara con sus ideas locas.

Bonnie no comprendió que quiso decir con aquello, pero algo internamente le decía que su vida estaría mejor si nunca se enteraba de a qué se refería... Aunque si lo pensaba detenidamente, de algún lugar le sonaba esta terminología. Negó un par de veces viendo como la morena calmaba los ánimos de su amiga intentando hacer que la escuchara.

La rubia al ya no verle continuación a cómo iban en la plática decide darle un pequeño toquecito en el hombro para llamar su atención. La pelirroja voltea encontrándose con las amatistas de ella.

—Eh... ¿Abby, cierto? Estábamos pensando en pedirte un favor si no es mucha molestia. Queríamos saber si había oportunidad de preguntarte algo —inquiere y observa como la susodicha capta su mirada con una sonrisa deslumbrante, asintiendo—... Para el evento de fin de mes queríamos saber si es posible que nuestro club y el tuyo puedan unirse en todo lo que va de eso.

Abby abrir los ojos de manera exorbitantes, no esperaba para nada una propuesta como esa. Ella era integrante del club de música pero no tenían un cargo tan elevado, no era como si pudiera aceptar si lo quería, ya que los que lo regían tenía que ver si les convenían. Los chicos de ese club se le hacían muy animados a simple vista, pero por lo que sabía, los rumores que recorrían de ellos no tenían la mejor fama en la institución.

—B-bueno.. Yo solo soy integrante del club, no es como si pudiera darles una respuesta por mí misma ahora —asegura con media sonrisa, apenada de lo que estaba diciendo, pero tenía que ser sincera, por mucho que le partiera el corazón ver la cara tristona del par de gemelos y la rubia no podía darles esperanzas solo porque si. Se acerco a su puerta antes de mirar dentro y cerrarla—. Tendrían que hablar con el organizador, pero ahora no vino y tal vez se reintegre hasta el miércoles, por ahora estamos organizando todo sin él... ¿podéis esperar hasta ese día?

Bonnie hizo una mueca al notar como Chica y Puppet intercambiaron mirada. Obviamente eso no podía ser debido a todo lo que habían discutido sobre ello, pero ya con eso del grupo significaba que quedarían descartados de ello.

La pelirroja al observarlos se sentía más chiquita que de costumbre ¡Es que se veían tan desesperado! Era como una súplica de que fuera la heroína para su historia.

—Hjm... Creo que tenemos que descartar éste, entonces —murmuró la rubia antes de soltar un pesado suspiro y dirigir a la chica con una triste sonrisa—. De igual manera gracias.

—¿Pero tiene que ser el club de música? —preguntó y notó como el silencio permaneció por breves—. Si necesitan otra unión pueden pedirlo a cualquier otro, después de todo, hay muchos ahora organizándose para el evento.

Explica y ve como todavía mantienen silencio, pero esta vez es su amiga peli-azul la que se adelanta a hablar.

—No pueden tener una unión con cualquiera, necesitan a alguien que tenga mayor popularidad entre los estudiantes.

Esto encendió un foco en la pelirroja que en seguía les dirigió una sonrisa con alegría sorprendiendo a todos del repentino cambio de actitud.

—¡Oh! Pero lo hubieran dicho antes, el club de cocina tiene igual o mucha más popularidad que éste —expresa con han sonrisa—. Yo conozco a la organizadora y estoy segura de que si se lo piden aceptaría con gusto.

—Uy... El club de cocina —murmura de forma baja la peli-blanca de larga cabellera antes de quedarse observando un punto fijo. Todos se sorprendieron al escucharla murmurar algo y allí Puppet comprendió un pequeño y minúsculo detalle...—. Waah, que divertido era estar...

Sin previo aviso la melliza se encontraba riéndose de forma baja, de forma muy escalofriante según pensaba Bonnie al observarla, tenía una mirada triste pero seguía riéndose hasta que por fin todos notaron como gruesas se formaban en sus ojos para terminara cayendo y pasando sus blancas mejilla. ¿¡Que estaba pasando!? Todos instantáneamente se acercaron a Mai, incluso el peli-morado ligeramente. Los únicos que se mantuvieron en su sitio fueron Puppet y Abby.

—Y-yo no sabía que se iba a poner así por nombrarlo —aseguró con el nerviosismo en el cuerpo notando que el mellizo a su lado alzó los hombros y soltó un pesado suspiro antes de volver a mirarla.

—Cosas del pasado... Dentro de un rato se calma, no es muy común incluso para ella llorar así —explica antes de despeinarse su cabellera y notar como la chica frente a él tragaba con dificultad—. Tal vez deberíamos ir sin ella a preguntar, aunque no sé si también nos rechacen.

Abby apretó los labios en su lugar, intentado formular correctamente el plan que se le veía a la mente. No estaba mal ayudarlos después de todo, ella conocía bien a la capitana del club de cocina, no rechazaría si ella personalmente se lo pedía. Observó a cada uno de forma decidida hasta que su vista se posó en el peli-violeta que se notaba a leguas no saber calamar el llanto de otra persona, mantenía su distancia pero buscaba acercarse, ¡Era tan lindo! Su amiga no rechazaría la oferta si se lo pedía, lo sabía, y mucho menos si...

Una sonrisa se posó en su rostro de forma divertida una vez notó que la chica llamaba Mai había calmado sus ánimos, todos voltearon a ver a la pelirroja luego de esto y más de uno se erizó ante la sonrisa juguetona que comenzaba a formarse en su rostro. Para una chica como Lily que conocía al pie de la letra como solía ser su amiga, que sonriera de esta forma era un indicio de tener que alejarte de todas las formas posibles.

—Yo puedo pedirle por ustedes la unión y ella aceptaría de inmediato —comenta ahora recargándose de la de la entrada de su puerta, viendo como más de uno la miraba incrédulo—. Pero... —y allí todos sintieron la forma desmedida que tenia de cambiar ánimos, completamente diferentes entre los integrantes, a un extremo estaba Puppet que pensaba no importaba lo que pidiera pues lo hacía con buena intención, lograría cumplirle, y al otro extremo estaba Bonnie, que sentía la más baja se aprovechaba de la desesperación ajena. Ambos tenían partes correctas—. No soy pretenciosa, no es como si les fuera a pedir a todos que hicieran algo que no se qué pueden hacer...

—O seu rosto diz que, para nós, já está a pisar terreno perigoso para obter lucros, mas uma troca de iguais é prática.

Habla de pronto la peli-verde, Abby sonríe al haber captado lo ultimo y asiente, después de todo no les estaba forzando, ya ellos verían si aceptaban pero no era algo del otro mundo, y parecía un intercambio junto, según ella.

—Una obra —suelta sin más la pelirroja.

—¿Una obra? —pregunta sin creérselo le de de hebras claras viendo como asentía con una sonrisa.

—Quiero que la interprete él de ser posible —apunta hacia el peli-morado que se eriza en su sitio—. No es tan complicado después de todo ¿cierto?

De hecho, era demasiado sencillo, ellos hacían eso. Aunque Bonnie lo tuviera presente sabía que la contraria no había terminado de hablar, pero se adelanta a decir con una sonrisa campante la rubia.

—Claro que podemos ¿qué tipo de obra?

Ella parece pensarlo hasta que asiente.

—Pues...

—No, ¡Ni lo sueñen! Por mi pueden irse a la mierda —soltó el peli-morado una vez terminado de escuchar dicha propuesta por la más bajita.

—¡Bonnie! Deja de ser tan grosero —regaña la rubia una vez nota como él chasquea la lengua y sigue camino por el pasillo siendo seguido a rastras por Mai que le decía que si aceptaba se lo agradecería todo el universo. Ella decide también seguirlos, todavía tenían mucho de qué hablar.

Lily mira desaprobatoriamente a su amiga que mantenía una mirada inocente tras lo ocurrido, como era esta chica. Suelta un suspiro antes de despedirse de ella y seguir a las demás chicas que perseguían a Bonnie intentado persuadirlo. Al irse dejó a Puppet y Abby solos por breves instantes.

—¿Eso es un no? —Pregunta la pelirroja arqueando una ceja al ver tan cómico acto—. Tal vez lo presionó.

—Ah, no te preocupes... ¿Tienes que ser él? —Indagó viendo como esta alzaba los hombros—. Pronto con este evento llegaran más integrantes, yo lo sé.

—No tiene que ser él, pero si pueden convencerlo se los agradecería un montón —suelta alegremente y dolo escucho una leve risa del más alto que asintió—. Yo me encargaré de su unió con el club de cocina, se los aseguró.

—Bien, confiamos en ti —añadió mientras tocaba su hombro en señal de despedida y se alejaba dejando sola a la pelirroja.

Abrió la puerta y observó a los demás integrantes que seguían hablando de lo que harían en el evento, no se percataron de la presencia de los de teatro, así que solo cerró la puerta y se decidió a avanzar entre los pasillo, mientras más rápido solucionara aquello, mejor.

—Ahh, que ganas tengo de comer un chocolate ahora —murmuró recordando como en sus tiempos de secundaria siempre le quitaba uno a uno de los compañeros con los que siempre se la pasaba, lastimosamente se alejaron, y con él, sus chocolates.

Se abrió paso entre otro de los edificio hasta que por fin llegó al área en donde quería. Allí estaban los clubes que poseían grandes grupos materiales, tenían salones muchos más grandes que los del resto, y contaban con los apropiados que necesitaban para lo que sea que iban a hacer.

Tocó la puerta un par de veces en lo que esperaba que le abrieran, al hacerlo se apreció una chica alta, de vista temeraria rosa intenso, de forma divertida su cabello también le hacía juego a sus ojos mientras que una parte de él estaba rapado, traía un mantel cubriéndola pero aun así seguía con ese aire atemorizante con la vista que le regalaba

—Hola, soy Abby. Me gustaría hablar con la organizadora del club —se limita a decir y presencia como esta arqueaba una ceja.

—Estás hablando con ella —dijo sin más antes de cruzarse de bardos y recargarse en la puerta—. ¿Que necesitas?

—¿Ah? —preguntó una vez sintió que las palabras se le atoraron en la garganta y parpadeo un par de veces untando descifrar si aquello era un sueño o no. ¡Esto no podía estar pasando!—. P-pero ¿qué pasó con la anterior?

—¿Uh? Esa lela fue degradada de su cargo por haber permitido que robaran un microondas —asegura sin interés después de rodar los ojos—. Ahora ninguno de los chicos de carpintería se atrevería a hacernos una broma estando yo al mando.

Abby sintió que se le iba el aire, en vez de venir se estaba yendo de este mundo allí parada. Ya estaba comprometida con el grupo, seria bajo de su parte ir ahora que siempre no. Puso ambas manos en su rostro intentado que la preocupación abandonara su cuerpo, la peli-rosa observaba cada una de sus acciones sin estar segura de que le pasaba a esa extraña chica.

—Ay, no... ¿Ahora qué voy a hacer? —se preguntó a si misma mientras llevaba sus manos a sus mejillas, su amiga estaba segura de aceptaría si le hubiera dicho la condición que puso al club por el favor, ellas estaban cortadas con la misma tijera pero ahora todo se había dificultado gravemente— ¿Como les voy a decir?

—¿Como le vas a decir a quien? —Habla ahora la chica frente a ella provocando que dieran un brinco en su lugar al escuchar su voz, apenas se percataba de que seguía allí— ¿Que tiene que ver todo eso con la antigua organizadora?

Cerró los ojos por breves instantes antes de tomar un profundo suspiro y cambiar a su mirada decidida, ya no había nada que perder, ya perdió todo y por todos, era algo deprimente si lo pensaba.

—Les dije a un grupo que podrían unirse con el club de cocina para el evento —confiesa notando como la más alta solo se limita a escucharla —. Pero ahora que eres la organizadora todo se echó a perder y yo quedaré como una mentirosa luego de haber propuesto un favor. ¡Estoy en la ruina!

Ella rodó los ojos pensado lo exagerada que se comportaba aquella muchacha.

—¿Nunca te han dicho que prometer cosas que no puedes asegurar cumplir es malo? —inquiere viendo como esta soltaba balbuceos extraños. Puso los ojos en blanco antes de voltear a fijarse en su grupo y luego en ella—. ¿Para qué necesitan la unión? Esas cosas no son muy comunes aquí a menos que estés en patético estado.

—Oh, no lo diría de esa forma pero ellos lo están... Pidieron primero poder integrase con el de música pero nuestro organizador no está —agrega alzando los hombros—. Pero el club de cocina es una opción sugerente después de todo, y como yo conocía a la ahora "ex-capitana" pensé en hacer un trato con ellos... Suena un poco egoísta pero no fue nada que se les dificultara o que se forzaran a hacer... Ahg, me siento como basura, ni siquiera los pude ayudar al final.

La peli-rosa se lo piensa unos instantes y antes de asentir ligeramente haciendo poco compresible esta acción a la pelirroja.

—El club de teatro tiene muy buenos estudiantes, me cayeron bien de vista. Es una lástima que al final no los...

—¿Club de teatro? —Pregunta curiosamente a lo que Abby asiente y ella entrecierra los ojos, quedándose así unos instantes—. Bien, hagamos la unión.

—¿Qué? ¿En serio? ¡Eso es muy guai! —Expresa con total emoción en su lugar—. Les voy a contar ahora, ah, no, tengo que regresar a mi grupo, ¡Les voy a contar después de las clases extras! No, me tengo que ir temprano, ¿mejor le envío un mensaje a Lily, o mejor me quedo y se lo digo en persona? Ahg, no importa... ¡Muchas gracias por eso! Se pondrán muy felices.

Sin decir otra cosas la chica se fue alegremente caminando por los pasillos, al final si había logrado resolverlo, ahora todos estarían contentos si no era para menos.

—Trabajar con el club de teatro, eh —comentó una vez observó como aquella chica desapareció entre los pasillos, se limitó a pasar uno de sus recortados mechones fucsia tras su oreja y suspirar con ligereza—. Ah, que tiempos...

Bonnie gruñó en su lugar mientras se mantenía cruzado de brazos avanzando hasta situarse en la puerta donde ya le era recurrente quedarse después de cada practica. Extrañamente había personas todavía demasiados estudiantes en la preparatoria, Bonnie suponía que se debía al hecho de estar organizando los eventos pero al parecer Bon no había cambiado su actual horario.

—Te ves molesto ¿y esa cara? —pregunta el de hebras celestina tras cerrar la puerta tras él al salir de aquel salón estando a un lado del más bajo. No podría asegurar que lo estuviera pero por la forma en cómo estaba era totalmente un hecho—. No quisiste pasar hoy.

—No se me dio la gana.

—Hey, esa agresividad, haha —comentó a modo de broma pero no obtuvo otra respuesta de su parte. Se lo pensó unos segundos antes de recordar cierto detalle—. Oh, ¿recuerdas lo que hablamos ayer? Hay tiempo, creo que los del club ya se fueron... Vamos ahora, dejé mi guitarra allí.

—¿Tú qué? —Siendo sincero, no lo estaba escuchando, no sabía cómo es que al final había terminado cediendo a aquellos, por amor de Dios, ¿¡Que le estaba pasando con ellos!? Llegó un punto en donde Chica lo arrastró a hablar más privado y dijo algo que terminó por responder "vale" luego de haber puesto sus propias condiciones obviamente.

Bon no esperó más y rápidamente le tomó de la muñeca para guiarle a aquella sala, habían estudiantes que los saludaba recurrentemente, y él con una amable sonrisa respondía a aquellos gestos, pero varios observaron extrañados como arrastraba a aquel peli-mora. El de hebras violetas se mantenía sin decir nada todavía, no le tomaría importación por el momento, al menos no ahora.

—Bien, ¿canción favorita?

—¿Eh?

—Canción aleatoria será —dice una vez en laque ambos ya se encuentran ingresando a la dichosa sala, y tal cual como había dicho el menor, se encontraba vacía a excepción de los instrumentos. En serio parecía que el más bajo andaba en las nueves.

Cerró la puerta tras él sin percatarse que la había dejado ligeramente entreabierta. Bon procedió a tomar uno de los forros que de seguro era el de su pertenecía para luego mirarle con duda.

—Bonnie ¿Estás bien?

—Sí —comenta con simpleza una vez lleva su vista a todo el panorama, esa era una linda sala de música, no había forma de que pudiese negarlo, tenia incluso todo tipo de instrumento necesario para formar una banda. De seguro era muy divertido practicar allí—. No es nada...

Bon no muy convencido con aquella respuesta tomó una de las manos del al peli-morado para sentarlo junto en la tarima en donde estaba posada una batería, él luego de eso procedió a buscar una silla para sentarse frente a él, dándole la espalada a la salida pero quedando junto frente al más bajo. Bonnie observó dudoso aquella acción pero no lo cuestionó, solo se limitó a observar como el desenfundaba su guitarra eléctrica antes de colocarse en posición, y con una sonrisa sacó uno de los cables que iban en ella y se los mostró.

—A tu lado está el amplificador —indica y tras voltear nota que como había dicho allí estaba aparato. Bon le muestra el cable antes de sonreír ligeramente—. Podrías hacerme el favor de ponerlo... ¿sabes colocarlo, verdad?

El de hebras violetas fruncía el entrecejo al escuchar tan ridícula cuestión. ¡Claro que sabia! No tenía que hablarle como si apenas supiera sumar. En la plática que tuvieron el menor dejó a relucir que tocaba guitarra pero a diferencia de él, nunca creyó conveniente también contarlo. Rápidamente le arrebató dicho cable y sin esperar más puso todo con las medidas necesarias para el tipo de guitarra que tenia ajustando los volúmenes.

—Claro que sé —murmuró con cierta molestia antes de concluir en su labor y mirar la sonrisa satisfactoria que tenía el contrario tras observarlo. Se cruzó de brazos antes de alzar la mirada y mantener la frente en alto—. ¿Por qué sonríes tanto?

—¿Uh? Qué ¿ya no puedo sonreír? —pregunta con mofa escuchando como el mayor chasqueaba la lengua antes de desviar la mirada.

—Dicen que las personas que sonríen tantos son las que más guardan secretos —expresa sin percatarse de la atención que le puso el menor a esas palabras antes de asentir y luego llevar su vista al instrumento que sostenía—. Que cuando muestran su mejor cara siempre, tienden a cargar ellos solos con la otra.

—Vaya... ¿De dónde sacas ese tipo de cosas? —Alza la mirada notando que con el más bajo se limitaba a alzar los hombros—. Es interesante que con decir eso intentes leerme. Yo no tengo que verte sonreír todo el tiempo para ver tu otra cara.

Bonnie arquea una ceja, interesado de cada una de las palabras que soltaba aquel muchacho. Se limitó a suspirar antes de negar un par de veces, si que sabia la forma de desviar el tema cuando originalmente se trataba de él, le daba una vuelta y ahora era Bonnie el centro.

—¿Que quieres decir con eso? ¿Qué intuyes lo que me pasa o me incomoda? Ha.

Suelta sin gracia, antes de ver como el menor sacaba una púa de su bolsillo y rasgaba las cuerdas de alambre, al estar justo al lado del amplificador escuchó perfectamente la melodía que sonó intensivamente.

—Juh, en realidad estoy viendo que algo te molesta ahora. ¿Quieres hablarlo? —preguntó una vez decidió concentra sus esmeraldas en aquellos cristales oscuros y opacos del mayor. Se hacia una idea de lo que respondería ahora, pero nada perdía con insistir un poco.

Lo escuchó exhalar con fuerza antes de quitarse de forma brusca sus anteojos y dejarlos a un lado inclinándose hacia delante tocado el puente de su nariz mientras respiraba profundamente. Demonios, sintió una punzada al observarlo de aquella manera por algún motivo, ahora estaba molesto por eso. Se quedó así por breves instantes antes de levantar su mirada rubí y concentrase en las esmeraldas del menor con una expresión indiferente, para su alivio, no sintió nada... Pero él, muy al contrario, lo observaba alegre, casi contento.

—Es estúpido —susurra bajo. Bon arquea una ceja, dándole paso a continuar a hablando pero no hallaba la forma de seguir. Se sentía molesto, no sabía si con el mismo o con las personas con las que estaba conviviendo además pero se sentía de aquella manera por alguna razón—. Todo lo que hago lo es y que me ponga así por eso también.

—No es estúpido si te tiene de esa forma —inquiere concentrándose en la morada que le otorgaba— ¿Ahora qué sucedió?

—Los de teatro fueron a unirse con otro club —Bon se sorprendió grandemente al escucharlo, y lo demostró al desafinarse y pasar la púa de mala forma por las cuerdas provocando un muy mal sonido... Después de todo, había pensado que incluso para eso iban a necesitarle, y le alegraba ver que ya iniciaban por cuenta propia—. Parece que consiguieron la unión pero a cambio de una obra.

—Yo no escucho nada por lo que estar molesto... creo que deberías estar celebrando como ellos de seguro lo van a hacer ¿cierto?

Bonnie no dice nada y procedió a poner los ojos en blanco escuchándolo.

—A mí me da igual si se solucionó el problema o no —confiesa. Bon le dirige otra mirada dudativa antes de rasgar nuevamente las cuerdas con su púa. Bien, nuestro querido peli-morado no estaba seguro de por qué le contaba esto al menor pero ya qué, preguntó y milagrosamente él le respondía, hizo una pausa antes de que le diera la hartaza y responder—. El punto es que quieren que interprete una obra con temática BL.

Bon siente que casi le rompe los tímpanos al mayor tras haber tocado una nota demasiado aguada, lo que pareció desestabilizar el amplificador y seguir sonado de aquella irritante manera hasta que Bonnie tomó la decidió de desconectarlo de una vez por todas.

—Ah, creo que me pasé —inquiere con pena sintió el calor en sus mejillas por la vergüenza antes de mirar como el más bajo tenia pintado en toda la cara preguntándole un irónico «Oh. ¿Enserio?» Sonríe con pena antes de pasar su mano a su mejilla y aunque no podía asegurarlo sabia sentía que el peli-morado se encontraba abochornado hablando de eso—. ¿Y-y tú que les dijiste?

—¿Como que qué les dije? Me negué —asevera de forma firme viendo como el congrio parecía estar más impresionado de cada una de sus palabras—. Aunque... Al final creo que si acepté... Ahg.

Bon ríe escuchando aquella afirmación, ni por mucho que lo hubiera pensado se habría imaginado algo así con el peli-morado, de verdad que cada cosa que pasaba le sorprendía grandemente, y más si él estaba relacionado con eso.

—Si ya aceptaste no entiendo porque te mortificas tanto, la decisión está hecha ¿no? —Bonnie lo mira arqueando una ceja, sin creérselo... ¿En serio le parecía bien todo aquello? ¿¡Por qué no podía ser así y pensar lo mismo!?

—Me negué a besar a una chica en la obra y ahora me pintan el mismo cuento pero gay ¿Es mejor? ¿Eso quieres decir? ¿Estas consciente de eso? —cuestiona y no puede evitar no sentirse abochornado por todo lo que decía, parecía que el menor le están tomando el pelo ¡Estaba seguro de que lo había visto contener la risa!—. ¿Es normal que permitan estas cosas en la HS?

—¿Qué? ¿Los besos? Si son actividades de forma recreativa claro que estaba permitido, son por un hecho de entretenimiento buscando la aprobación del público... Los besos entre chicos no son los más aceptados o más vistos en ese término, pero aun así hay un grupo que los "adora" —Soltó de pronto explicativamente. A veces Bonnie pensaba que Bon tenían un cuestionario en la cabeza para soltar esas explicaciones de la nada—. ¿Pero qué? ¿Vas a besar a un chico en la obra?

—¿¡Qué!? ¡Por supuesto que no! —afirma sintiendo como se apoco la sangre le adorna las mejillas—. No quise besar a una chica en una obra y mucho menos voy a querer si se trata de un chico... Es jodidamente molesto que habiendo aclarado que no he besado a nadie, pues ya, lo confieso ¿Qué más da? No lo he hecho. Entonces vengan y me restringen en la cara que cada obra a la que haga en ese estúpido club tenga que ver con uno. No ¡Ni de coña! Mi profesionalismo no ha llegado a eso.

Dios, no podía no sentirse más avergonzado tras decir aquello, y que el menor solo se hubiera quedado pasmado escuchando aquel reclamo que ni al caso tenía que ver con él. Tapó su cara con una de sus palmas antes de suspirar con fuerza. Quería salir corriendo justo ahora.

—Bonnie... ¿Estás molesto porque hipotéticamente podrías besarte con un hombre o por el hecho de no has besado a nadie? —Dios, eso era como ver un paisaje nunca antes visto. Por primera vez en su vida era capaz de notar perfectamente lo sonrojado que se encontraba el mayor frente a él. Parpadeó un par de veces antes negar y quitarse esa imagen de la cabeza, la luz que reflejaba una de las ventanas del ocaso no ayudaban a que fuera menos presenciable—. Digo, por lo que reclamas pareces estar molesto por no besar que por ser besado.

—¿Que insinúas?

—Que pareciera que el problema no es por si es chico o chica... Sino tú....

Bonnie se acomoda de mejor forma en su lugar antes de rodar los ojos, y tomar una gran bocanada de aire sintiendo que la vergüenza ya pasaba a segundo plano.

—Nunca dije que el género sea el problema, no es como si eso fuera lo que importara a final de cuentas —murmura, logrando la atención del menor que le observó con más insistencia. ¿Que quería decir con eso?

—¿Eh?

—¿Sabes qué? No importa, no va a pasar así que cállate y no te rías.

Esa fue una de las condiciones que le puso a la rubia al platicarlo, pero por alguna razón apenas si lo dejaba pensar. Llevó su vista al menor que parecía querer decir o preguntarle otra cosa pero en seguida lo calló conectado la guitarra al amplificador soltando de nuevo un molesto pitido, que rápidamente se encargó de arreglar y volver a su lugar.

—Vinimos aquí por esto. Tócala.

—¿¡Que!?

—La guitarra.

—Ah...

Bonnie rodó los ojos por aquello y se dedicó a escuchar atentamente como sonaban los acordes del menor. Empezando con ritmos movidos que poco a poco sentía que llevaban de ánimo el lugar, a pesar de que se la pasaron hablando de bandas y sus distintas variantes, el menor había optando por una que se le hacía bien conocida, pero que aun así no tenía nada que ver con el termino de rock o algo por el estilo. El de hebras violetas solo había escuchado de ella en guitarra clásica, pero sonaba muy bien en la eléctrica.

—Te equivocaste —indica pero aun así Bon no dejó de seguir con la melodiosa cinta con aquel instrumento.

"Hikaru Nara" seguía sonando a la par, intentaba concentrase, pero cada que alzaba la mirada se encontraba con aquellas escarlatas mirándolo de forma divertida, haciéndole ver cada error que hacía, como si supiera muy bien de lo que hablaba sobre ese instrumento, y sí, tenía razón.

Seguía manteniendo los dedos, rasgando las cuerdas y pasando la púa en cada preciso instante, dándole un toque propio que lo caracterizaba. Ahora que lo pensaba, habría sido mejor retomar un calentamiento en casa después de meses de perder la practicar, sabía que se equivocaba más de una vez y notaba que el peli-morado también se percataba.

—¿No que muy bueno? —comenta con media sonrisa viendo como poco a poco finalizaba el de hebras turquesa frente a él, observó como Bon sonreía de igual forma pero aun así le reclamaba calladamente por haberlo distraído tanto— ¿Por qué esa canción?

—No lo sé —expresó de forma simple antes de observar al más bajo arquear una ceja—. En otro universo yo sufrí un mal de amores y con esta canción me desahogue al pensar en que si me gustaba aquella persona.

—¿Y exactamente qué quieres decir con eso?

—Que Joy la tiene como timbre de llamada y no me la podía sacar de la cabeza hoy —expresa con una sonría escuchando como el más bajo bufaba.

Se mantuvieron en completo mutismo a excepción del instrumento que el menor tocaba por unos cuantos segundos en lo que cierta duda comenzaba a rondar por la cabeza de nuestro querido peli-turquesa.

—Bonnie... ¿A caso tú también tocas la guitarra?

El nombrado abrió un poco los ojos al escucharlo pero aparentó de muy buena manera no estar tan sorprendido.

—¿Por qué?

—Sabias cómo funcionaban los amplificadores y me dijiste cual acorde hacia mal... No creo que eso se logré solo siendo bueno escuchando música —asegura y Bonnie se lo piensa antes de asentir ligeramente—. Eso es genial.

De pronto, el de hebras violáceas observa como el menor se quita su instrumento para pasárselo a él, que simplemente observa esta acción con duda.

—Ahora tú puedes tocar también —asegura y Bonnie pestañea antes de regresarle la mirada primero a él, luego volverla al instrumento—. ¿Estás acostumbrado con este modelo?

—No, yo tocaba una Gibson SG roja —Bon abre los ojos.

—¿En serio? Ese modelo es fantástico, ha de ser lindo que incluso haga juego con tus ojos —Bonnie se sobresalta al escucharlo habiéndose percatado apenas de que tenía razón con aquello último.

No dice nada más y comienza a tomar posición con el instrumento, haciéndole un ademán al contrario para que le pase la púa. Y así comienza, iniciando de forma suave una canción bien conocida para él, una la cual poco a poco comenzaba a sonar poderosa, potente, intentando trasmitir el sentimiento sutil que le otorgaba. Intentaba no distraerse sabiendo lo complicado que se le hacía recordar como antes hacia todo aquello, recordando solo las secciones y el tono que formaban, solo mantenía sus ojos en el instrumento viendo que sus dedos actuaran correctamente..

«Bohemian Rhapsody» Pensó el menor y sonrió, no podía no conocerla. Y se alegró de ver como él también sonreía al notar que iba bien.

Ellos quedaron de esa forma hasta avanzar poco a poco la canción. Por otro lado, fuera, en el pasillo, se encontraba otra estudiante sonriendo campante.

—Se veían tan contentos —comenta con alegría cierta pelirroja después de haber decidió avisar personalmente los resultados de la peticiones ¡Todo había salido muy bien!—. Ahora todo el mundo gana.

Ella caminaba a través de los pasillos, creyó que algo se le había olvidado en la sala de música pero no pudo ejercer la acción de pasta al escuchar la tonada que salía de dicho salón. Se le hizo extraño ya que a esta hora todos había terminado, y como lo curiosa nunca se le quitaba observo de reojo entre la puerta entre abierta, casi da un pequeño salto en su sitio mirándolo que miraba.

—¡Por todos los dioses shippers, que monada! —expresa con emoción casi en si susurro observando cómo ambos chicos se encontraban dentro, cierto moreno conocido por todos en la HS escuchaba atentamente a un peli-mora que mantenía la mirada baja en su instrumento, pero si notaba que hasta se había quitado los anteojos, no alzaba la vista pero aun así—. ¿Esto es una señal para que sean mi nueva OTP?

Al regresar su vista al pasillo solo pudo pensar en lo bien que hubieran quedado ellos dos juntos en la obra que pidió, no importaba si no había beso —Como le explicó cierta rubia de los parámetros del mas bajo— con un abrazo sería suficiente para alimentar su ser inasible de estas peculiares parejas.

—Abby, deja de pensarlo, Bon es un chico ocupado, no lo metas en eso —se reprende a si misma antes de regresar sobre sus pasos olvidándose completamente de lo que iba a buscar, lo dejaría para después, sin embargo no esperó que al estar tan concentrada en su caminata no se percató del cuerpo contra el que chocó—. Lo sien...

—¿Qué rayos te sucede? —Reclamó de forma tosca cierto moreno de brillantes zafiros, haciendo a un lado a la chica para seguro camino—. Si ocupas normalmente todo el pasillo para caber no es mi problema.

—¿Ah? ¿¡Me estas llamando gorda!? —repica frunciendo las cejas viendo como aquel rodaba los ojos y continuaba su camino, ella decidió ignorar el hecho de que interrumpió su ánimo y se dirigió a la salida.

El castaño decide ignorarla antes de seguir, pero algo fuera de lo usual en aquel pasillo le llamó la atención...

Y volviendo con nuestro querido protagonista, el cual se encontraba finalizando dicha canción, antes de observar al peli-cían sorprendido en su lugar después de haberlo convencido. Bonnie sentía una sensación regocijante, una que lo dejaba tranquilo... Pero toda aquella serenidad se fue inmediatamente alzó la mirada hasta depositarla en la puerta después de sentirse inquieto y observado por otra persona que no era el chico frente a él.

Como si el mundo quisiera advertirle que las cosas nunca serán algo calmado para él, justo desde allí podía observarlo, la mirada de cierto moreno mirando cada una de sus acciones precisas. Era como una forma atosigante de recordarle sus inseguridades, lo que alguna vez pasó, y lo que más le impedía seguir avanzando. Estaba atónito y petrificado.

«¿Tú eras aquel chico al que llamaban monstruo?»

«Siempre queriendo llamar la atención de todos...»

«Rarito»

Bon no comprendió esta actitud y mucho menos cuando de pronto el mayor se quitó el instrumento para pasárselo a él y tomar su mochila rápidamente en los que se colocaba sus anteojos veloz. Bonnie sentía que todo aquello le cargaba de muy mala manera los sentidos, ¿por qué tenía que pasar eso? ¿Qué hacia ese chico viéndolo? Quería salir de allí ahora, quería escapar de aquella asfixiante y repentina situación, todo se le hacía estresante ahora.

Su pasado tenía una batalla a fuerza con el presente queriéndolo atar y no ver un futuro en donde estaba tranquilo.

—Hey, todavía no habíamos terminado ¿A dónde vas? —preguntó con verdadera preocupación tras tomarle de la muñeca impidiéndole seguir avanzando.

Bonnie observó nuevamente la puerta viendo como no había nadie allí, y temiendo haberlo imaginado rompió el contacto que mantenían para detenerse justo en el umbral.

—Me largo, hoy no quiero acompañarte. No creo que te quedes dormido ahora ¿o sí?

El menor no responde y rápidamente sale de aquel salón a paso apresurado, sin detenerse...

Bonnie notando que cuando apenas volteó el pasillo se cruzó con aquel chico de temeraria vista, el cual lo observó brevemente antes de posar una ligera sonrisa por verlo caminando tan apresurado. No le dio importancia y siguió de aquella manera hasta encontrase en la salida de la institución. Pero el destino siempre le daba vueltas a todo y allí se encontró a cierto alto pelirrojo que le regaló un saludo que no respondió y solo siguió caminando.

—Capullo, apenas acabo de salir de mi clase y te comportas así, vaya borde —observa al más bajo seguir caminos sin soltar palabra—. Qué ¿Estas molesto?

Bonnie detiene sus pasos y muy extrañamente confronta con la mirada a los ámbares del contrario.

—Sí.

Fox arquea una ceja por aquella directa afirmación sin saber que procedía ahora... ¿Cómo había dicho Chica que se aliviaban este tipo de cosas sino era él?

—¿Quieres hablar? —pregunta más para sí mismo que para el contrario, pero se comprendió la intención.

—No.

Con aquellas directas respuestas solo se limitó a suspirar y tomarse el atrevimiento de tomar al contrario por los hombros y empujarlo para seguir caminando, iban por el mismo lado esta vez, y si el peli-morado no quería hablarlo —para gran alivio del pelirrojo ya que nunca fue bueno en esas cosas—, al menos sería capaz de acompañarlo.

Por otro lado, un muy apresurado Bon se encontraba caminando paso rápido por los pasillos, con la guitarra tras sus espalda. Tuvo que reacomodar todo para que no lo notasen en clases posteriores lo de música, pero gracias a ello había perdido de vista al más bajo.

—Hola, Bon —el nombrado atendió aquel saludo luego de ver que se trataba de Deuz, estaba justo afuera de la intención una vez notó cuando salió.

—Ah, Deuz, hola —le siguió por cortesía. El mayor lo miró arqueado una ceja dirigiendo la vista hacia su guitarra.

—Practicando después de un tiempo, eh.

Bon no lo notó en su momento pero lo había dicho con cierto desde de mofa, aun así el menor solo se dedicó a observar la salida, sintiendo que para su mala suerte el peli-morado ya había abandonado la institución ese día. No entendió que fue lo que pasó de forma tan abrupta si habían hecho una conversación fluida, de pronto solo se fue, actuando tosco y tajante.

«Que chico tan... Peculiar»

Ya luego de la organización sobre los clubes, Puppet se encargó de organizar todo con los de cocina, hablando de los distintos ingresos mientras ellos se explicaban ahora como se repartirían la pequeña aportación por parte de la preparatoria. Era un trabajo forzado quedarse después de clases pero a la mayoría de estudiantes no le parecía molestar, tenían que organizar todo y poner en marchas las múltiples decoraciones que harían para lo del evento.

Cierto grupo con integrantes bastantes peculiares se encontraban sacando distintos empaques en lo que decidía como decorarían todo. No estaban seguro de si hacerlo adentro o afuera de la institución, pero finalmente prefirieron meditarlo por el momento su ya bien conocido auditorio.

—Bien, pequeñín, anota aquí el disfraz que vas a utilizar —expresa el de corta cabellera entregándole una hoja y pluma al peli-morado.

—¿Disfraz? ¿Para qué?

—¿Como que para qué? ¿Si sabes en que fechas estamos? ¡Es un evento de Halloween! —en sus labios se forma una sonrisa con completa emoción y Bonnie se percata de que, en efecto, se encontraban ya a finales de octubre, que rápido pasaba el tiempo—. Hemos decidió hacer un show dependiendo de los disfraces que traigan cada uno, tenemos que ponernos en marcha ahora que vamos a decorar.

Bonnie se lo pensó unos segundos antes de sentir como la inspiración se le iba completamente, no tenía idea de qué forma disfrazarse, y parece que el contrario lo notó porque poso su ya bien conocida sonrisa fanfarrona en el rostro.

—Bien... ¿Que tanto se te dificulta conseguir un disfraz en tres días?

—Nada —asegura alzando los hombros, sabía que si le explicaba a sus padres que se trataba de un evento escolar no habría límite en cuanto a gastos, no es como que le sobrara el dinero pero tampoco le faltaba—. ¿Y si me disfrazo de momia?

—¿Qué? ¡Por supuesto que no! Sería un desperdicio de tu apariencia —asegura sobresaltando al contrario hablando tan elevadamente.

—Así me taparía toda la cara —murmura sin escuchar las replicas del contrario, pues cuando lo decía de aquella manera también era una forma de aludir al hecho en el que su mirada estuviese presente a simple vista, sabía que muchos utilizarían lentes de contactados pero por el momento no quería llamar la atención.

—¿Hablas por tus ojazos? —No lo notó, pero sabía que el más bajo le rodó los ojos. Se le iban a salir si seguía de aquella manera. Tomó el lápiz y pensando finalmente en que seria, rápidamente colocó lo que a su parecer dejaría contentos a todos, luego se lo enseñó a Bonnie y pareció incrédulo tras lo que leía—. Así no desperdiciamos el atractivo que tienes e incluso lo mejoramos y tú te quedas feliz. ¿Quién no conoce este guapo personaje?

—Cualquiera que nunca haya visto anime —inquiere y escucha la breve carcajada del menor. Bien, era buena opción al final de cuentas.

Poco fue la paz que duró en esa conversación cuando el peli-morado noto a cierta estrafalaria chica sumarse luego de aparecer tras él y sobresaltarlo.

—Uy~ ¡Todo está quedando escalofriante! —asegura con una sonrisa de oreja a oreja sentándose en la tarima y acompañando al par. Le dirige una mirada curiosa a Bonnie que de inmediato él evita y luego presta atención a ver hacia su mellizo antes de soltar un pesado libro que atrae la atención de los tres que cayó frente a ellos—. Encontré esto cuando buscaba formas de asustar a la gente, se puede leer y se ve misterioso~... ¿Ya le advertiste?

En eso el contrario albino se percata de ese detalle en lo que chasquea años dedos al recordarlo. Bonnie mira a ambos que intercambia una mirada cómplice, inquietante, y luego lo miran a él.

—¿Conoces la leyenda del viejo de la luna? —Pregunta el de corta cabellera una vez se decide a abrir aquel grueso y viejo libro en una de sus tantas páginas ya amarillentas por el tiempo—. Es una muy vieja leyenda.

—Si he escuchado algo acerca de eso —indica a la vez que recuerda como hace tiempo Foxy le había hablado de aquello, pero no podía evitar mirar como es que el control parecía buscar algo entre las paginas, a diferencia de la última vez que vio un libreo así, las letras estaban en español—. ¿Si es una leyenda quieres decir que no es real?

Después de haber creído que aquella investigación tenía algo que ver con su condición, al escuchar el punto de Cami se dio cuenta de que lo más probable es que aquello estuviera fuera de lugar finalmente, si ambos están originados a ser "Guardianes" no tenia porque incluir a un extraño en la luna, ¿cierto?

—Oh, no, las leyendas son ese punto que se mantiene entre algo ficción y un hecho verídico, no sabrías si alguna vez lo fue, ¡Este mundo es extraordinario! Así que, ¿por qué no? —explica y Bonnie siente que cada vez se complicaba más. Entonces ¿era cierto o no lo era?—. Pues, ¿sabes que hacia ese hombre en la luna?

—Atarle un hilo a los bebés cuando nacían uniéndolos a su alma gemela —comenta recordando lo que leyó, notando como los gemelos sonreirán gustosos—. ¿Y eso que tiene que ver?

—¿Que era lo que dijiste que tú podías hacer? —pregunta nuevamente y Bonnie sigue sin comprender a donde van con todo eso.

—Veo el hilo rojo de las personas... Pero Cami ya me explicó que era porque originalmente nacimos para ser guardianes de almas o algo por el estilo —enuncia y ambos sueltan una carcajada, ¿ahora de que se reían?—. ¿Se burlan de mí?

—Nos reímos de lo ingenuo que hay en ti —dice ahora su melliza conteniendo sus cortas carcajadas.

—¿Quien dice que esos dos temas no están relacionados? —Cuestiona Puppet y allí Bonnie siente que al fin veía a que se refería con todo eso—. Los guardianes son creados para unirlos, aquella leyenda dice que hay una persona que le dio origen a todo el entorno de un tema en especial... En TU tema en específico.

Bonnie mantienen silencio, en realidad no estaba seguro de que responder ahora, solo sentía que lo mejor sería mantenerse callado y escuchar que era lo que tenían que decir con todo esto.

—Escuchaste de ese tema, ¿pero que destaca allí? ¿Cuáles son las dos características principales, las más importantes para ti? —vuelve a hablar y entonces el peli-mora observa como parece encontrar la pagina que busca porque al final una sonrisa se posa poda n su rostro—. Desde que nos dijiste que tú no sentías como lo hace Cami investigamos sobre lo que si ves... Al final recordamos esto y nos dimos cuenta de que te centra ahí, y además te relaciona con aquel ser... Eso es "el hilo rojo del destino"

—¿Y qué significa que de alguna forma esté relacionado con él y con todo eso? —a Bonnie se le hacia una suerte que Chica estuviese tan entretenidas midiendo unas cosas con Cami porque estaba seguro de que hubiera sido un buen momento para interrumpir de su parte—. ¿Qué tiene que ver el hilo?

—El hilo es una metáfora de la unión de dos alma destinadas a encontrarse, el modo en el que te destaca en mucho más literal en tu caso —explica y procede a agachar la mirada hasta concentrarse en uno de las paginas—. Cuenta la leyenda que el hilo rojo se encargará de unir a aquellas almas gemelas...

—El hilo rojo es capaz de estirar, anudarse, e incluso contraerse pero nunca romperse —le sigue las palabras su morocha también leyendo de aquellas páginas antes de alzar la mirada y otorgarle una fija vista perdida antes de murmurar muy bajo, casi par ella misma—. Aunque si puede cortase... —tras decirlo capta atención del peli-morado con aquella corta oración... ¿Que estaba queriendo decir con eso? Ella negó una par de veces para luego sonreír alegre—. ¡El segundo punto importante esta relacionando con la luna! Wu~

—Cierto —le sigue su gemelo volviendo a captar la atención del mayor—. ¿Nunca te preguntaste porque ese viejo andaba en la luna?

—No. —dice rápidamente sin pensarlo, ni siquiera se le habría cruzado por la cabeza hacerse esa cuestión tan siquiera—. Nunca me pregunté nada de lo que me están diciendo hasta ahora y sigue sin quedarme claro.

—Él estaba allí porque de esa manera nos podía observar a todos desde un solo punto, fue elegido por un tipo de "Dios" o incluso él podría ser uno... Por eso es importante ahora que tú estás involucrado —comenta luego de pasar a otras páginas—. La luna es un punto primordial para todo lo que te caracteriza.

—Nunca noté alguna diferencia con ella antes... ¿por qué pasaría ahora? —indaga y Puppet se detiene a meditarlo dejando su labor de lado antes de observarlo entrecerrando los ojos, pero rápidamente su melliza habla al respecto con una muy corta frase.

—Eres leeeento.

—¿Eh? ¿Lento en qué? Apenas estoy descubriendo que mi extraño origen podría estar ligado a un punto mágico, es normal que no comprenda algunas cosas —expresa y allí el más alto de los tres comprende que quería decir su morocha.

—Oh, no se refiere a eso —aclara el peli-blanco—. Habla de que comparado con Cami pareces desarrollar tus cualidades por etapas muy lentas.

—¿Y ella no?

—¡Ella ya tienes muchas! Por eso tendrías que pasar un rato con ella para que te explique —asegura sonriente—. Sabemos que ustedes parecen tener "poderes" principales diferentes, pero abarcan lo mismo, solo que a diferencia de ella, tú vas desarrollando lo que va de ellos poco a poco cuando ella ya nació con todo eso.

—¿¡Nació!? —pregunta sobresaltado tras saberlo. Si él había estado atosigando por esos últimos años en los que poco a poco se fueron manifestando todos aquellos extraños sucesos, no quería imaginarse lo que sería experimentarlos desde el comienzo de tu origen—. Y... ¿ella sabe cómo controlar eso?

—Sí~ ella sabe mucho, fue las que nos dio el incentivo para investigar más en primer lugar sobre esto —asegura con una sonrisa la melliza—. Aunque nunca hemos pasado con ella este tipo de luna, será interesante verla ahora.

—¿Y qué tiene que ver la luna con nosotros directamente? —se aventura a preguntar al fin y al cabo.

—¡En Halloween habrá luna azul! —comentó con emoción Puppet a lo que el confió arquea una ceja.

—¿Como las de los pitufos?

—¡Ja! Que gracioso eres, pequeñín —añade con mofa antes de percatarse de que Bonnie lo dice en serio—. Eh, no... La luna azul es un fenómeno natural como cualquier otro, muy poco visto, al menos sucede una vez al año.

—¡La luna llena hace acto de presencia dos veces el mismo mes! —Explica ahora la chica, viendo como Bonnie parecía comprender mejor—. Las cosas se pondrán interesantes contigo esa noche.

—¿Que quieres decir?

Antes de finalmente responder Puppet se lo piensa intentando encontrar las palabras adecuadas para explicarse. Esto provocaba que Bonnie se sintiera sumamente ansioso sin saber que opinar ahora, todo lo tenía muy confuso.

—Veras, la luna es una Cupido pretenciosa por si sola —empieza a hablar el de cortos mechones claros—. Lo que sabemos es que cuando aparece más de una vez es porque algo quiere hacer.

—¿Cupido? —se cuestiona sin creer todavía lo que se escuchaba, todo era sumamente extraño.

—Pequeñín, tienes que tener mucho cuidado, las cosas podrían volverse algo locas para ti ahora que sería tú primera vez experimentándolo —inquiere a la vez que decide tomar sus manos y apartarla para que le prestar especial atención.—. Puede pasar cualquier cosa, aunque no será nada de que temer, eso sí —Con la mano que le sostenía la extiende dejando su palma descubierta antes de trazar en ella una línea directo a su meñique—. ¿Sabes por qué el hilo rojo esta viable en el dedo meñique? ¿Tú lo ves allí?

—No, no lo sé, y sí, allí está ¿Por qué cambias de tema ahora? —pregunta inquieto a la vez en la que lo observan mutuamente.

—En este dedito hay una vena conectada directamente al corazón, y con la luna azul el corazón es el más afectado y susceptible a ese entorno —asegura y Bonnie a través de los lentes frente el entrecejo—. Ten a la vista todo esto, y si es posible, intenta mantenerte cerca de Cami así nos dices también como le va con eso.

Una vez concluye estas palabras se levanta de su lugar y se lleva el libro consigo, Bonnie sentía que la duda se le quedó atorada en la boca pero al voltea la vista se encuentra con la concentrada mirada violeta de la melliza sobre él.

—Puppet no sabe porque me gusta tanto Halloween, piensa que porque es tenebroso y escalofriante~... pero no —asegura riéndose a la par para luego comenzar a gatear en el piso del escenario y situar su rostro muy cerca de la cara del mayor—. No solo tienes que tener cuidado con la luna, ten cuidado con el día, la fecha, las personas ¡Todo lo que te rodea! Verás, sentirás y te sorprenderás con cada cosa... La luna estará allí para unir almas, pero no es un día para ese tipo de unión, es un día para las que están perdidas, las que ya no están, las que ahora solo las conecta el tiempo.

Bonnie traga lentamente, viendo como aquella chica frente a él se había acercado de tal manera, ya comenzaba acostumbrase a aquellos repentinos acercamientos.

—A veces siento que tú me hablas en clave —ella sonríe de forma genuina al escucharlo antes de separase y levantarse de su sitio quedando de pie en el piso de la tarima.

—Es un día en donde dos situaciones especiales sucederán, te carcomerán ¡Querrás correr! Pero por si solo te darás una respuesta propia. La unión va más allá del tiempo, pero cuando ya no está poco a poco desaparece y aunque tú no sientas, lo harás.

Luego de haber finalizado se fue saltando contenta hacia donde están ahora su morocho, recibiendo gustosos a Lily que se había decidido venir a ayudar para las decoraciones y de paso anotar el disfraz que usaría.

Y ahora con todo eso en mente Bonnie esperaba internamente que aquel día se retrasara lo más posible, no se sentía para nada tranquilo, ahora sabia que le pasaría algo, que la luna tenía que ver y que el día también, ¿Por qué justamente ese día sucederían grandes sucesos para su condición? Tendría que averiguarlo por sí mismo, pero lo que más esperaba con todas sus fuerzas que no pasara es que algo remotamente parecido a los dolores que le comenzaron una vez llegó a esa institución no se repitieran con todo aquello.

Sin dudas, para él sería un evento muy agitado por lo de su condición... Y ni se imaginaba de que ese sería el menor de los casos de algo verdaderamente grande aquella noche de Halloween...

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

El capitulo de hoy esta dedicado a: HatsukoFHS LuliTan2 Majobresia245 @DZ_GoriZ_Gorillaz_BxB NatBv12 Hwang_Eunjin Galiv17menciona un usuario No olviden comentar a millón para que les dedique capitulo ♥
.

Nota de la autora:

¡Hello My star's!

¿Cómo están mis estrellas? ¡Aquí está esta cosita divina que soy yo con un nuevo capítulo!

Luego de haberme retrasado tengo que decir que al final no me convenció, pero ya que :'C

Tuve problemas con conexión, luego con el tiempo, y de pronto me hallé supeeeer ocupada jqjdbsb

Espero les haya gustado, me esforcé mucho, y ojala se hayan entretenido al menos, ¡En el capitulo pasado llegamos a mas de 1K en unos días! ¡Dios! Los amo a todos de verdad.

Miren esta belleza de parte de @hua_co en twitter, (perdonnosetuuserdewattapad) DEMASIADO LINDOOOO

Que les gustó aquí --->

Teorías chingonas por acá --->

Alguna pregunta (? --->

Algo que les pareció curioso que mero --->

¿Que porque hice tantas referencias a la primera tempo de la serie? Me entró la nostalgia de cuando era rescatarle wn

Y ya en el siguiente capítulo iniciamos con ¡El especial de Halloween! Si quieren lo pueden leer en octubre para el ambiente ahre(?

Un dato curioso es que en la realidad la luna azul SI la veremos, este año, y ¡En octubre! Kahdvwgzhwhd es gracioso por que el fic está ambientada en el 2019 y pasara pero este año (?
Lo supe cuando andaba investigando lo del calendario lunar UvU

No olviden que la historia la pueden conseguir con el #HiloRojoBxB y seguirme en mi cuenta de twitter como @CmCimi, allí subo dibujitos a veces y todo eso. Si quieren mandar algo y no tienen twitter pueden hacerlo que sea a mi cuenta de gmail [email protected]

Espero hayan comentado y votado mucho.

En realidad no puedo decir con exactitud si la siguiente semana logre sacar capitulo :'D
Meperd0nan?

¡Enjoy!

Att: Cami <3i

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro