Los chicos tendrían su primera cena en casa de Taehyung, era lunes y estaban esperando por el dueño de la casa, ya que este se encontraba terminando su turno en el Call Center.

—¿Creés que nos dirá algo? —preguntaba Minho a Vernon—. Está tan misterioso con el tal Seok ¿Que tal si es un loco y no sabemos nada de él? Podría descuartizarlo y jamás nos enteraríamos.

Vernon suspiraba.

—Hoy le haremos las preguntas necesarias, somos sus contactos más cercanos en el centro, no creo que el tipo sea un asesino —añadía haciendo notar a Minho lo exagerado que había sonado—, pero merecemos estar al tanto. Por simple cuidado.

Se encogían de hombros despreocupados, ellos siempre se contaban todo, especialmente Taehyung siempre solía contarles sus cortas aventuras, porque bueno, el tipo se aburría rápido.

Pero ahora con Seok estaba sumamente misterioso y eso llamaba en demasía la atención de los chicos. Obviamente, debía de ser discreto, pero ¿Cuánto tiempo sostendría aquella fachada de chico desinteresado?.

El azabache terminaba de guardar sus cosas y se despedía de sus compañeros, o al menos de aquellos que tenia vistos más o menos de ojeada.

Jackson lo felicitaba por seguir teniendo un fabuloso tiempo de conexión.

—Oye, el próximo mes tendrás una muy buena paga si sigues así —acotaba regalándole un bombón que tenía en una caja y tenía por costumbre regalar a los chicos cuando finalizaban para que tuvieran algo rico que degustar.

—Con el tiempo se vuelve más fácil —soltaba caminando a la salida con Jackson—, no creí que fuera posible, pero si.

El castaño reía—: Es fácil, a veces algo asqueroso, pero, hey...no pones tus manos en ninguno de ellos

—¡Oh no! Por dios, no —negaba divertido.

—Aunque necesito preguntar, porque es mi responsabilidad —decía más serio su supervisor—. Me pediste un número y te lo di ¿Salió todo bien? ¿Lo viste? ¿Te molestó? porque sigue estando entre tus clientes más altos hasta el día de hoy —preguntaba queriendo saber lo justo y necesario sobre el famoso Seok.

Taehyung pasaba saliva y pensaba si debía de ser honesto—hasta ahí—con su supervisor.

—Nos vimos —soltaba relajado.

—¿Salió todo bien? Estas cosas no le cuento a la señora Choi y creeme que no eres, no fuiste, ni serás el único en hacerlo —afirmaba—. Pero fuí el responsable y pasado un mes, de haberte dado su número, el tipo sigue llamando y sigue siendo tu tiempo de conexión más alto.

Jackson sonaba entre contento y preocupado. Si, Seokjin y Taehyung seguían teniendo sus conversaciones sucias, tanto fuera de la línea erótica como dentro.

¿Por qué? Era su jodido fetiche y les gustaba, también les servía para matar los días en los que no se veían. Esos días ganaban en demasía, se habían visto una vez en el hotel y luego de eso SeokJin había continuado sus llamadas. Aunque claramente el día de ayer, pasado casi todo con el empresario había sido la gloria, había perdido la cuenta de cuántas veces lo habían hecho, pero estaba seguro que sería complicado repetirlo a su gusto.

Y Seokjin quería aportar su dinero ya que estaba al tanto de las responsabilidades que el jóven universitario tenía ahora con su propio departamento.

—Salio todo más que bien, por favor no nos escuches cuando hablamos —suplicaba incómodo.

—No, lo hago —cuestionaba—. Solo mido el tiempo. Entonces me quedo tranquilo que había un ser decente del otro lado ¿Me invitarás a la boda? —bromeaba el supervisor.

«¡Ja!, él ya está casado»

Se despedían y salía a paso lento pensando dónde comprar vino para tomar con los chicos, pero una voz grave llamaba su atención.

—¿Tae? —el susodicho giraba levantando sus cejas.

—MinGi ¿Todo bien? —preguntaba al notar al chico de labios carnosos caminando hacía él con cierta timidez.

—Si ¿Y tú? Tengo entendido que tienes uno de los mejores tiempos —Taehyung asentía—, bien, no quiero retenerte mucho. Esto es para ti y si ves a Vernon, esta es para él —le tendía dos invitaciones.

—¿Qué es? —preguntaba viendo las mismas.

—Estamos a mitad de año y mamá siempre hace una fiesta. Es buena, para los empleados hay premios, aparte de alcohol y comida gratis. Una forma de incentivarlos ya que es conciente de que el trabajo puede ser muy incómodo —decía el más joven rascando su nuca.

—Lo es —afirmaba Taehyung—, pero deja buen dinero —ambos carcajeaban—. Asistiremos —añadía al finalizar.

MinGi sonreía de oreja a oreja.

—Es genial, lo anotaré entonces —decía casi balbuceando. Taehyung le guiñaba un ojo y salía directo al elevador, pero nuevamente el chico alto lo llamaba—. ¡Oh, Taehyung!

—¿Si, MinGi?

—Puedes, s-si tienes y deseas.   —añadía—. Traer a alguien contigo...

El más alto se veia tan tímido las últimas semanas con Taehyung, a veces parecía coquetearle, pero cuando el azabache estaba en su mundo realmente era muy malo para notar si le flirteaban o no.

—Tenemos un amigo en común con Vernon —aclaraba—. Somos los tres mosqueteros ¿Él puede venir?

—¡Seguro! —asentía feliz por no escuchar que el azabache llevaría acompañante amoroso.

—Nos vemos entonces... —tomaba la tarjeta y miraba por arriba la fecha—. Este viernes.

Salía haciendo reverencia y se metía al ascensor. Taehyung realmente no había notado los ojos con los que él recepcionista—hijo de su jefa—lo miraba

Una cena tranquila se daba entre Seokjin y su mejor amiga Jennie.

—Oppa...

—¿Ajam? —decía con sus labios en pucheros a causa de la comida.

—¿Me vas a contar que hiciste ayer o te harás el misterioso?.

Seokjin le guiñaba un ojo, tragaba y luego limpiaba sus labios.

—Fue una madrugada peculiar —decía relajado y Jennie lo escuchaba atentamente—. Taehyung me llamó ebrio.

Jennie tapaba su boca de forma adorable—. ¿En serio?.

SeokJin asentía—. Él estaba preocupado por tí

—¿Por mi? —cuestionaba confundida.

—No queria ser parte de un engaño —exclamaba.

—Eso habla muy bien de él —decía la castaña.

—Así que una cosa llevo a la otra y follamos

—¡Seokjin! —gritaba con un chillido gracioso.

—Lo siento —decía entre carcajadas demasiado ruidosas.

—Eres un idiota —decía puchereando divertida—. ¿Ya escuchó tu risa ridícula? Seguro y lo espantas, pobre chico

—Ah, Jennie Kim —fingía asombro—. No me llevo así contigo

—Ya oppa, ponte serio y cuéntamelo todo ¿Hablaron? —movia su manitos—. ¿Tuvieron la charla?.

SeokJin negaba divertido por la curiosidad de Jennie hacía él.

—Si tuvimos la charla —exclamaba suspirando.

—¿Y como quedaron? —preguntaba con cierta preocupación.

Sabía que no sería fácil estar al lado de SeokJin, fuera o no algo serio, estar con ellos era complicado.

—Lo que yo pidiera, él lo sería —exclamaba con calma—. Oh, y si escucho mi risa y cree que es adorable.

Jennie negaba entre risas.

—Si dijo eso de tu risa, ya está enamorado —cuestionaba.

—Jennie recién es la segunda vez que nos vemos

—Pero vienen hablando hace como un mes y más... —soltaba sorprendida—. Claramente tienen muy buena conexión, aparte obviamente, de la sexual —cuestionaba divertida.

—No creo que el amor en su forma más pura tenga lugar en esta ecuación —acotaba bebiendo vino.

—¿Por qué no? —preguntaba dubitativa—. ¿Crees que no pueden enamorarse por haber comenzado de una forma tan bizarra?

—Gracias por eso

—Sabés a lo que me refiero —añadía la castaña inmediatamente.

—Es diferente Jennie. Él está conciente de que está en una posición horrenda, ser el otro sin serlo del todo, es imposible que él pudiera ver más allá de eso y ciertamente yo no puedo darle más —añadía con pesadez.

—¿Que hay de mi ejemplo? —refutaba.

—Es diferente

—¿Eso por qué?

—Conocemos a Jongin hace tiempo —respondía—. Tienen historia, se han conocido a través de los años para reforzar está unión a escondidas.

Suspiraba claramente afligido.

—Eso son solo detalles —agregaba Jennie  suavemente.

—No creo que realmente que él pueda tomar nada serio, no tengo ese peso en su vida

—Se emborrachó y te llamo porque estaba afligido ¿Quien hace eso?  —cuestionaba—. Debería importarle un bledo si me pones o no los cuernos. Él quería saber de ti, dónde te encontrabas tú conmigo —suspiraba levantando su cabello en un rodete—. Creo que puede surgir el amor y solo espero que tengas dos dedos de frente para notarlo si sucede

—Mi frente es bastante grande —decía haciendo a un lado su cabello—. Tengo cuatro dedos, mira

—SeokJin —suspiraba Jennie cortando su chiste—, piensa una vez en tí. Mira esto nuevo que te está sucediendo desde todos los ángulos

—Asumes que yo podría enamorarme ¿Tan idiota parezco?

—Saliste corriendo a buscarlo cuando te llamo ebrio —soltaba con suficiencia.

Seokjin suspiraba dejando caer su cabeza.

—Prometo tener dos dedos de frente si el amor toca a mi puerta con la bonita cara de Taehyung —añadia—. Pero sería un dolor de cabeza

—No pensemos en eso, piensa en el presente. Si no te enamoras no hay porque hacerse mala sangre —decía con calma.

Seokjin reía, luego la sonrisa se desvanecía y se quedaba pensando unos momentos.

—¿Y si me enamoro? —preguntaba a su amiga—. ¿Que hago si me enamoro?.

Ah bonito bebé 🤧🤧🤧🤧

Pol dios...mi corazoncito.

Con amor Niñita Nany