Christian

Anastasia desde las primeras palabras de Kate niega con la cabeza, esa es mi esposa, ella no se ha acostado con nadie más, me emociono, entonces es verdad no me ha sido infiel, ella ebria siempre dice la verdad y se desinhibe completamente.

-no, nunca se me ha pasado por la cabeza, ni me ha dado curiosidad el sexo con otro hombre, yo lo ame desde el primer momento que lo vi, y lo amare hasta el día que me muera, a Christian, a su pene y no sabes lo que es capaz de hacerme sentir su lengua- suelta una carcajada, durante estos casi 15 años juntos se ha venido soltando, pero nunca había sido tan descarada, pero me encanta

- Hasta anoche donde yo sola me di un gran placer, nunca me imagino que nadie sobre la faz de la tierra me pueda dar más placer que Christian, ustedes no saben los que es ese hombre, en la cama, en el piano, en la tina, en la cocina, en la ducha en todas partes y con todo lo que tiene, – se ríen aplauden y chifan, me siento avergonzado pero el rey – Elliot me suelta, me mira y me aplaude, ellas giran y nosotros salimos del pasillo pasando el lumbral de la puerta.

-uy cuñadita por razón, se han reproducido como conejos – la cara de Ana se pone roja.

- y ustedes que hacen aquí, esta es una fiesta de mujeres y no están invitados – dice Mia, Ana y yo nos miramos, ella tiene vergüenza, pero se muerde el labio inferior, yo también la deseo.

-sí, váyanse – dice Kate, a su marido, haciendo la muestra con el brazo

-es que estábamos teniendo una fiesta de hombre, pero estaba muy aburrida sin chicas, es que vinimos por ellas o quieren que vayamos por otras – dice Eliot riendo, girando hacia la puerta.

-no se les ocurra, no van a ninguna parte, definitivamente no pueden hacer nada sin nosotras.

- sírvanse - dice Ana mostrándome la cocina y el sofá - y siéntense, si quieren estar aquí deben jugar -dice mientras yo voy a la cocina por algunas cervezas, le doy a cada uno de los chicos.

-en que consiste el juego – pregunto, Mia se para emocionada.

-tú vas a empezar hermanito, consiste en bailar y bajar el culo hasta el piso sin caerse y mantenerse durante un minuto, si no lo logras los demás te hacemos preguntas que debes responder con la verdad o un reto que debes asumir. - niego con la cabeza.

-no quiero jugar, chicos vamos a la mesa de villar – digo mientras me levanto y les muestro el camino a la biblioteca, Ana me sigue con los ojos, quisiera saber que piensa.

-hermanito eres un cobarde, - Christian se acerca a Mia y le da beso en la frente.

-Eres muy curiosa y a mí me gusta mi intimidad, - digo mientras miro a Ana, ella esquiva la mirada un momento, luego me la mantiene, retándome, me sorprende, me logra intimidar, pero su fuerza extrañamente me atrae, me despierta un coctel de emociones.

-No hermano para eso nos hubiéramos quedado en el bar y yo cree que eres un cobarde, yo inicio

-tu no tiene nada que contar, que ya no sepamos – dice Mia y Kate asiente

-eso es lo que ustedes creen, puedo tener mis secretos interesantes.

-mejor bailemos y Cállate tus pocos secretos esposo mío.

-si bailemos con nuestras parejas, vinimos porque nos hacían falta, cierto Christian, que preguntabas que estarán haciendo las chicas. – no me gusta que Ethan lo haya dicho y que mi esposa piense que la estoy controlando, pero la idea de bailar con ella me encanta.

- me parece una excelente idea Kate – estiro la mano a Ana y ella la mira por un minuto y luego la toma empezamos a bailar y es como el resto del mundo desapareciera, sentir su piel como un satín que acaricia la mía, su olor embriagador, más allá de su perfume es el olor a manzana recién alcanzada, a familia, a amor, a mi lugar preferido en el mundo, más allá de la música siento mi corazón bailando al mismo ritmo acelerado como el suyo es mágico. La canción se acaba como la una estrella fugas que no me deja terminar de pedir mi deseo, seguimos bailando, hasta que las otras parejas nos rechiflan y somos obligados a despegar nuestros cuerpos.

-Tortolos se cabo la canción – Ana y yo nos reímos avergonzados.

Pasamos una gran velada, bailamos, con intercambio de parejas, deseaba tanto a Ana, me di cuenta lo celoso que soy realmente, cuando mi esposa viajaba con mi cuñado y mi hermano estaba muerta de risa se veía muy relajada, en cambio conmigo, estaba tan tensa había una parte sexual, pero había otra parte que no se interpretar, tengo que lograra que mi familia se relaje conmigo, tanto para divertirse como para tenerme confianza. Luego de un par de horas mis hermanos y sus parejas ya necesitaban una habitación es que voy a la oficina de seguridad donde están Taylor y a Sawyer, se levantan de sus sillas al verme entrar, - Taylor lleva a mis hermanos y sus parejas a sus casas- este asiente- Sawyer se queda aquí- vuelve a asentir- cuando los dejes en su casa y ve a dormir a la tuya, Ana y yo nos quedaremos aquí- su cara muestra algo de felicidad, pero mi cara lo desilusiona.

-señor voy a llamar para que venga otro hombre hacer refuerzo – asiento.

Cuando todos se han ido, Ana esta recostada en el sillón ida en sus pensamientos con una risita picara en su labios y luego lo muerde, voy a la cocina por par de copas, quiero convencerla de hacer las paces, ahora estoy seguro de su fidelidad, cuando regreso a la sala Ana no está. La busco por todos lados y subo las escaleras, veo la puerta abierta de la sala de juegos, me asomo y la veo sacando algunos juguetes de uno de los cajones, logro emocionarme, la noche promete muchísimo. Cuando se gira bajo corriendo quiero ver como me lo pide. Me ubico en el sillón tomo las copas y cuando la veo bajar, trae los juguetes en la funda que Ana no se toma ningún esfuerzo en ocultar.

-quieres- le ofrezco la copa de vino

-gracias- la toma y se va directo a la habitación, me quedo confundido, no me invito a jugar. Me tomo la copa, no entiendo que pasa aquí, después de unos minutos termino de tomar el contenido de mi copa, voy a la habitación a ver que pasa aquí, cuando entro la puerta del baño esta abierta y proviene ruidos del agua, el sonido de uno de los juguetes que vibra y los gemidos de Ana, me asomo quiero verla, y me encuentro uno de los mejores espectáculos Ana masturbándose gloriosamente, no sabia que fuera tan determinada con su cuerpo cuando jugaba sola, mi amigo que estaba decepcionado se vuelve a emocionar viéndola con sus talones a cada lado de la bañera una mano en sus pechos estrujando sus pezones, sus otra mano pasando en vibrador por su clítoris, luego sube hasta sus pezones la manso libre vuelve a su vagina e introduce sus dedos y los mueve, yo me acaricio mi pene sobre la ropa, pero no es suficiente, ya esto se ha vuelto doloroso, abro mi cremallera saco mi pene y comienzo a acariciarlo con fuerza me masturbo mientras veo hacer lo mismo a Ana quien llega a su orgasmo, yo incremento la velocidad y fuerza, Ana sigue estimulándose con el juguete buscando mas y pronto consigue otros orgasmos, yo siento que me voy a liberar pero no quiero que me vea espiándola, es que salgo corriendo al vestidos donde termino, me libero silenciosamente y me limpio, esto no puede ser yo voy a reconciliarme con mi esposa y enterrarme en ella, pero cuando logro salir ya esta acostada en la cama dormida. No me queda de otra que hacer lo mismo.

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Al día siguiente somos un nudo, escomo nuestros cuerpos están acostumbrado a estar entrelazados, ella esta profunda, le doy un beso y me levanto, anoche Ana no quedo tan convencida cuando le dije que deje a los niños con la niñera, así que llamo a Taylor a preguntar por mis hijos, le pido que traiga el desayudo de Ana y mío de lugar donde a ella gusta le tanto, me dice que todo está bien.

Cunado se levanta se baña y se pone un traje corto casual que la hace ver mas joven o es los múltiples órganos de anoche, me siento raro con eso siempre he querido que ella quisiera mas cosas con su sexualidad, aunque me gusta su inocencia, pero vela anoche como se daba placer me hace sentir que tal vez sienta que ya no me necesita, maldición mi inseguridad. Estoy comenzando a pensar que no conozco a Anastasia cuáles son sus anhelos, sus aspiraciones, sus fantasías, como la voy a complacer si no se qué pasa por dentro de la cabeza y las emociones de mi esposa.

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Este fin de semana he conocido una Ana que estaba oculta para mí, mis padre se fuero para el huerto de manzanos del Abuelo Theodore y pidieron permiso para llevarse a mis niños, todos se fueron encantados hasta Jason Jr. excepto Phoebe que quería salir con sus amigas a ver una película, que me pareció una locura y Teddy sigue triste porque Abbi, aun no regresa aunque hablan o se mensajean todos los días, pero bueno pero esta enamorado y lo entiendo, pero casi los obligue a ir porque quería pasar el fin de semana con su madre a solas a ver si solucionamos lo que nos esta pasando, pero estuve muy equivocado, Ana planifico todo el fin de semana. Apenas se fueron mis hijos llamo Hanna para trabajar en el lanzamiento de un nuevo libro de una escritora anónima que solo Ana conoce y el anterior libro fue todo un éxito, no lo leí, no me gustan esos libro de feministas liberadas, pero recibió muchos premios importantes, fue todo un boom editorial y está por lanzar su segundo libro, luego quedo con Mia y Kate para almorzar y broncearse en la piscina.

Hanna se fue hace unos minutos, se subió enseguida me imagino que se esta cambiando, yo tenia un montaña de trabajo a lo que me he dedicado desde que Ana se encerró en su oficina, pero ya no quiero continuar lo urgente ya lo he resuelto, me he vestido con una bermuda y un camiseta casual. Estoy en la cocina comiéndome unos pasabocas que Ana pidió para la tarde de chicas, esto es raro en otro momento lo habría hecho ella misma, pero así es mas practico y no pierde tiempo.

-señor disculpe han llegado la señoras Kate y Mia grey, - asiento

- ya voy – Taylor y Gail tienen todo el fin de semana ellos si disfrutaran en pareja, salgo a la sala.

-hola como están- le doy un beso en la mejilla a mi hermana

-bien y tú, deberías ir con los amargados de nuestros maridos, que no saben que hacer sin nosotras.

Me acerco a Kate y le doy un beso en la mejilla- si Elliot quería que me quedara con el en cama en casa y yo le dije que abrazar a la almohada porque venia a brocearme y con mi hermoso color me iría esta noche a bailar con mis cuñadas y hermanas. – sueltan una risotada, ósea se Ana se va ha bailar, no voy a tener tiempo con ella, en ese momento la veo bajar con su pareo y gafas de sol.

-chicas lista- dice emocionada,

-sisiii – gritan unísono y Katty saca un par de botellas de alcohol, y mía saca una bolsa de regalo

-lo prometido es deuda, - Ana se ríe nerviosa y saca una caja de la bolsa y veo que es un acompañante íntimo, he visto en la pagina de juguetes para adulto, que es lo último para estimulación femenina, creo que me han desplazado por un objeto, antes ellos era compañía para los dos, pero ahora ella no me necesita, no puede ser.

-vayamos a la piscina he dejado hay algunas cosas para picar y aremos hay los cocteles, Christian – me saca de mi pensamiento en el juguete sexual y creo que me invitaran- puedes por favor traerme el hielo que deje preparado en la cocina- solo asiento estoy sorprendido con esta Ana.

Ella se va, yo voy por el hielo, al salir me topo con Ray que viene acompañado de Eitha y Elliot.

-Eitha y yo venimos porque pensamos que seria un fin de semana sin niños, con sexo, pero no es un fin de semana de amigas y de mujeres.

-la verdad venimos a perseguirlas porque no sabemos qué hacer si ellas - Elliot y hasta yo asentimos

-trae la botella de wisky y vamos a fuera para tomarnos unos tragos, - mi hermano va a mi oficina.

Estamos como dos adolescentes nosotros en la mesa con los bocadillos y un trago, las chicas en las tumbonas tomando el sol, boca abajo con unos bikinis miniatura, incluso se han quitado la parte de arriba, no estoy nada contento, aunque sea mi hermano y mi cuñado quien la ve, me dan celos, pero me los tengo que tragar, así pasa la tarde luego pedimos comida para almorzar, se tomaron varios mojitos y margaritas. Durante la comida el tema fue el regalo de Mia a Ana, le mostro como vibra, se mueve en diferentes direcciones, es térmico, succiona y lame. Me poco rojo de la ira.

-hermanito, eso tan pequeño hace todo eso al mismo tiempo, alguien no lo van a extrañar.

-Cállate Elliot que varias veces me he quedado con el y tu durmiendo en la sala – dice Kate, Elliot se le borra la sonrisa, pero ni así me rio.

-bueno chicas ahora arreglémonos para esta noche- dice Mia, Ana me mira, pero cuando nuestras miradas se encuentran, se da cuenta que no estoy muy contento, pero se levanta.

-si chicas pueden arreglase en las habitaciones de huésped ya sabe la de cada una- asienten y se van

-yo no sé ustedes, pero yo no me voy a quedar aquí sentado como un viejo amargado, me voy a cuidar y divertirme con mi esposa- Eitha se levanta – yo traje mi cambio de ropa – todo nos vamos a cambiar.

Esa noche nos divertimos como hacia mucho tiempo no lo hacía, las chicas desde que llegaron se fueron sola a la pista a bailar, no estaban muy contesta que hallamos ido al mismo lugar, pero no tuvieron otra opción, pero cuando vi como unos chicos jóvenes como de 20 años se les insinuaron, ellas le sonreían, fuimos a marcar territorio, luego Ana se encontró con un colega en la barra donde se pasaron un taro hablando y riendo, a mi me llevaban los demonios pero no quería ponerla en ridículo no me lo perdonaría, cuando estuve a punto de irla a buscar se despidieron con un beso. Al día siguiente quedaron las tres para ir a desayunar, luego de compras, almorzar e ir al cine las tres, yo trabaje un rato y luego quede con los chicos para ir a pescar. Cuando los niños llegaron ya los dos estábamos en casa, parece que se la pasaron muy bien, porque llegaron muy cansados, aunque Phoebe y Teddy parecen que están disgustados, aunque dijeron que estaban bien cuando les pregunte.

Luego que mis hijos llegaron me fui a mi oficina a enviar unos correos, para organizar algunas cosas de la semana, cuando subo escucho la voz de Phoebe y de Teddy que discuten y su Madre es la mediadora. Voy a entrar para saber que pasa, pero escucho -pero Teddy si tu tienes novia, yo también tengo derecho- mi princesa, mi niña tiene novio no puede ser, me quedo petrificado.

-No, yo soy mayor y son...-

-eres un hombre, eres igual de machista como mi papa, mama por favor dile algo- Ana lo sabe...

-Estoy esperando que se calmen, ahora puedo hablar, -hay un silencio- los dos tienen el mismo derecho de enamorarse, Phoebe debes hablar con tu padre, dile que quieres tener tu propia habitación como una jovencita que necesita privacidad, y tu Teddy te estas comportando con tu hermana como dices que tu padre se comporta contigo – mi hijo se queja de mi, por Dios- te suena eso que no me escucha, de una vez me juzga, me regaña sin intentar entenderme.

-si eso digo, pero Mama yo solo la quiero cuidar- ese es mi hijo – ese niño es...

-es el chico que le gusta a tu hermana y cuidar no es prohibir, es acompañar, aconsejar, es ser cómplices, y enseñarle a que ella se cuide con los dos he hablado de los cuidados que se debe tener con el sexo, las hormonas están presentes y sienten ese enamoramiento, se deben cuidar – por dios Anastasia ha hablado con mis hijos de tener relaciones sexuales si son mis niño y mi bebita – ahora que yo sepa tu Phoebe me dijiste que te gustaba este chico y que al parecer tú le gustabas, pero que no eran novios.

-no mama,  solo hablamos y me manda mensajes muy bonitos, nos íbamos a ver en el cine, pero como nos mandaron con los abuelos- se queja Phoebe.

-pero eso no me lo habías dicho, me dijiste que ibas con tu amigas de siempre, sin Ava porque esta donde los abuelos, eso no me gusta, le he dado toda la confianza, incluso se lo he ocultado a su padre lo que me cuentan, - me duele que me ocultes esto Anastasia- esperando que ustedes mismos le digan. tu Teddy que has tenido erecciones cuando estas con Abbi, y que han hablado de sexo, porque a ella también le pasa, sé que por mas que digan que no lo van a hacer, en cualquier momento no aguantaran más- mi hijo puede echar a dañar su vida y la de esa chica, teniendo sexo- por eso solo les he explicado como se deben cuidar, pero espero que esperen a estar preparados, pero se que no sirve de nada prohibírselo solo ganarme su desconfianza.

-Gracias mami, por ser tan abierta con nosotros, quisiera que papa fuera igual- no sé qué hacer.

-y tu Phoebe que tiene un chico que te gusta, que te ha dicho que también le gustas y quieres tratarlo más a ver que pasa, que ya no eres una niña y quieres una habitación sola, decorarla a tu gusto y demás cosas que me dices y me prohíbes que le diga a el como el tocar el piano, habla con el...

-no mama el no se a dado cuenta que ya crecí, pronto me bajara la menstruación como a mis compañeras, a mi prima y no quiero estar compartiendo el baño con mis hermanitas, mi papa no me entiende y me da pena hablar de eso con él, porque no es como tu- soy un ogro con mis hijos.

-Les digo se que su papa a veces sube el tono de voz, pero es porque el no sabe como lidiar con algunas cosas, pero por sobre todo los ama, son su vida y si ustedes hablan con el los entenderá.

-no lo creo mama. - hijos yo soy tu padre y los amo 

-me parece injusto que digas eso Teddy, mira tienes un gato y a su familia, tienes guitarra y clases.

-si mama, pero esto es diferente, aunque ustedes son muy activos, el no deja que hablemos de sexo.

-porque para él es difícil, pero inténtenlo, y no quiero que pelen mas por revelar los secretos del otro, son hermanos, se deben apoyar, cuidar y tenerse confianza.

-si mama, pero el que quiere decirlo todo es Teddy.

-tranquila no voy a decir nada y voy a pensar contarle a mi papa lo que me pasa.

-yo también mama, pero tú nos ayudaras verdad.

-si mis niños, pero su papa los adora, ahora a dormir que es tarde- me voy antes que me vean.

Definitivamente no se muchas cosas de mi esposa y mis hijos, me he dado cuenta que no salimos a divertirnos y que ella desea, ir al cine, bailar, hacer planes de chicas y de parejas,  solo es el trabajo, los niños y los eventos obligatorios de su parte pero sobre todo míos, con los niños tampoco compartimos mucho, y ahora me doy cuenta la poca confianza que me tienen, me creen un ogro, me da rabia que Ana me oculte cosas tan delicadas como que mis hijo tiene erecciones con su novia y ella también se excita, mi hija tiene un casi novio y está a punto de que le llegue su periodo y cualquier imbécil la embarace eso no se lo voy a permitir a ningún hijo de puta, nadie toca a mi niña linda, Ana me va ha escuchar, me doy un baño y me pongo mi pantalón de pijama. Cuando ella entra se cambia con una nueva pijama de encajes y seda que deja mucho a la fantasía, se acuesta en su lado de la cama como la noche anterior.

-Ana podemos...- pero me detiene

-la Pijama es linda, me la puse para mí, y estoy muy cansada, hablamos mañana- cierra sus ojos, me la quedo viendo y no entiendo nada, bajo a tomar agua y divago hasta entrar a la oficina de Ana.

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gracias y mañana es el ultimo capitulo de la maratón no se lo pierdan