☪️:24' Confundido y desorientado

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SeokJin veía a su madre dormir tranquilamente, cuando TaeHyung finalmente volvía del baño en total silencio y su ropa estaba acomodada, dándole un aspecto más decente. El castaño le daba una fugaz mirada cuando lo veía acercarse y notaba el café en sus manos.

— ¿Para mí? —preguntaba como imbécil.

TaeHyung alzaba una ceja—. Pues somos sólo tu y yo los que están despiertos —alejaba su brazo y se encogia de hombros—. Está bien si no quieres.

Seokjin negaba y estiraba sus brazos en dirección a la mano de TaeHyung que sostenía el café—. Sí, quiero —decía cuando el azabache se lo entregaba.

Un pequeño puchero en sus labios que TaeHyung no había visto hace años. Le parecía adorable en aquel hombre inmenso. Suspirando se alejaba y tomaba asiento al otro lado de la habitación. Sentía que veía a SeokJin aún más grande luego de tenerlo cernido sobre su cuerpo golpeando dentro de él mientras lo incrustaba a la puerta de la habitación contigua.

Su culo dolía apenas, su polla se retorcía de nuevo en sus pantalones.

— ¿Por qué te sonrojas? —preguntaba SeokJin, tomándolo por sorpresa.

Sí, al parecer estaba rojo como un tomate o sutilmente rosado como Patricio la estrella.

Su ceño se fruncia—. No estoy sonrojado.

Seokjin alzaba sus cejas sorprendido ante la negación cuando literalmente sí, estaba sonrojado.

—Sólo estoy suprimiendo una carcajada porque tu "sí, quiero" al café fue mucho más convincente que tu "sí, quiero" en nuestra boda... —señalaba mientras sorbia su café y su ceño se fruncía ante la mirada de sorpresa de SeokJin, así que tragaba el líquido caliente que aguaba sus ojos y aclaraba su garganta para decir—. Falsa, nuestra boda falsa.

El castaño se encogía se hombros mientras tomaba su propio café. Entendía la expresión reciente de TaeHyung al beberlo, estaba caliente. Más que él por TaeHyung.

Pero decidía omitir ese último detalle comparativo.

—Era una boda falsa. No hay comparación, TaeHyung—decidía responder.

El susodicho rodaba los ojos, esa imagen de "todo me importa una mierda" estaba tambaleando. Seokjin no podía evitar quedarse prendido de él.

— ¿Qué me ves? —decía de repente.

Seokjin reaccionaba ante el hecho de que lo estaba mirando fijo como un maniático obsesivo.

Relamía sus labios y sus ojos de desviaban a su madre en la cama, parecía estar durmiendo pacíficamente.

—No estaba viéndote —decía luego.

TaeHyung reía secamente—. Suenas poco convincente —añadía.

Seokjin rodaba los ojos y sorbia su café, los papeles cambiaban inmediatamente cuando ahora, era TaeHyung quien lo miraba y lo miraba. Se sentía sediento cuando los labios de SeokJin tocaban el vaso descartable de café. Existía la leve y pequeña posibilidad de sentir celos de un objeto inanimado.

— ¿Por qué me miras así? —decía SeokJin sin verlo.

TaeHyung fruncía el ceño—. ¿Quien dijo que te estoy mirando?

Seokjin finalmente torcía la cabeza en su dirección—. Puedo verte por el reflejo de la ventana —respondía suavemente.

TaeHyung se sonrojaba. Algo estaba mal con las reacciones de su cuerpo, incluso SeokJin fruncía el ceño confundido por el sonrojo furioso en las mejillas de su falso esposo, otra vez.

—De acuerdo, sí ¿Y? —admitía de inmediato.

Era divertido como ambos susurraban suavemente, debido a la madre de SeokJin, quien aparentemente aún dormía.

—Y... Sólo-... —Seokjin apretaba sus dientes, mirando en dirección a la cama de la mujer—. Deja de mirarme así.

TaeHyung sentía su corazón acelerarse—. ¿Así cómo? —preguntaba entre dientes.

Seokjin se compadecía de él y respondía—. Cómo si me hubiera crecido una segunda cabeza.

El azabache suspiraba interiormente, pero la verdad era que, miraba a SeokJin y repasaba la conversación con su padre esa mañana. Las confesiones que este le había hecho con respecto a SeokJin y como había intentado acercarse a él, pero sutilmente su padre había logrado alejarlos. Haciendole creer a uno y a otro que, no eran importantes. Que no significaban nada entre sí.

Cuando la realidad, al parecer era cómo SeokJin le había mencionado. Le había dicho que había intentado disculparse y que él nunca estaba disponible para verlo. Seokjin no había mentido.

¿Qué podía hacer sobre ello ahora?

«¿Por qué siquiera harías algo? Ya se te pasó el tiempo»

— ¿Arreglarás tu mierda con Jungkook? —preguntaba antes de detenerse.

Seokjin abría sus ojos, llenos de sorpresa. Su mirada viajaba hacia su madre y se ponía de pie, caminaba en dirección a TaeHyung y lo tomaba de la muñeca para sacarlo de allí. TaeHyung se dejaba tironear, no comprendiendo la actitud del castaño, hasta que quitaba bruscamente su brazo del agarre ajeno.

— ¿Qué te pasa? —cuestionaba con ceño fruncido.

— ¿Qué te pasa a ti? —replicaba SeokJin—. ¿Por qué haces este tipo de preguntas?

—Soy curioso —Taehyung se encogia de hombros intentando que su voz sonara neutra y sin preocupaciones.

—A la mierda con eso —soltaba SeokJin.

Su voz había resonado un poco fuerte y justo una enfermera pasaba por allí, mirándolos con sus cejas fruncidas y llevando un dedo a sus labios, indicándole que bajara la voz. Seokjin apretaba sus dientes y se disculpaba. Luego llevaba a TaeHyung a un rincón oscuro del pasillo y lo miraba fijamente.

— ¿Qué? —preguntaba TaeHyung.

Probablemente fingiendo inocencia, pero de inocente no tenía nada cuando su polla se removía dentro de sus pantalones y sus agujero se cerraba alrededor de la nada por culpa de esos ojos más oscuros que de costumbre y la mirada cevera que en vez de causarle algun tipo de temor o mandarle un mensaje de advertencia, a TaeHyung lo ponían cachondo.

— ¿Qué estás haciendo? —preguntaba SeokJin más calmado.

TaeHyung alzaba sus cejas y sus labios se fruncían para responder en puchero—. Solo curioseando, fue una simple pregunt-...

—Que no deberías hacer —susurraba SeokJin, de repente su mirada ruda se volvía extrañamente vulnerable—. No deberías tocar el tema y ya. No hablé con Jungkook luego de-... —SeokJin quería omitir el "follarte en una sala vacía de hospital" pero TaeHyung entendía.

—Deberías relajarte, ángel. Solo hice un pregunta para saber —decía TaeHyung, extrañamente sonando distante y despreocupado.

Muy lejos de como se sentía en realidad.

— ¿Y que se supone que harás luego de saber? —mencionaba SeokJin, luego apretaba sus ojos y su mandíbula se tensaba mientras negaba con su cabeza—. Mira, lo que sucedió en aquella habitación-...

—Aish, aquí viene tu discurso de: "Fue un error, no debió haber sucedido" "Era cosa de una vez" bla bla bla —mencionaba.

Sé autofelicitaba mentalmente por sonar tan indiferente.

Seokjin envidiaba que TaeHyung pareciera imperturbable, él estaba muy lejos de sentirse así. Estaba demasiado afectado y él sabía que llegaría a ese estado de confusión si se daba el lujo de tocar a TaeHyung sólo una vez. No tendría que haberlo hecho.

Y no había sido cosa de una vez. La misma noche en que TaeHyung se ofreció a ser su consuelo, SeokJin se había saciado de su cuerpo en cuatro rondas diferentes. Había llegado a tres veces máximo con Jungkook en una noche y sin apuro. Pero él no tenía a TaeHyung, no era suyo, Jungkook lo era o al menos eso había creído...

Pero al parecer ninguno lo era. TaeHyung sólo se dejaba guiar por la lujuria y Jungkook estaba tan confundido como él.

—No diré nada de lo que acabas de mencionar. Sólo quiero pedirte que no vuelvas a insinuarte de esa forma

— ¡¿Yo me insinue?! —cuestionaba indignado.

— ¡Sshhh! No grites —susurraba SeokJin, cerca de su rostro, arrinconando a TaeHyung—. ¿Quién se acercó al otro sin respetar el espacio personal e ignorando el hecho de que todavía tengo novio?

TaeHyung sentía su polla creando una carpa en sus pantalones, el aliento a café de SeokJin lo golpeaba junto con su aroma masculino. No había descansado nada en su vuelta a casa, pero se veía perfecto con ese look desaliñado natural en su aspecto.

—Ignorando el hecho del maldito novio fue algo de a dos —susurraba TaeHyung de vuelta—. Yo no tengo un novio al que respetar, ese eres tú... —susurraba con ímpetu, picando el pecho de SeokJin con su dedo índice.

Nuevamente, escaso espacio entre ambos. Naturalmente gravitando cada vez más cerca.

— ¡No me lo estás haciendo nada fácil! —admitía SeokJin.

—Oh, vamos. No hice nada —se defendía TaeHyung, sabiendo lo mentiroso que eso sonaba.

SeokJin se frustraba más—. ¿Quién me pidió que lo follara?

— ¿Quién accedió sin problema? —le replicaba el otro.

—Tú-tú... Eres irritantenente provocativo y-... —sus ojos se perdían en la laguna negra que eran los ojos de TaeHyung. Su boca estaba roja porque había estado mordiendo sus labios y estos brillaban tentadores, burlándose de su cordura—. Eres tan-... —decía levantando su mano, empuñandola antes de sucumbir al deseo de sostener el rostro de TaeHyung en sus manos y acercarse nuevamente.

Este sentía que su corazón atravesaría su maldito pecho. Parecía haber vuelto al pasado, a ese adolescente constantemente cachondo y enamorado de SeokJin que quería estar sobre él todo el tiempo. Tocando y besando. Él quería solo consumirlo y ser consumido.

Estaban a centímetros de la boca ajena, respirando sobre los labios del otro. Era una tortura.

Una mirada de tristeza cruzaba el rostro de SeokJin y soltaba a TaeHyung alejándose repentinamente. El azabache se sentía desorientado, no esperaba que SeokJin lo soltará así, sin más.

—Esto es un juego para ti que sólo acabas de iniciar, pero... —decía mirándolo fijamente y juntando todo el valor de dejar las cosas clara. SeokJin pasaba saliva y aspiraba aire—... Me está jodiendo la cabeza ya.

TaeHyung pasaba el nudo en su garganta y se quedaba sin palabras—y deseoso—de que su boca fuera devorada por la de SeokJin para evitar decir idioteces y solo hacerlas, en este caso.

—Claro, porqué no eres un hombre infiel —soltaba con sarcasmo.

Quería decir algo más, pero no podía atacar a SeokJin con fantasmas del pasado, la evidencia dejaba en claro que este hombre había hecho lo que pudo, hasta que ya no aguantó más. Y los supuestos hechos lo dejaban a él como el verdadero hijo de perra de la breve historia de amor que habían compartido.

O quizás nunca estuvo destinado a ser.

Seokjin negaba nuevamente ante sus palabras—. Aún sigo en una relación puesto a qué no le puse fin y tampoco Jungkook. Así que al parecer, ahora soy un jodido infiel. Suma eso a tu lista de de banderas rojas sobre mí.

Y sin decir más salía de enfrente de TaeHyung. El azabache no estaba listo para terminar esa conversación.  A decir verdad no sabría cómo continuarla sin ponerle un dedo encima a SeokJin. O hablar de lo que fuera que estaba sintiendo.

—Sólo es lujuria, eso es todo —se decía a sí mismo, saliendo finalmente del hospital.

Cuando SeokJin daba por sentado una hora después que, TaeHyung no volvería, había estado tentado a preguntar si había llegado bien. Era de madrugada y TaeHyung no tenía su auto, había venido conduciendo el suyo propio cuando era un manojo de nervios por la llamada del hospital. Suspirando fregaba su rostro, el sueño aún no lo alcanzaba. Pero cuando llevará a su madre a su casa, se encargaría de ver si estaba apta para estar sola o quizás pasar unos días con ella como excusa.

Pero también tenía itinerarios radiales que preparar. Incluso debía de ver que carajos diría y hablaría en su próximo programa. No sabía si estar agradecido o no con sus oyentes, siempre querían algo nuevo y jugoso, no resultaba un problema cuando su relación con Jungkook estaba bien. Pero luego vino su casamiento falso y la gente empezó a pedir chismes del bueno.

No sólo Jungkook se había sentido extraño por como SeokJin contaba sus aventuras juntos, pero con el nombre de TaeHyung en él, también se había sentido extraño para Seokjin. ¿Qué se suponía que diría en el próximo programa? ¿Cuál sería el segmento especial?

"¿Cómo superar el engaño de tu pareja? ... Respuesta: teniendo sexo con tu ex, quien no sólo es tu ex, sino también tu primer amor y tu primera vez."

Seokjin suspiraba sonoramente recordando su último encuentro con TaeHyung y las ganas debordantes que tenía de besarlo y no dejarlo respirar. Ahora no podía simplemente culpar a Jungkook, no estaba seguro cuántas veces Jungkook y Jimin había follado en esa madrugada, pero él no había tenido piedad con el cuerpo de TaeHyung y con el hecho de que más encima tenían que compartir la cama. Lo tenía tan fácil y TaeHyung tan predispuesto.

No quería recordar cómo la segunda ronda había comenzado con TaeHyung descansando sobre pecho, su mano acariciando inconscientemente su espalda baja, con sus dedos luego pasando por su columna, cuesta arriba mientras escuchaba como TaeHyung gemía complacido por la caricia. Y luego por supuesto tenía que enredar sus dedos a la maraña de rizos rebeldes de TaeHyung, justo en su nuca, sosteniendolo con fuerza y levantando su cabeza para compartir una mira sucia que decía lo que sus labios no, y luego TaeHyung se levantaba para buscar su boca en un noventa por ciento del movimiento y dejándole la decisión final a un SeokJin que tomaba su boca con la ajena.

TaeHyung era tan dócil, dejándose besar. Fregando su erección a su muslo para que en el proceso de ese beso pasional y salvaje dónde ambas lenguas se enredaban con desesperación, las manos de ambos viajaran a la dura polla ajena y comenzaran suaves caricias y tirones que dejaban en claro que la segunda ronda ocurriría. TaeHyung tenía parte de su semen secándose entre sus glúteos, mucho lubricante y definitivamente estaba dilatado aún.

Así que no dudaba, cruzaba una pierna por encima de SeokJin para sentarse a horcajadas mientras este maniobraba su polla para introducirla entre los glúteos de TaeHyung y gemir complacido cuando se sentía bien apretado. Pero estaba seguro que el placer se duplicaba al ser TaeHyung quien lo apretaba.

Seokjin lo veía como imbécil mientras TaeHyung le sonreía ladino, mordiendo su labio inferior y bajaba lentamente para empalarse en su polla rígida y necesitada. Se veía como un sueño, moviéndose sutilmente y luego comenzando a saltar para golpear su punto una y otra vez. Los nudillos de SeokJin estaban blancos por la fuerza ejercida sobre las caderas de TaeHyung y poder moverlo a su ritmo, luego dejarlo inmóvil para que pudiera golpear cuesta arriba mientras TaeHyung se deshacía en gemido rotos y dulces.

Seokjin no tendría que haberle tocado un solo pelo porque sabía que estaría jodido. Pero la carne había sido más débil y su corazón un idiota herido. Así que creyó que quizás, podría no confundirse, pero eso había sido jodidamente rápido. Demasiado para admitirlo incluso en sus pensamientos más escondidos.

Suspirando sonoramente, su teléfono vibraba y su corazón se aceleraba.

Era Jungkook, llamando nuevamente.

—Dios... — SeokJin se sentía una mierda. Pero decidía responder mientras se ponía de pie fuera de la habitación de su madre—. Hey —articulaba.

Jungkook suspiraba al otro lado—. Hey —susurraba el pelinegro en respuesta—. ¿Todo está bien?

SeokJin apretaba sus dientes, parte de él quería simplemente perdonar a Jungkook y continuar, la otra sabía que algo estaba más que roto entre ellos.

— ¿Por qué no estás durmiendo? —soltaba con calma—. Tienes clase temprano y si mi memoria no falla, no es de tus favoritas —susurraba—. Deberías descansar.

Al otro lado se escuchaba un suspiro dulce. Él no lo sabía, pero Jungkook sonreía y se rompía otro poco sintiéndose miserable.

—No puedo dormir si no sé cómo estamos —decía—. Necesito que me perdones. Fui un imbécil y puedo rogar lo que sea necesario, te aseguro que no volverá a suceder-... —SeokJin suspiraba sonoramente cortando el parlamento de Jungkook.

El otro hombre sentía el nudo en el estómago. Dejando al silencio reinar entre ellos, hasta que tomaba el valor de hablar.

—Jin ¿Puedo hacerte una pregunta? —susurraba Jungkook.

SeokJin fregaba su rostro al otro lado de la linea—. Sí, si puedes... —respondía suavemente.

Jungkook se tomaba otro momento de silencio para preguntar. Ambos estaban con el corazón latiendo a mil. Posiblemente una pregunta muy obvia dando vuelta entre ellos que, necesitaba ser expresada en voz alta por uno, pero el otro estaba rogando que nadie dijera nada porque no sabía dónde diablos se encontraba en este momento.

Otro suspiro sonoro escapaba de los labios de Jungkook—. ¿Sucedió algo entre TaeHyung y tú, este fin de semana? —soltaba casi en una susurro—. Y no lo pregunto por tener mi consciencia sucia, yo solo-... ¿Pasó algo? —susurraba sin fuerzas.

Dejando a SeokJin recalculando sobre su respuesta porque, realmente no estaba seguro si podía simplemente catalogar sus encuentros con TaeHyung cómo "sólo sexo por compasión" o mirar más allá de lo que estaba comenzando a poner su mundo de cabeza y su corazón totalmente loco y confundido.

—Por favor, sólo responde —pedía Jungkook sin fuerzas.

2/2 Perdón la tardanza de la actualización. Espero hayan disfrutado estos dos capítulos, no sé si decirle "maratón" o "mini maratón"

Gracias por la paciencia 💜

Con amor, niñita Nanykoo💜

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