Miro el reloj y me pongo nervioso, ni una llamada me dejaron hacer en esta celda ¿Qué estás planeando, Crista? Si esto sigue así, no llegaré a ir a buscar a Katty al colegio y tampoco podré llamar a mi hermana para que lo haga.

¡Maldición!

La hora pasa y me preocupo.

Ya es el momento de que Katty salga, sé que el colegio la resguarda, pero pensar que se queda esperando, me parte el corazón.

Otra hora pasa ¡Maldita sea!

—¡Alguien, por favor! —llamo por... ya he perdido la cuenta de cuantas veces llame al guardia.

—Tranquilízate —al fin.

—Libéreme —exijo.

—Claro, claro —responde el hombre y lo hace.

Todo me parece raro, pero lo que me importa ahora es buscar a Katty. Corro hasta el colegio y me sorprendo con lo que dice la maestra.

—Su madre la ha venido a buscar, no se preocupe.

Esto tiene que ser una broma.