𝐨𝟐𝐨. los gonzález lópez

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❝ i've been under scrutiny,
you handle it beautifully, all this shit
is new to me 


















































































❝ señoras y señores, con ustedes: ¡los gonzález lópez!

✦•─────• SI NO HUBIERA SIDO POR LOS DIAS LIBRES que Natalia y Pedri tuvieron en el trabajo con Adidas, ellos tendrían que haberse seguido viendo los días posteriores a su intenso momento en el departamento de la rubia. Gracias al cielo, pasó un tiempo sin tener contacto alguno y eso —de cierta forma— los ayudó a tener la mente más fría y clara en cuanto a lo que estaba pasando entre ellos.

Era lo que pensaban.

No obstante, eso a Elías no le gustaba mucho. Aunque sólo pasaran un par de días en que ellos no estuvieran juntos y que la prensa los viera, para él era dinero perdido. Debido a eso, llamó a Natalia para que estrictamente fuera a casa de Pedri a verlo durante el día, salieran a comer, o lo que fuera.

La motivación de ella en ir a ver al canario no era mucha y le expuso a su jefe que no tenía ganas de verlo ni en pintura.

Sin embargo, él le dio una razón bastante buena para ir a verlo, la cual la tomó por sorpresa.

Unos acelerados golpes en la puerta de la casa de Pedri se oyeron por todo el lugar. Nervioso por aquella desconocida insistencia, el futbolista trotó hacia la puerta esperando ver quién estaba detrás de ella y quién era la persona que cargaba tanta necesidad de verle.

Al abrir la puerta se llevó una sorpresa.

Frunció el ceño—¿Nat?

Sin siquiera saludarle o decir una palabra ella ingresó a la casa a paso pesado. El mediocampista la observó bastante confundido e incluso un poco asustado. Terminó por cerrar la puerta y se acercó a ella con temor. Ella se dio vuelta luego de su pesada entrada y se cruzó de brazos. Se veía molesta.

—¿Por qué no me dijiste que estás lesionado?

La pregunta de Dietz resonó por toda la casa y Pedri palideció un instante.

Sí, tristemente era la realidad. Natalia no mentía con lo que había dicho: Pedri estaba lesionado.

La ardua exigencia que el club había puesto en él incluso después de su primera lesión había sido mucha. Jugaba todos los partidos de titular, jugaba 90 minutos y más y casi no tenía descanso. La negligencia del equipo médico desgraciadamente había tenido consecuencias las cuales recayeron en la joven joya del fútbol una vez más.

No era justo.

—Yo...Este... —sus palabras se resolvieron al tratar de expresarlas y terminó tartamudeando.

—Elías me dijo —dejó caer sus brazos a cada lado de su cuerpo—. Soy consciente de la situación en la que estamos pero creo que, como tu novia —aquello lo dijo apretando la mandíbula— necesitaba saber esa información.

González tragó saliva y miró a todos lados preocupado. Aquel gesto confundió a la rubia y la hizo fruncir el ceño. Parecía que buscaba a alguien con la mirada.

—¿No podías avisar que venías?

La repentina pregunta la tomó por sorpresa e incluso se llevó una mano al pecho, ligeramente ofendida.

—¿Disculpa? —también miró a su alrededor—. ¿Interrumpo algo? ¿Estás con alguien?

Cerró los ojos—Natalia...

—Si es así está bien. Dijimos que no éramos exclusivos así que puedes hacer lo que quieras —se encogió de hombros mostrando que le daba igual.

—No es eso, es que... —miró a todos lados para luego acercarse a ella y susurrar—: Es más delicado que eso.

Ella estaba realmente confundida—Perdón si molesto, pero Elías buscó asustarme con esto de tu lesión. Sólo le faltó decirme que te iban a cortar la pierna.

Se tomó el rostro en las manos—No es tan grave, puedes estar tranquila —ella lo analizó meticulosamente—. No es cómo la última vez, sólo es...Muscular. Dicen que es una sobrecarga. El problema es que es es la misma pierna de mi complicación anterior.

—La derecha ¿No?

Pedri parpadeó un par de veces antes de asentir. Se sorprendió al darse cuenta de que ella recordaba ese detalle.

—Sí... —murmuró—. Pero insisto, no te preocupes, estoy y estaré bien. Dicen que vuelvo a finales de enero o incluso antes con bastante fe.

Abrió los ojos como platos—Pero eso es como un mes de baja.

Se rascó la nuca—Cuando lo dices como 4 semanas no suena tan grave.

—Es bastante tiempo —reclamó.

—En mi defensa, he estado más tiempo fuera —ella alzó una ceja—. Pero en serio que todo está bien, sólo necesito...Descansar. Pero prefiero que tengamos esta conversación otro día ya que...

—Oye —lo detuvo al ver que la empujaba hacia la salida—. Sé que te quieres deshacer de mí y que no queremos vernos las caras desde ese día, pero ten un mínimo de respeto —se quejó.

Se llevó las manos al rostro, ya desesperado y sin saber qué hacer.

—No es eso Nat, es que...

—Sí, es mi culpa haber venido sin avisar, pero Elías me obligó a hacerlo entre tanto susto.

—Natalia —buscó detenerla pero no pudo.

—Lamento interrumpir lo que sea que estás haciendo. ¿Sabes qué? Me arrepiento de por un segundo...

—Natalia —miró a todos lados.

—Haberme...

—Natalia.

—Preocupado por...

—Cariño ¿Qué está sucediendo aquí?

La pareja se congeló.

Una tercera y nueva voz se unió a la conversación, una que los dejó a ambos petrificados en su lugar.

Pedri sabía quién era.

Natalia no.

La chilena miró al futbolista de forma inquisitiva y él apretó la mandíbula y abrió los ojos como diciéndole con la mirada un muy encarecido te lo dije. Ella seguía sin entender, pero aún ninguno era capaz de girarse siquiera.

Sin embargo, y tratando de poner sus mejores caras, tuvieron que hacerlo. Poco a poco se voltearon para quedar en frente de tres personas.

—...Ti —terminó ella de completar en su último suspiro.

Uno era Fer.

El otro un hombre.

La otra una mujer.

Y quien había hablado había sido la mujer.

—¿Hijo?

Dietz cerró los ojos con pesar, dándose cuenta de que se trataba de lo que tanto temía y trató de ponerse en el mejor papel actoral de su vida para no arruinar su farsa en frente de personas tan importantes como ellos.

Posteriormente, sintió la calidez de la mano de Pedri en su espalda baja.

—Nat —la acercó un poco más—. Te presento a mis padres.

El momento que ella tanto había tratado de evitar había llegado y una de sus primeras reglas que habían puesto desde el inicio se había roto.

Ella tragó saliva y comenzó la actuación.

Sonrió como la persona más amable en el mundo.

El futbolista continuó—Rosy, Fernando...Y a mi hermano ya lo conoces —se le oía nervioso—. Mamá, papá...Natalia...

Se echaron una mirada.

Mi novia.

Hubo un corto silencio. Uno que no estaba cargado de sorpresa sino de...Nerviosismo. Nadie podía fingir que no sabían quién era la rubia. La conocían por su trabajo, pero también los medios se habían encargado de exponer que ella era la novia del futbolista. Novia que él se esforzó por mantener oculta de sus padres hasta ese momento inesperado.

Los más adultos se miraron para luego acercarse a ellos. En ese instante, Natalia se dio cuenta que era su momento de actuar y como nunca antes.

—Es un placer finalmente conocerlos —sonrió de forma tan amplia que casi le dolía. Luego, saludó de beso en la mejilla a cada uno—. Lamento haber llegado así nada más. No sabía que ustedes estaban aquí.

—No es ningún inconveniente —contestó la mamá del canario en una voz neutra. Parecía aún estar analizando a la actriz—. Teníamos que conocernos en algún momento.

Dietz le echó una mirada a Pedri para que le diera ayuda.

—Sí, lo sé, perdón —se adelantó él—. Es que, con todas estas cosas de la prensa y el trabajo habíamos querido mantenerlo bajo perfil con las familias para, ya saben, no involucrarlos en el ojo mediático.

—Exacto —apoyó ella—. Todo ha sido realmente un caos y no me hubiera gustado tampoco meterlos en él. Sin embargo, me alegra conocerlos. Pedri siempre habla mucho de ustedes.

Mentira, no estaba feliz, quería que la tierra la tragara.

Los adultos volvieron a echarse una mirada. Había un ambiente tenso.

—Bueno, ya que estás aquí ¿Por qué no te quedas a almorzar? Me gustaría qué habláramos y también así conocernos mutuamente.

Comenzando a entrar en colapso por las palabras de Rosy, detrás de su espalda, Natalia movió su mano para darle leves y desesperados golpecitos al futbolista indicándole que eso no podía pasar.

—No creo que sea buen momento —dijo él—. Nat ha venido por algo puntual y tiene que irse.

—Sí —apoyó de inmediato—. Lo siento tanto.

—Oye, pero ha venido a preguntarte por tu lesión. ¿No le habías dicho eso tan importante a tu novia?

Las palabras de su papá los pusieron contra la espada y la pared. Eso significaba que habían oído parte de su conversación y los habían puesto en aprietos.

Por suerte, Dietz supo como salir del paso de manera olímpica:

—Oh, es que, es mi culpa —dijo—. Yo soy de ese tipo de persona que se preocupa y se estresa en exceso y él lo sabe. Así que estoy segura de que, como supo esto hace poco, había estado buscando la mejor manera de decírmelo y que yo estuviera tranquila —lo abrazó de lado—. Es que su hijo es realmente muy tierno.

Sus padres se echaron una corta mirada que parecía tierna ante lo escuchado.

Fer sólo los miró con una ceja alzada detrás de los mayores.

—Sí, exactamente eso —apoyó la idea—. No quiero que se preocupe de más por mí y siempre trato de presentarle noticias no tan buenas de la forma más tranquila posible —ambos sonrieron al frente.

—Eso es adorable —confesó su mamá aun manteniendo su neutra expresión—. Pero insisto, nos gustaría que te quedaras a comer para por fin conocernos.

La pareja se miró nerviosa y Natalia ya no sabía cómo rechazar la propuesta—Yo...

—Además, así podríamos hablar de las fiestas de fin de año —Dietz pareció ahogarse con su propio aire al oír a Fernando.

—Sí, nos gustaría saber si pasarás Navidad o Año Nuevo con nosotros o ambas —secundó Rosy.

Natalia ya estaba perdiendo la cordura—Yo...Este...¿Qué?

—Claro, ya eres como parte de la familia, tienes que pasar una de las fiestas con nosotros y la otra con tu familia —al oír a la mujer, la actriz comenzó a marearse—. Por cierto, también nos gustaría conocer a tus padres. Es importante saber también quienes serán nuestros consuegros.

Oh no.

Tocaron la herida.

Pedri notó como la respiración de la rubia se estaba volviendo más irregular y como sus manos temblaban detrás de su espalda. Estaba haciendo un enorme esfuerzo para que eso no se le notara en la cara pero debía hacer algo para ayudarla.

Miró a su hermano.

—Eh, Fer ¿Sabes? Creo que se quedaron unos bolsos de nuestros padres en el auto ¿Por qué no los traen?

Disimuladamente, hizo un gesto con la cabeza apuntando a Natalia, pidiéndole así que se le llevara con él un segundo.

—Claro, ya voy.

El mayor entendió inmediatamente la indicación y fue a buscar las llaves del vehículo para luego acercarse a a actriz.

—Nat ¿Por qué no me ayudas?

Ella casi sonrió del alivio—Claro.

Finalmente, ambos se alejaron del grupo para salir de la casa en busca de los bolsos faltantes. Cuando el sonido de la puerta cerrándose se oyó, indicando que los tres ya estaban solos, el mediocampista tomó la palabra.

—Oigan, bajen las revoluciones, por favor.

Sus padres se miraron y el hombre fue el que habló—: ¿Qué cosa dices? Sólo estamos hablando con tu novia.

—Novia que no nos habías querido presentar —Rosy le sacó en cara—. Tú no eres así, hijo.

Éste se tapó el rostro con las manos—Ya se los expliqué

—¿Entonces? —siguió su mamá—. No nos juzgues por hacerle preguntas. Tenemos que conocerla.

—Sí, pero sólo les pido que tengan cuidado con ellas —aquel comentario los confundió—. Sólo... —suspiró y miró a la puerta esperando que no viniera nadie—. No empiecen con el tema de su familia y de querer conocer a sus padres.

—¿Por qué? Es lo mínimo ¿No? —dijo el mayor.

Pedri trató de buscar las mejores palabras para explicar la situación.

—Sí, pero ella no es ese caso.

—¿Por qué?

Tomó aire. Hasta a él le dolía recordar la realidad de la chica.

—Su papá murió cuando tenía 13 y su mamá desapareció de un día para otro cuando tenía 18.

La explicación y la revelación de esa información dejó al matrimonio más que pasmado. Incluso, la mujer tuvo que sostenerse del brazo de su esposo ante la mala sorpresa que se había llevado.

—Ella no tiene una familia a la que ustedes deban conocer —siguió el menor—. Sólo tiene a su hermana menor de la que tuvo que hacerse cargo cuando su mamá se fue. Son sólo ellas dos.

—Lo siento hijo, no lo sabíamos...

—Está bien, yo en su momento tampoco lo sabía —suspiró—. Por eso les pido que tengan un poco más de tacto al hablar de estos temas. No estén mencionando a sus padres ni nada. A ella...No le hace bien.

¿De dónde había salido esa faceta suya tan preocupada por el bienestar de Natalia? Tuvo que darse un segundo de silencio para analizarse y darse cuenta de las cosas que decía y la forma en que las decía. Se le oía sumamente preocupado por la actriz y ni él era capaz de reconocerse.

—Entiendo, entiendo —dijo su madre con sinceridad—. Lo haremos.

Segundos más tarde, oyeron cómo la puerta se abría dejando ver a las figuras de Natalia y Fernando que entraban con unos bolsos en las manos. Al ingresar, los dejaron en la entrada y se acercaron al grupo otra vez ante la insistencia de sus miradas.

—¿Todo en orden? —preguntó la chica pero haciendo énfasis un poco más al futbolista.

—Claro que sí —sonrió él.

—Lo sentimos si fuimos un poco intensos al inicio —la voz en tono de disculpa de Rosy sorprendió a la chilena y le puso atención—. Es la primera vez que nos pasa esto con Pedri, teníamos que hacer las preguntas.

—Mamá —él ocultó su rostro en sus manos avergonzado.

—No hay cuidado —sonrió ella.

—Pero en el fondo, sí nos gustaría saber si pasarás las fiestas con nosotros —siguió la mujer—. Al menos una de ellas, para empezar.

—No es necesario. De verdad no quiero molestar —trató de sacarse esa responsabilidad de encima.

—Imposible que nos molestes. Eres la novia de nuestro hijo y queremos conocerte —dijo Fernando.

—Es que... —miró a Pedri en auxilio pero el canario ya parecía incapaz de ayudarle. No había como zafarse de esa.

Ella suspiró.

Su mirada se fue un instante al piso y meditó en lo que estaba pasando.

Para ella las fiestas siempre habían sido algo difícil. Incluso cuando sí tenía a sus padres, jamás tuvo algo que consideraba relativamente feliz. Quizás sí por un segundo, pero más tarde todo terminaba en peleas. A veces ni siquiera celebraban y los cumpleaños, las fiestas patrias, Navidad y Año Nuevo pasaban como cualquier día del año.

Al final ella se acostumbró a eso, pensando que todo era así.

Cuando comenzó su vida sola con Laura se empeñó arduamente en hacer que eso cambiara. Aunque fueran sólo dos ella se encargaba de tenerle muchos regalos, una linda cena, salidas a comer afuera o incluso a otro país. No quería que la menor tuviera la dura infancia que ella tanto recordaba. Ella iba a romper el círculo.

El trauma generacional terminaría con ella.

Pero ir a la casa de Pedri, que ni era su novio real, a celebrar las fiestas era un nivel completamente diferente. Ni siquiera con sus otros ex novios había hecho eso. Jamás. No sabía qué hacer. Estaba atada de manos. Si decía que no ellos empezarían a sospechar y probablemente les caería mal. Pero si decía que sí...

Quizás podría tener una buena experiencia.

O algo parecido.

Aquello había sido de sus primeras reglas estipuladas: No involucrar a la familia. Pero ahora parecía imposible de evitar.

Sólo había un camino.

Apretando y soltando sus puños detrás de su espalda terminó diciendo:

—Bien —sonrió de lado—. Déjenme oír sus propuestas.

Los padres de los González sonrieron complacidos y sorpresivamente se miraron con ilusión.

Pedri se giró a mirarla y no podía creer lo que había oído.

Sí, él realmente había pensado que ella se negaría e incluso ya se había mentalizado a ello. No obstante, su afirmativa respuesta le generó sorpresa.

E incluso...

No, mejor no se los digo.

Bien se los diré.

Emoción.

—¿Qué tal Navidad? —la voz de su madre lo trajo a Tierra—. La pasamos en Tenerife con toda la familia.

Hizo una mueca—No creo que pueda. Le prometí a Laura que pasaríamos Navidad en Nueva York.

—¿Qué?

—¿En dónde?

—¿En serio? —la miró el futbolista.

—Sí —rió nerviosa—. Su película favorita Navideña es Home Alone 2 y, a partir de eso, lo único que ha querido es pasar una Navidad en Nueva York así que...La llevaré allá.

—Es un gesto muy bonito —reconoció Fer con una sonrisa.

—Gracias —sonrió igualmente—. Así que...Creo que no podré.

—¿Y Año Nuevo?

Ahí estaba la otra e inevitable opción.

Ella tragó saliva.

—También todo lo pasamos pasamos Tegueste —dijo el mayor—. No sé como son las tradiciones chilenas pero...Aquí tenemos unas buenas.

La actriz le echó una corta mirada al mediocampista para asegurarse como él estaba llevando toda esa situación y le regaló una sonrisa un poco nerviosa. Sin embargo, en el fondo, se veía un poco aliviado de que ella estuviera aceptando todo eso o sino él tendría problemas más tarde.

Finalmente ella suspiró cansada.

Se rascó la nuca—¿Podría...? ¿Podría tener un tiempo para pensarlo mejor?

—Claro, piénsalo durante el almuerzo.

Las palabras de Rosy la dejaron congelada. Aquello no tenía tanto tono de sugerencia como pensó, parecía más una indicación. Ellos querían que ella se quedara y lamentablemente ya no veía una forma de escaparse.

Eso iba a pasar quisiera o no.

—Ustedes ganan —sonrió nerviosa—. ¿Qué hay de almuerzo?

—Estamos preparando una parrilla —señaló el hombre.

Se escuchó como Pedri se golpeaba la frente y Natalia hizo una mueca. Ambos gestos realizados por una clara razón:

—Yo...Soy vegetariana —sonrió Dietz con nerviosismo.

Y todos la miraron mal.

Uf, sería un largo almuerzo.

































































H

OLA BUENAASSS FIN DE MARATÓN

cómo están? cómo se encuentran desde el shock del lunes? JSJDJSJDKS OH QUE ME REI LEYÉNDOLES, LES AMO

qué les pareció él de hoy? les dije que tendríamos apariciones nuevas, y aquí están!!! llegó el momento de Natalia encarando a la familia de Pedri. podemos hablar de lo tierno que fue pidiéndole a sus papás que tuvieran cuidado con las cosas que hablaban con Nat?🥺 lo amo

yyyyy, como le decía a maru por chat, se vienen los últimos capítulos que podríamos considerar "tiernos" después de eso todo se acaba y viene el COLAPSOOOO, BE READY

80 votos para actualización

gracias por su inmenso apoyo, no se olviden de votar y dejar sus comentarios. tkmmm💕

nos vemos el otro miércoles para la segunda parte de este capítulo!!!

SEE YOU SOON

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