34

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Aún no sabían cómo era que habían terminado en la cama abrazados luego de haber hecho el amor, Jimin estaba recostado en el pecho del alfa mientras sentía las suaves caricias que el pálido le daba. Sus corazones estaban sincronizados y lo estuvieron aún más cuando ambos cuerpos se volvieron a unir una vez más, ninguno dijo nada de lo sucedido y con ello estaban agradecidos.

—Debo irme. —habló Jimin luego de un largo silencio.

—Está bien. —susurro. —cuídate.

—Nos ponemos ver en la cafetería Magic shop a los ocho. —se puso su camisa. —y podemos hablar del pasado y sobre nosotros.

—¿Aún quieres intentar algo? —pregunto.

—Sí. —le dio un corto beso en la frente. —mi interior me lo pide y yo igual.

Yoongi solo vio como el omega tomaba sus cosas y se iba del lugar, Yoongi se quedó acostado en la cama pensando en lo ocurrido y no pudo evitar sonreír ante lo que había pasado ¿Sería posible que tuviera al fin una vida plena con el omega? Él no quería pensar en el pasado en el cual lo había perdido de una manera horrible y todo por su culpa, pero ahora el omega estaba dispuesto a darle una oportunidad más.

Yoongi se arregló de manera nerviosa sintiendo los mismos sentimientos que tuvo al ver por primera vez al omega, él se miró al espejo y se dio cuenta de que su tono de piel ya estaba normal y cuando peino su cabello este ya no se caía. Cuando estuvo listo salió del lugar y compró unas flores para el omega, cuando llegó encontró al omega sentado viendo el menú.

—Hola. —le dijo y Jimin levantó el rostro y sonrió.

—Hola, Yoongi. —hablo. —anda siéntate a penas y voy a pedir.

—Claro. —se sentó. —te traje unas flores espero te gusten.

—Gracias. —las tomó y sonrió. —manzanillas están preciosas.

—Me recordaron un poco a ti y a tu aroma. —hablo nervioso.

—Que lindo. —las puso en la mesa. 

Yoongi no dijo nada solo sonrió y luego de ordenar comieron tranquilos, luego de un rato ambos caminaron por el parque mientras hablaban de algunas cosas que creían importante.

—Yoongi. —le dijo. —¿Qué pasó con nuestro hijo?

—Él. —desvío la mirada. —no fui un buen padre para él, no quería criarlo, ya que al verle los ojos este tenía los tuyos y me era difícil verlo por lo cual lo abandoné.

—Ya veo. —hablo.

—Hyuna se encargó de cuidarlo como su hijo. —mencionó. —de hecho una vez te lo encontraste.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro