Epílogo 2

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Creta POV

Nunca me imaginé encontrar el amor en un cambia formas; Dag es un chico magnifico, mejor que cualquier humano que haya conocido, me ama, me cuida, ahora que vamos a ser padres me siento completa, mi madre y yo estamos en el salón esperando por Eyra y los mellizos, Drakon se ha vuelto mas protector que nunca a los extraños los interroga para saber sus intenciones, está preocupado por la familia del rey que trató de invadirnos, que puedan cobrar venganza por haber matado a su rey. Los traidores fueron ejecutados, solo la tal Celene está en los calabozos junto a los hermanos de Eyra.

-¿En qué piensas hija? -Le sonrío.

-Nuestras vidas han cambiado. Mírate nunca me había imaginado que estando embarazada vería a mi madre en la misma condición y eso es bueno, para todos me alegra que Ake sea un buen esposo. Eso me hace feliz -Le soy sincera.

-Si hija yo nunca me hubiese imaginado que a mis cuarenta y dos años volvería a ser madre. Ake se lo merecía es un buen hombre, me ama y yo a él. Era lo justo, poder darle un hijo, alguien a quien criar y consentir a más no poder -Mamá suspira de alegría.

-Has sido una excelente madre, me criaste sola después de que mi padres nos abandonara, luego llego yo con una amiga, la cual adoptaste como tuya, nos defendiste y en el proceso conociste al hombre de tu vida. Gracias por darme el hermano que siempre quise, aunque será más hermano de los mellizos de Eyra y de mi bebe, que mío -Me carcajeo.

-¿Qué estará pasando? -Escuchamos un escándalo que interrumpe nuestra conversación.

-Quédense ahí, no salgan estarán más seguras. Celene a escapado junto a los humanos. Están buscando en el castrillo. Creemos que las están buscando a ustedes y a nuestra reina -El soldado toma su forma de dragón para ponerse delante de nosotras, escuchamos gritos por unos segundos, luego la calma.

-Los han atrapado -Ake aparece y abraza a mamá. El soldado mantiene su guardia en la entrada del salón.

-¿Cómo han escapado? -Pregunto directa.

-Un guardia los dejo escapar, al parecer Celene uso sus dotes de ninfa con un guardia muy joven y perceptivo a sus encantos -Lo miramos.

-¿Qué van a hacer con ellos? -Pregunta mamá.

-Creo que se han ganado el pase al más haya -Responde Ake.

-Hay que ver que dice Drakon. No nos adelantemos -Interfiero yo.

Así fue, Drakon ya no les tuvo más compasión al saber que su objetivo principal eran los mellizo y Eyra los sentenció a muerte. Eyra no estará presente, ni mi madre. Por mi parte solo quiero estar segura de que esta vez sí mueran. Por culpa de ellos viví un tiempo que el dolor de que había la posibilidad de que jamás podría concebir, gracias a ellos.

La primera en caer fue Celene, su amor enfermizo hacia Drakon la llevo a odiar a más no poder a mi hermana, los invencibles de Andor y Aric fueron los siguientes nunca aceptaron que ellos habían crecido con odio hacia Eyra, ellos cavaron su futuro.

*****

Caminaba por los jardines como me lo había indicado el doctor, mi hermano jugaba en el regazo de mi madre con los mellizos, sus padres desde lejos orgullos miraban a sus hijos, pronto mi bebe estará jugando con ellos. Dag y yo decidimos que no saber el genero de nuestro bebe queremos que sea una sorpresa. Ake, Drakon y sus hermanos hicieron una apuesta con respecto a si es niña o niño, sé en el fondo que Dag desea una niña, por mi parte me da igual, al fin creí que no lo tendría.

Estoy casi llegando donde están mi madre y hermana, cuando un líquido escurrió entre mis piernas, seguido un dolor insoportable, el cual me mandó al suelo de rodillas y grito.

-Es hora de irnos al hospital -Le dije a Dag al llegar a mí.

Dag me lleva en sus brazos llegamos a la frontera, donde esta uno de los autos escondido con ropa para Dag, la semana anterior lo habíamos hecho, sabíamos que como primeriza este bebe podría adelantarse sé que todos los demás vendrán, Eyra me dijo que estaría conmigo, así como yo lo estuve con ella.

-Está en labor de parto -Le dice Dag a una de las recepcionista -Ella llama a un médico y este aparece con una silla de ruedas.

-Le llamaremos si le necesitamos -Le dice el médico que atendió a mi hermana y a mi madre.

-Quiero estar con ella -Daga lo mira.

-Bien, una enfermera lo guiará a un vestidor para que se ponga la bata -Mi amor se emociona y sigue a una enfermera.

En la sala me preparan, me advierten que mi bebe es muy grande y que pueda que tendrán que acudir a la cesárea. Dag entra con la bata toma mi manos mientras las contracciones vienen y van.

-¿PUJA! -Pide el médico y lo hago varias veces, hasta que escucho el llanto de mi bebe.

-Es una hermosa niña -Informa el médico, las enfermeras la limpian, la pesa y miden antes de entregármela, sin embargo un dolor muy fuerte vuelve. Comienzo por llorar, estoy asustada.

-Vuelve a pujar porque viene otro bebe -Miro a Dag, sorprendida, el ecograma solo mostraba a un bebe. Pujo como si no hubiese un mañana. El llanto de mi otro bebe se dejó escuchar no tan fuerte.

-Es otra niña -Le realizan el mismo procedimiento que a su hermana, por suerte habíamos elegido dos nombres de niña y dos de niño.

-Visenya y Rhaenys. Los nombres de la madre y la abuela de Dag. Ellas habían sido dos guerreras del reino. Fueron muy respetadas.

-Gracias hermosa, me has hecho el hombre más feliz del mundo. Me has dado dos hermosas hijas que las Amaré por toda la eternidad, así como te amo a ti.

-Gracias por amarme, pese a nuestras diferencias -Lo beso con nuestras hijas en brazos.

Ahora si puedo decir que vale luchar por lo que amas.

Dania POV

Miro la tarde, es una fresca mañana de primavera, Ake juega con nuestro hijo Rhaegal, le está enseñando a caminar, mi hijo como su padre es terco, apenas si puede mantenerse en pie y ya quiere salir corriendo.

Cae, me mira y comienza a llorar, niego cuando veo a mi esposo, le reprende por llorar al caer y mirarme pidiendo ayuda.

-Eres descendiente de guerreros hijo. Debes ser fuerte -Le dice esperando que se levante.

-Recuerda que es un bebe esposo mío. Todavía no es un guerrero -Lo beso cuando estoy cerca de él.

Recuerdo el nacimiento de Rhaegal, fue de noche. Se había atrasado dos semanas, mi esposo se asusto cuando me desmalle y ardía en calentura. Cuando llegamos al hospital los médicos le informaron a Ake que decidiera entre los dos, mi presión arterial había subido demasiado. En un momento de conciencia me negué a que eligiera, le hablé a nuestro hijo y nació segundos después, debimos estar en observación más de lo normal, a él por estar más tiempo y a mí por mi presión. Los médicos lo había advertido por mi edad.

Al llegar a casa, Ake me explico que el desciende de dragones marinos y que por lo general ama mucho el ambiente húmedo por lo que cree que nuestro hijo no quería nacer debido al ambiente dentro de mi vientres.

-Lo consientes demasiado -Me reprende mi esposo.

-Lo haré es mi hijo. Tu encárgate que sea un buen guerrero como sus antepasados, no obstante, será cuando esté preparado -Beso la frente de mi hijo.

-Eres una excelente madre, lo veo en Creta y Eyra. Son mujeres muy fuertes -Ake besa a nuestro hijo y luego a mí.

-Sabes cuando nos atacaron, creí que había muerto cuando te vi. Creí que eras un ángel que venía a llevarme al cielo -Sonrío por confesar mi secreto.

-Cuando te vi en esa camilla, agonizando una parte de mis corazón murió, no sabía porque, nunca fui con Drakon pensando en encontrar a mi pareja, solo quería ver que tan crueles son los humanos. Muchos de mis antepasados murieron a manos de los tuyos. Drakon nos había contado lo que sintió cuando vio a Eyra, así que no debía ser tan tonto para no darme cuenta de que eres mi compañera. Lo único que lamento es que no pude torturar a esos degenerados por lo que les hicieron -Estrecha a nuestro hijo que se ha dormido.

-No pensemos más en ellos. Ya no le harán daño a nadie más. Ellos buscaron su muerte. Si se hubieran disculpado tal vez Drakon los hubiese perdonado -Se encoge de hombros.

-No pensemos en ellos. Ahora tenemos un futuro por delante. Un hijo al que educar. Y sobre todo ser felices -Me acerco a para besarlo con pasión. Nunca me había entregado de esta manera, con el padre de Creta no fue tan intenso, como con Ake, puede que sea que él no era mi pareja.

Miro el atardecer con alegría este será mi futuro de ahora en adelante.

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