234. La loca más loca

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Lía

Abro los ojos lentamente ya que me pesan y  mi cabeza está algo aturdida. Siento que estoy inclinada, noto que es un sillón, intento al menos sentarme, me cuesta un poco pero lo logro.

Miro y descubro que estoy en el living de una mansión, una vieja y quemada mansión. Paredes rotas de color opaco por estar descuidada y al parecer desalojada hace tiempo.

—¿Dónde... —me agarro la cabeza adolorida.

—¿Te gusta mi casa? —oigo la voz de Linzy y frunzo el ceño recordando como es obvio que llegue hasta aquí.

—Tan aberrante como su dueña —acoto sin vacilar —¿Se puede saber que mierda planeas? ¿Por qué me has traído hasta aquí? ¡¿Estás loca?! —grito aunque siento el aumento de mi jaqueca.

Ella camina hasta mí meneando sus caderas y se sienta en el sillón del frente al que estoy, agarra una bolsa a su costado, alzandola hacia mí.

—Recuerdas cuando te dije que te compre ropita, aquí está.

—Ni creas que voy a ponerme tu estúpido regalo —le aclaro y ella sigue sonriente.

—Chiquitita, te verás adorable, nadie más podrá decir que no eres femenina —agita la bolsa.

—¡Te he dicho que no, zorra! —le grito y miro para todas partes buscando la salida.

Si la encuentro rápido, me largo y ya esta. Es una casa vieja, hasta la puerta debe ser fácil de abrir.

Frunce el ceño mientras estoy distraída, pero luego vuelve a sonreír cuando la observo otra vez.

—Dejaré pasar ese mote desagradable y te lo diré amablemente, ponte el vestido o te lo pondré yo —se muerde el labio inferior mirándome de manera lasciva.

—No me pondré ningún vestido, ¡¿Para qué mierda me pondría un vestido?! —grito levantándome del sillón para aprovechar la oportunidad para corre, pero noto como mis piernas no responden del todo bien.

Es esa cosa que me inyectó, me ha dejado sin fuerzas ¡Maldita!

¡¿A quién le importa la fuerza?! ¡¡Corre estúpida o inténtalo al menos!! ¡¡Eso estoy tratando!!

Alcanzo a dar unos pasos pero Linzy me detiene por detrás, me abraza y me susurra al oído.

—Última oportunidad —apoya el cuchillo en mi cuello —¿Te pondrás el vestido o te convertiré en lesbiana antes de lo previsto?

No sé que quiere decir con esa aclaración retorcida, pero es muy probable que no sea nada bueno. Definitivamente me topé con la más loca de todas las locas.

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