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No supero esta foto porque parece que Yoonie está ahorcando a JK y está felíz 😂😂 ¿Jimin celoso? Nah 👀






































-Hasta que por fin llegas, estaba considerando llamar a la policía y reportar un secuestro- Yoongi vociferó de espaldas hacia el pelinegro pues se hallaba cocinando, el mayor había ladeado la cabeza sólo para cerciorarse de que en efecto quien había abierto la puerta era su pequeño tormento.

Habían transcurrido casi dos semanas y esos días no le había visto e incluso no había hablado con él, le extrañaba, si, pero aquello no quitaba el hecho de que le molestaba y preocupaba la reciente forma de actuar del chico.

Yoongi sostenía en su mano derecha una espátula mientras con la otra sostenía el mango de la sartén sobre la estufa, Jeongguk no tenía idea de lo que cocinaba pero olía delicioso.

-Primero que nada, buenos días- imitó uno de sus memes favoritos pero sólo escuchó al pálido bufar, lo que provocó una bonita sonrisa tan característica suya.
-Apenas voy llegando y ya están lloviendo vergazos.

Tiró sin cuidado la mochila sobre uno de los sillones y caminó hasta la cocina, sin pensarlo mucho sujetó la pequeña cintura del mayor, rodeó con sus brazos fuertes esta, Yoongi tensandose al instante.

<<Maldito mocoso>> masculló, Jeongguk nunca se dió cuenta del temblor en su cuerpo, de lo rojas que se pintaban sus mejillas gracias a su piel clara ni de los suspiros que salían de su boca sin poder contenerlos cada vez que descaradamente le abrazaba o le brindaba algún gesto de cariño que de manera muy patética el mayor mal interpretaba.

O eso pensó siempre el pálido.

Apoyó su rostro en su hombro y Yoongi ya había detenido incluso su respiración sin haberlo notado.

-Sé que estás enojado hyung pero perdoname ¿si?, te juro que tengo razones para tus preguntas.

Yoongi tomó un pesado respiro cuando por fin se dió cuenta que en sus pulmones faltaba oxígeno. Apagó el fuego de la estufa y alejó la sartén antes de tomar los brazos del menor y alejarlo por igual.

-Debemos hablar Jeongguk - trató de sonar firme pero fracasó en el intento.

Aquellas casi dos semanas le habían carcomido, durmió poco y sus ojeras adornando su bonita piel pálida le hacían verse fatal, Jeongguk lo notó, preocupándose al instante de que el mayor le diera la cara, se sintió culpable, había estado tan metido en el papel de ser el soporte de su rubio favorito que se olvidó incluso de si mismo.

Yoongi caminó hacia su habitación, tomando asiento sobre su cama tan lentamente que el menor quien le había seguido de cerca casi chilló.

-¿Pasa algo? ¿estás bien Yoonie hyung?.

El nombrado rió bajito, era tan irónica y absurda toda la situación.

-Las preguntas debería hacerlas yo- ignoró por completo los ojitos asustados de su menor, no podía mirarle o se desmoronaría allí mismo y eso no podía pasar, Jeongguk siempre vió su lado fuerte, su lado irrompible.

Pero todo mundo tiene un punto de quiebre.

Antes de que él dijera algo, Yoongi prosiguió aún sin atreverse a mirarle.

-¿Qué te pasa? ,tú no eres así.

-N-no entiendo - y aunque más o menos si lo hacía, quería entenderle sin algún atisbo de confusión.

-Sabes de lo que hablo- apretó sus puños no de rabia si no de frustración, Jeongguk bajó el rostro, apenado aunque no arrepentido y eso le hacia sentirse peor.
-¿Cuándo planeabas decirme que renunciaste? - se cortó cuando se dió cuenta de lo que dijo, no era su asunto y a pesar de que admitía para si mismo que estaba celoso, sabía que no tenía tal derecho.

Jeongguk no había contestado lo que le había hecho sentirse nervioso, era la segunda vez que le encaraba de esa manera y ciertamente no era su mejor momento para hacerlo.

-Es decir.. - se corrigió - .. ¿Por qué lo hiciste?, siempre has sido un chico responsable pero ahora sólo tiraste eso, te desapareciste por dos semanas, tu madre me llamó preocupada porque no contestabas sus llamadas.

Estaba tenso, le había quedado claro que no debía entrometerse de más en su vida sin embargo se sorprendió al escuchar una ligera risita, levantó la mirada y juraba que pudo haber muerto allí, aquellos ojitos se volvían medias lunas, su nariz se arrugada y sus labios se volvían aún más finos.

Era el chico más hermoso que había conocido y Min Yoongi había conocido a muchos. Ninguno como él.

-Hablé con mamá, pasamos horas conversando, incluso conoció a Jimin, insistió así que le llamamos luego por vídeo cámara, se llevaron bien.

Parecía tan felíz contando aquello, en cambio él se sentía tan... tan miserable.

-Mamá es dramática hyung, no tomé su llamada una sola vez porque estaba ocupado- Yoongi izó una ceja.
-Ocupado conduciendo! ,no pienses mal- se apresuró a aclarar pero él mayor estaba negado y Jeongguk había comenzado a pensar que ya no le conocía.

-Conduciendo - reafirmó con tono burlón - Pensé que sólo estarías con él para resolver sus necesidades físicas no para ser su chofer.

Jeongguk dejó caer sus hombros, la sonrisa que había adornado su rostro abandonando este.

El estaba felíz, ¿por qué su mejor amigo no podía verlo? o quizá lo hacía, ese último pensamiento haciéndole doler el pecho.

-Jimin no es como crees- y aquello fue el detonante, Yoongi había escuchado algo parecido a esa frase la vez que tuvieron un inesperado encontronazo, incluso Namjoon le había dicho, él conoció y trató al chico luego de que su nuevo novio los presentaran.

Pensó que sólo eran un par de idiotas, cómo rayos puedes hacer una percepción de alguien con sólo conocerlo por cortó tiempo. Pensó mucho en ello, hasta caer en cuenta que él mismo era el idiota número tres de la lista, quizá el peor, estaba haciendo exactamente lo mismo, ni siquiera conocía al muchacho entonces no podía asegurar que era mala persona.

Pero el amor es ciego dicen, Yoongi podría asegurar que eso no era cierto, el amor es estúpido, eso si lo había confirmado.
Sabía que no podía juzgarlo, estaba mal, pero Jimin se había acercado a Jeongguk sólo por un motivo, se lo dejó estrictamente claro desde que hablaron la primera vez por lo que se negaba a siquiera intentar pensar bien acerca de él y..

Maldita sea, sólo estaba celoso!

-¿Puedes por un jodido momento no hablar de él?, en las últimas semanas no ha habido una sola conversación nuestra en la que no esté su nombre de por medio- fue un error no percatarse del tono de voz tan duro que estaba usando porque a pesar de que Jeongguk era mucho más alto y musculoso se veía tan pequeño a su lado en ese momento.

-No me había dado cuenta, perdón.

-Deja de pedir perdón por todo, estoy harto de eso - en el fondo sólo se sentía resentido, Jeongguk era un alma pura, nunca levantó su voz o le ofendió incluso al soportar su carácter de los mil demonios que se cargaba y eso le desesperada, quería verlo enojado, quería que le reclamara, quería tantas cosas y ninguna de ellas podía ser.

-Bien - susurró el menor - Estaré en mi habitación, hablemos de esto después por favor - quería evitar otro choque.
Últimamente no comprendía lo que le pasaba a su amigo, entendía que estaba haciendo cosas que nunca pensó pero a el le gustaba, se sentía bien con ello, ¿por qué no podía simplemente dejarlo ser como lo estaban haciendo Nam y Hoseok?

-No he terminado- estaba apoyando sus codos en sus rodillas y en el rato que llevaban allí no le había mirado al rostro más de una vez.

-Dime qué pasa hyung- Jeongguk puso su mano algo dudoso en la espalda del mayor indicándole que podía confiar.
-Dices que he cambiado pero te equivocas, eres tú quien me trata diferente ahora, sólo quiero entenderte- habló suave y suspiró cansado.

-Sólo me enoja que estés haciendo estupideces por ese chico- chistó, por fin enderezándose para posar sus manos como apoyo detrás de su espalda, avergonzandose un poco cuando el menor le recorrió con la mirada su torso cubierto por una fina camiseta. Ese era siempre el problema, no podía soportar su forma de comportarse y no era su culpa, Jeongguk lo hacía con ingenuidad, porque simplemente así era él, pero Yoongi siempre acataba sus acciones de manera equivocada, lo sabía, claro que lo hacía pero se sentía bien con ello, era su placebo, era infantil y lo sabía.

-¿Lo dices por lo del trabajo? - se acomodó mejor en su lugar para mirarle de perfil ya que Yoongi no parecía querer mirarle.
-Trabajaré hyung, es un mejor empleo, ganaré mucho más y podré sustentar mejor nuestros gastos aquí- su ánimo volvió tan pronto como empezó a contarle las buenas nuevas con entusiasmo.
-Además haré lo que me gusta, es una compañia inmensa, ayer fuí para conocer mejor el lugar y me perdí tres veces.

Yoongi por fin esbozó una sonrisa, ese era su niño tonto de siempre, inteligente pero distraído. Era una ilusión tan sólo escucharle hablar.

-Debo agradecerle a Jimin, él me llevó con su padre y.. - ni siquiera pensó en lo que decía hasta que cayó en cuenta y se detuvo, el mayor había hecho una mueca de disgusto y sus facciones habían vuelto a ser duras.

-Hyung, sé que no te agrada, pero en serio deberías conocerlo, él sólo es una persona que ha pasado por muchas cosas..

-No hables idioteces, ¿acaso te estás escuchando?, para qué querría conocer a alguien que te contrató para ser su puto personal- sofocado, se puso de pie y no se detuvo en su rabioso discurso - Eres tan ingenuo que estoy más que seguro que no aceptaste su dinero por lo que te convenció de trabajar allí con esa mierda de que es un mejor empleo, quizá sé sintió culpable por usarte y no darte algo a cambio.

Estaba de espaldas hacia él por lo que no capturó el momento donde Jeongguk puchereó desanimado.

Aquellos días junto a Jimin le habían hecho darse cuenta de muchas cosas, cosas que nadie más sabía, así que de ninguna manera soportaría escuchar que le atacaran porque nadie comprendía el por qué de su forma de actuar.

Jeongguk se puse de pie por igual dirigiéndose hacía la puerta para salir de allí y encerrarse en su propia habitación, escuchar música y olvidarse del asunto por un rato o esos eran sus planes hasta que sintió la mano que le sujetó con firmeza.

Yoongi conectó su mirada felina con aquellos ocelos que le observaban con algo de tristeza, pidiéndole a gritos mudos una explicación.

-Disculpame, y-yo.. - fue la primera vez que le escuchó tartamudear con nervios, su pulso sobre su piel tembló y Jeongguk frunció sus cejas, aún más confundido de lo que ya estaba antes.

-Si no me dices lo que sucede, no podré saber y si no sé entonces puedes estar seguro que no soportaré más que hables de él sin conocerlo- Yoongi rodó los ojos - Tu no eres así, incluso me has hecho sentir mal con tus palabras, por eso no respondí tus mensajes, esperaba algo bonito de ti pero no hacías más que ofenderme, sé que soy estúpido por ilusionarme pero es mi problema, no tienes que repetirme mil veces que lo soy porque ya lo sé, sólo déjame hacerlo aunque todo resulte mal, incluso tal vez harás burlas de mi cuando pase y luego me consolarás, eso hacia el tú de antes, ¿qué te sucede ahora? sólo dímelo.

Fue la primera vez que le escuchó hablar decidido, sin titubeos.

Su bebé ya no era tan bebé.

Y tenía razón, se estaba convirtiendo en un cretino, se estaba volviendo tóxico, se estaba haciendo daño y le estaba haciendo daño a él.

Suspiró más de una vez para relajarse y nunca quitó la mano de su suave piel, ahora se sostenía como apoyo, como si fuese a caer en cualquier instante.
-Necesito alcohol para poder decirte esto - le soltó, caminando por el pasillo hasta la cocina con un  Jeongguk curioso y preocupado siguiendo sus pasos.

Dos horas habían transcurrido y Jeongguk se encontraba somnoliento luego de comer lo que el mayor había cocinado y servido, había tomado dos cervezas mientras tecleaba en su celular mensajes bonitos para su rubio acosador favorito, sintiéndose feliz cuando este le respondía de inmediato.

Yoongi le observaba desde el otro lado del pequeño espacio, aún no estaba ebrio a pesar de que su sistema ahora contenía más de diez botellas de cerveza y por primera vez se maldijo por tener alta tolerancia al alcohol.

Para lo que si tenía poco aguante era para la paciencia, y observar como el menor le sonreía a la pantalla le hacía enfurecer porque él no era el motivo de su sonrisa, el no era el motivo de sus sonrojos.

-Estoy celoso.

Jeongguk alejó de inmediato el aparato que se interponía entre su rostro y miró con atención a su mayor, quien había tomado asiento en la pequeña mesita de centro sólo para hablar con el chico de frente.

-Ilumíname - le dijo con voz más ronca de lo normal, haciendo que la mente turbaba del pálido enviara pequeñas descargas involuntarias por todo su sistema. Mordió su labio sin despegar su mirada de la ajena, el alcohol dándole el valor del cual carecía.

-Me gustas.

Silencio.

No se escuchó algo más allí, no hubo reacción, no hubo gestos de sorpresa. Nada.

-Lo sé - musitó con calma, siendo Yoongi quien quedó atónito.

-Tú.. ¿Cómo? - dijo avergonzado, su valor yéndose a la mierda y en su lugar tomando presencia el enojo.

-Supongo que no soy tan estúpido como crees- sonrió, para cuando Yoongi le miró aquellos ojitos grandes y llenos de brillo le perforaban, quiso rehuir de ellos pero se sentía atrapado, deseó permanecer en aquel letargo pero su voz suave le despertó.

-Nunca noté tus miradas, tu timidez cuando dormía a tu lado en las noches de tormenta hasta una ocasión - Yoongi se sonrojó, no había dicho mucho aún pero él sabía lo que venía, recordaba aquella ocasión y quiso golpearse por la burrada que cometió.

-Había despertado por el sonido de un trueno, sabes que odio eso - comenzó a narrar con cautela.
-Traté de dormir de nuevo pero no pude así que sólo cerré mis ojos, minutos después te sentí removerte, acariciaste mi pelo y dijiste que mientras dormía era el único momento en el que te sentías valiente para decirme que me amabas.

-Aún lo hago Jeongguk - sonrió con pena, pero no escuchó respuesta a eso.

-Me puse nervioso cuando dijiste que querías besarme, te agradezco que no lo hayas hecho, habría sido violación - ambos sonrieron aunque sin ganas.

Se sintió aliviado, al menos ya no cargarla con aquel peso, aunque lo que venía dolería más, lo supo cuando el menor tomó sus manos entre las suyas para luego poner un dedo en su barbilla y hacerle alzar la vista.

-Sabes que también te amo-.. <<no lo digas por favor>> .. - Pero no de la manera en la que esperas, hyung.

-Ya lo sé, por eso no quería decírtelo, no quería que me odiaras.

-Nunca podría hacerlo.

Yoongi asintió, poniéndose de pie para ir a su habitación y darse un baño, había tomado el día libre y fue la mejor decisión, pudo resolver muchas cosas, se sentía liberado.

Se detuvo a medio pasillo, como si su mente hubiese recibido un balazo, aquel pensamiento volviendo a descolocarle.

-Jeongguk - le llamó y el nombrado caminó hacia él sin chistar.
-Si ya lo sabías, ¿por qué no hacías algo por alejarte? ¿por qué estabas tan preocupado hace unos minutos? ¿por qué preguntar lo que me sucedía si ya conocías la respuesta?- le cuestionó, taladrandole con mirada acusadora.
-Caminabas por todo el departamento semidesnudo, me abrazabas, besabas mi frente y mejillas, dormias conmigo aún cuando había buen clima, incluso ahora quieres que conozca al tipo ese, ¿por qué?.

-No pensé que aún sintieras algo por mi, pensé que lo olvidarías, por eso me preocupé, no pensé que todo lo que está pasando fuera a causa de eso, no sabía la profundidad de esto - se sintió mal - por lo demás y-yo..

No supo que contestar.

-Sabías que me lastimaba tu cercanía, luché porque no me afectara pero terminé por crear dependencia hacia ti, mi único consuelo era pensar que no lo sabías, que mientras no supieras no me odiarias y resulta que siempre si estuviste al tanto, ¿por qué?.

-Pensé que si te demostraba mi cariño entenderías que sólo te veo como mi hermano mayor.

Ouch.

-N-no quise decirlo así hyung, no sabía como encararte o como decírtelo, yo..

El sonido del golpe contra su pómulo izquierdo le detuvo antes de poder decir algo más.

-Siempre si resultaste ser muy estúpido- escupió casi las palabras, se sintió nuevamente patético, le dolía que el menor no tuviera idea de cuánto le afectaba quererle y no ser correspondido.

Jeongguk sostuvo su mejilla, acarició la zona pero su piel ardía, no se esperó aquello, no de él. Sus ojos se inundaron porque el mayor tampoco conocía sus razones, él nunca supo lidiar con la situación, no quería herirle pero si se apartaba de la nada también le lastimaría.

No fue culpa de Yoongi enamorarse.

No fue culpa de Jeongguk que el mayor cayera por él.

Ambos fueron víctimas del tiempo y las circunstancias, nada más.

Quiso gritarle tantas cosas, tantos sentimientos guardados por tanto tiempo que su voz se quedó estancada en su garganta, por si fuera poco, Jeongguk había quitado su mano de su rostro, develando la zona roja que comenzaba a hincharse de a poco, sólo entonces sintió sus nudillos doler y se sintió tan hijo de puta, su enojo bajando a segundo plano.

Terminó por destruirle el momento exacto donde el menor le miró con ojitos acuosos.

-Mierda.. Kook, perdón, me dejé llevar, y-yo.. Perdón, en serio perdón..

Asintió y nada más.

-Creo que no es bueno estar solos aquí mientras las emociones estén descontroladas- dijo suave, casi inaudible.

Le esquivó sin decir algo más, tomando sus llaves y celular para salir de allí, era lo mejor por el momento, hasta que calmaran las aguas.

Yoongi no recordaba la botella de vidrio que mantenía en su otra mano hasta que el sonido de cristales romperse le despertó, había estrellado la botella en la pared luego de verle partir. Siguió su andar hasta la regadera y allí permaneció por un largo rato.

Debía soltar de alguna manera el lazo que le sujetaba, debía sacar a Jeon Jeongguk de su corazón antes de que fuera aún más tarde.






































Era extraño.

Habían pasado unas tres horas y Jeongguk no había visto su último mensaje, él siempre respondía en décimas de segundos.

No llevaba ni medio día sin verlo y ya lo extrañaba aunque nunca se lo diría. La compañia del pelinegro le daba calma, seguridad, era tan sencillo hacerse pequeñito en sus brazos y dormir abrazado a él.

El contrato seguía en pie, mantenía aún inseguridades en demasía, así que sólo le dió la oportunidad de conocerse sin tantas restricciones de por medio. Tacharon y eliminaron la regla de no convivir fuera de las sesiones de sexo, esto a decisión de Jimin luego del incidente con su ex. Y es que estuvo tan equivocado siempre, pensando que se sentiría débil al revelar su pasado pero no fue así con él, de manera extrañamente extraordinaria le hizo sentir comprendido.

No lograba entender como aquel chico sin mucho conocimiento lograba sujetarle y pronto cayó en cuenta de que le gustaba el equilibrio entre los dos, amaba su dualidad, podía verse tan débil y desprotegido cuando se hallaba entre sus nudos y cuerdas como también se volvía tan protector cuando le necesitaba.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando el timbre sonó, no esperaba a alguien por lo que rápidamente tomó el arma de electrochoque que Seokjin le había aconsejado adquirir.

Pero cuando asomó sólo un poco a través de la puerta entre abierta sólo vió un lindo pelinegro con hombros caídos y cabizbajo.

-Hola - le sonrió cuando alzó la vista y Jimin pudo sentir calor gracias al enojo creciente.

-¿Quién te hizo eso? - preguntó mientras le tomaba por una mano para hacerle pasar.

-No es .. No importa ¿si? - trató de calmarle.

-Claro que si importa, tu pómulo y tu ojo están hinchados, se pondrá morado para mañana ¿qué mierda pasó?.

Siempre tuvo piel sensible así que era de esperarse que el golpe evolucionara.

Jeongguk suspiró, había deambulado por cerca de su departamento pensando qué hacer durante casi una hora, no quería volver, tampoco quería llamar a Hoseok o Nam pues sabía que se enojarían con Yoongi y tampoco quería eso, él necesitaba tiempo, no más estrés, así que luego de cansarse decidió tomar un taxi e ir hasta el único lugar que se le ocurrió, rogando que Jimin estuviera de humor para recibirle.

-¿Puedo dormir aquí? -Jimin se cruzó de brazos pues el menor le había evadido la pregunta, sin embargo asintió sin pensarlo dos veces.

-Te contaré, en serio lo haré - le abrazó sin aviso, envolviendo sus manos en las curvas de su diminuta cintura, enterrando el rostro en su cuello y se hizo pequeño allí sin importar estatura, sólo encogiéndose ante las caricias que Jimin había comenzado a darle en su pelo desaliñado.
-Pero no me grites, dame poquito de mimos.

Jimin sonrió porque a veces parecía un niño.

-¿Qué pasó bebé? - preguntó con voz tan suave que Jeongguk se relajó.

-Date una ducha conmigo y abrazame al dormir esta noche - suspiró - A veces también me siento sólo.

Jimin le separó despacio, alzándose en las puntas de sus pies para dejar un beso tierno en su frente, acomodó un poco su pelo con adoración antes de relajar sus propias facciones y mirarle a los ojos, incluso viéndose desarreglado y con el rostro herido era hermoso.

-No lo estás ahora.

Jeongguk sonrió bonito, era exactamente la reacción que quería conseguir porque en los últimos días verle sonreír se había convertido en su segundo concepto suyo favorito.

-Pero te advierto que meteré mi zapato Gucci en el ano del hijo de puta que se atrevió a hacerte esto.

-Chiquito pero peligroso, ¿ah?- robó un beso de sus labios antes de correr hacía la habitación principal con una carcajada.

-JEON JEONGGUK!!!!

Incluso cuando le molestaba le gustaba, porque estando juntos las cosas se tornaban más fáciles para ambos, porque se estaban convirtiendo en el pilar del otro aunque uno fuera muy orgulloso para admitirlo y el otro muy tímido, ciertamente estaban creando una nueva realidad, una más sencilla para los dos.
















нєℓℓσ!!




























💕Denle mucho amor a los bebés siempre 💕







Hermosos 😍





See u soon 💜












❄BigBabe_Jeon

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