Athena Asamiya es el tipo de chica que quiere ayudarte.

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Pensó que aceptar la propuesta de Bao iba a salir bien, podría ser una manera de acercarse a (...).

Todo iba bien, hizo que Kensou aceptará dejar entrar al equipo a (...), como su striker, y para estar a la par le dio un traje que combinará con el suyo.

Y (...) se veía feliz, no sonreía, pero su Ki era el de alguien feliz.

Entonces ¿Por qué pasaba lo de ahora?

-¡Aléjate de mi, maldición! -estaba roja por la extraña fiebre que tenía, y eso la estaba preocupando.

El maestro Chin seria el primero en enfrentarse con Benimaru Nikaido.

No entendían qué pasaba.

Kensou le pedía que mirase el Ki de (...), que supiera qué le pasaba y así poder ayudarla.

Quería ayudarla, pero no quería invadir sus pensamientos.

Pero, ante la crítica situación al verla toser sangre, decidió hacerlo.

Y se sintió tan abrumada que quiso llorar y gritar.

Primero todo estaba tranquilo, (...) parecía haber hablado con Goro Daimon y luego todo se distorsionaba, hasta que de repente todo se hacia color rojo.

Imágenes rápidas.

Un hombre castaño que le daba la espalda, un ojo amarillo con la la pupila vertical, colmillos, huesos, una estrella, estrellas fugaces, de nuevo ese hombre pero ahora mirándola fijamente y luego ese tatuaje que, desde el KOF del 97', no olvidaría nunca.

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Justo en el momento que salía la striker del equipo japonés, (...), ahora pelirroja y con la piel apenas más oscura, salto directo a la garganta de la contraria.

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