Pov. Jennie:

Salí rápidamente del baño. Me sentía totalmente enojada. Esa tonta tipa se atrevió de empujarme y alejarme de mi Dongsaeng, sé que no fue pura casualidad. Me controlé para no contestarle con algún otro empujón por la presencia de Lisa, a ella no le gusta que me meta en problemas y no quisiera decepcionarla.

¡Para colmo de todo esto, se atrevió a tocarla en mi presencia! Eso sí que logró encender mi enojo, como cada vez que las veía juntas.

Soy yo su mejor amiga.

Ella tenía que estar a mi lado como cuando éramos unas niñas, ella tenía que hablarme y abrazarme a mí, ella solo tenía que sonrojarse cuando yo la acariciaba o besaba en la mejilla y yo tenía que ser la causante de aquella hermosa sonrisa. No Joohyun. Esa tipa no hacía nada más que alejarla de mí.

Estaba cansada de todo esto, quiero respuestas y solo Lisa puede dármelas. Tengo que hablar con ella a solas, sin que Joohyun nos interrumpa.

Sin darme cuenta había fruncido el ceño, así que rápidamente calmé mis facciones para no tener arrugas con el pasar de los años. A lo lejos pude notar a Juwoon, quien conversaba con total confianza con una joven de cabello rosa. Él agarró la mano de esa chica y disimuladamente empezó a propinarle caricias. Llegué a su lado y me miró sorprendido, se despidió algo nervioso de la otra.

No entendí su reacción y tampoco era como que me importara lo que hiciera.

Avancé un poco más rápido hacia la salida del cine y fui al paradero de Juwoon ya que tenía diferente ruta a la mía. Durante el trayecto no le dije nada. No me importaba tampoco aquel silencio.

Siendo sincera, en lo único que podía pensar era en Lisa, tal vez le daba muchas vueltas al asunto, pero simplemente no podía dejar de pensar en todo lo que estaba sucediendo. No podía dejar que nuestra amistad terminara así. La quiero demasiado, la quiero desde que tengo uso de razón y su presencia es muy importante en mi vida, no quiero perderla por nada ni nadie.

Llegamos y me senté en la banca tratando de analizar mi situación.

—Jen, ¿estás enojada? —preguntó de manera melosa, pero lo ignoré, no quería hablar con alguien que no sea Lisa ahora mismo—. Si es así, lo lamento mucho. Solo estaba hablando con Yura porque era mi compañera en la secundaria.

¿Yura? Me sentí totalmente extrañada, pero luego pude entender a qué se refería.

—¿Qué? No, no es eso —traté de sonreír, pero estaba segura que más parecía a una mueca.

Después de todo mi enojo era con Joohyun y mi frustración por no saber cómo acercarme a Lisa.

—¿No estabas celosa? —inquirió confundido.

—¿Celosa? ¿Por qué lo estaría? —eso ya me estaba aturdiendo.

—¿Acaso no te molestó ni un poco lo que viste?

—Parecía que la conocías y me acabas de decir que era tu ex-compañera —me encogí de hombros—. No es para tanto.

—¿Es en serio, Jennie? —bueno, creo que se enojó. Cada vez que pronuncia mi nombre me hace saber su cambio de actitud.

—¿Y ahora qué? —pregunté, importándome muy poco el tema de los celos. No quería discutir.

—Yo te vi salir y quise experimentar un poco, a ver si también estarías celosa conmigo como cuando ves a Lisa con Bae.

—¿De qué hablas?

—¡No te hagas, que yo tampoco soy un estúpido! ¿Acaso crees que no me doy cuenta de tus celos hacia Lisa? ¡Por Dios! Eres tan obvia. Antes de pedirte que fueses mi novia, muchas personas me lo advirtieron... —ahora sí que le di mi total atención, no estaba entendiendo a que se refería todo esto—, me dijeron que tu comportamiento era el de una típica celosa cuando se trataba de Lisa y, cuando estuve más cerca de ti, yo también pude entenderlo. Siempre te alejabas de nosotros en el receso para ir a verla a la otra facultad, aún si ella te ignoraba, cada vez que miras a Bae con Lisa parece como si quisieras matarla; llevamos pocos meses en la universidad, pero casi todos nuestros amigos están dudando de ti. Acaso —me miró fijamente—, acaso... ¿eres lesbiana?

—¿Qué tratas de decir? Tú sabes perfectamente que ella es mi mejor amiga desde la infancia y está muy claro que es mucho más importante que cualquier compañero de aquí. Ella es especial —dije lo último desviando la mirada. ¿Por qué mis mejillas comenzaron a arder? Tal vez tenía fiebre, eso suena lógico.

—¡Ni siquiera lo negaste! ¡¿Y yo qué?! ¿Acaso no soy especial?

—Juwoon, eso es diferente —hablé seriamente—. Deja de hacer ese tipo de preguntas absurdas.

—¿Diferente? ¿Diferente en qué? ¡Hace unos minutos traté de hacer algo para ver tu reacción! ¿Y qué obtengo? ¡Nada! ¡Ni un poco de celos de parte de mi enamorada! —alzó las manos, reclamando—. En cambio, te veo salir molesta desde el baño. ¿Acaso viste a Lisa con otra chica? —preguntó con descaro e ironía.

—Cálmate, ya —hablé, tratando de controlarme y no alzar la voz. Lo último que quería era armar un escándalo en vía pública—. Estamos discutiendo por cosas absurdas.

—¿Absurdas? ¿Acaso no lo entiendes? —suspiró fuertemente—. Parece como si no te importara lo nuestro.

—¿Acaso quieres que sea celosa contigo? No lo fui ni lo seré con nadie, deberías de alegrarte por no tener una novia celosa y tóxica, maldita sea.

—Pero con Lisa si lo eres, ¿verdad? —me miró con algo de decepción—. Sabes, creo que lo mejor sería darnos un tiempo, a menos que seas sincera conmigo y me digas si soy lo suficientemente importante o me confieses si sientes algo por Lisa.

Y entonces no supe qué decir.

Esa pregunta, por muy simple que parezca, hizo que mi mente colapsara entre tantos recuerdos, emociones y conversaciones.

Juwoon era un chico atractivo e inteligente, muy caballeroso y amable, pero Lisa; nadie puede compararse con ella. Es demasiado importante y especial para mí, es mi primer mejor amiga y lo será por lo que me resta de esta vida, de eso estoy segura. No podría alejarme de ella, a pesar de que es ella quien me evita.

—Ya lo suponía —soltó Juwoon, sacándome de mis pensamientos y sin más se fue.

No le pregunté hacia dónde se dirigía y tampoco lo detuve. Ya no quería hablar con él, al menos no por hoy.

Me sentía cansada tanto física como mentalmente. Ahora no solo era Lisa, sino una discusión absurda con Juwoon. Ya no podía pensar más, tenía que acudir a solo una persona que me ayudaba en estos momentos, en los que necesitaba un consejo y palabras de apoyo, en el único chico que no gustaba de mí ni tenía otras intenciones conmigo, aquel que se ganó mi cariño y confianza absoluta de alguna manera.

Tenía que ir a ver a Jimin.

¡Gracias por leer!
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