—Quiero conocerlo. —tomo del brazo al alfa.

—No lo sé Jimin no quiero que te lastime. —hablo.

—Entiendo. —asintió. —supongo que es mejor olvidarlo.

—Intentaré hablar con él. —dijo rápidamente. —aunque sea que lo veas de lejos.

Jimin sonrió y siguió caminando junto con el alfa, los dioses seguían a la pareja de manera discreta para no llamar la atención, se sentía felices que el aura del dios Hades cada vez se iba restableciendo y sanando.

—La mejor medicina que puede haber. —habló una diosa.

—Yoongi ya se ve mucho mejor e incluso muy saludable. —mencionó otro dios.

—Solo esperemos que todo sea permanente y que Yoongi pueda ser feliz. —dijo otra diosa. —porque si Yoongi vuelve a recaer está vez será mucho más rápida y dolorosa.

Los dioses asintieron y solo veían como el omega se reía juntó con el dios, los cuales iban tomados de la mano mientras disfrutaban de la hermosa noche. Los dioses pensaron en volverles el ambiente un poco más romántico por lo cual dejaron caer pétalos de cerezos y una hermosa melodía para la pareja destinada.

Yoongi ayudó a Jimin a subir a un pequeño bote para dar un paseo, ambos hablaban y sonreían al ver la hermosa luna que los alumbraba, Jimin la miraba de manera curiosa.

—¿En qué piensas? —preguntó Yoongi mientras lo abrazaba.

—En que podemos ser un matrimonio, una familia juntos. —respondió Jimin. —podemos cumplir lo que nos prometimos.

—Hay que ir despacio. —habló el alfa. —hay muchas cosas que debemos hacer y quiero que disfrutes.

—Lo haré si en esas cosas te incluye. —lo vio por un momento Jimin. —solo quiero estar contigo Yoongi.

El alfa le sonrió y le dio un corto beso en los labios, luego del paseo el alfa llevó al omega a su casa y se despidieron con un corto beso en los labios, él se quedó un rato viendo a la casa del omega y luego se fue de ahí. Se sentía feliz de volver a estar con el omega, de poder abrazarlo, besarlo, hacerle el amor y poder decir que lo amaba mucho, cuando llegó a su hogar vio a todos los dioses los cuales se levantaron para verlo.

—Si me van a seguir traten de ser disimulados. —les dijo.

—Nos alegra mucho que estés bien hermano. —dijo un dios.

—No quiero hablar de eso. —se alejó de ellos.

—¿Pasó algo malo? —se acercó una diosa preocupada.

—La última vez que hable de lo que me hacía feliz saben cómo terminó todo. —los vio a cada uno. —cuando se vayan cierren bien todo.