Los estudiantes miraban a la pareja entrar, después de una larga semana sin verlos ahí estaban, Jimin ayudaba al alfa a dirigirse a su salón de clases, pues aún le costaba caminar. Cuando llegó Jimin se iba a ir, pero el alfa lo detuvo, el omega lo vio y Yoongi le dio un profundo beso frente a los estudiantes.

—Te veo luego pollito. —dijo Yoongi al alejarse del omega.

—Si alfa. —hablo Jimin. —no olvide las muletas.

—Lo sé. —hizo una mueca. —ve con cuidado.

Jimin asintió y salió del salón del alfa para dirigirse al suyo, cuando entró al suyo vio que muchos lo miraban, él se dirigió a su asintió y luego vio cómo un grupo de omegas se acercaban. El omega suspiró y los vio sin miedo alguno, los omegas sonrieron y le pusieron unas cosas en su mesa él las vio y se dio cuenta de que eran unas bolsas de regalo.

—¿Planean dármelas y luego decir que se las robe? —les preguntó. —no les creo nada.

—Son cosas para que te vuelvas atractivo a tu alfa. —dijo una omega de coneja.

—Mi alfa ya me considera atractivo. —se levantó. —no quiero ninguna de sus asquerosas cosas.

—Tratamos de ser buenos contigo y tú te pones así. —se quejó una omega de pato.

—¿Tratan? —se rio. —lo hacen porque salgo con una serpiente no porque les nazca.

Los omegas no dijeron nada, Jimin se sentó y dejó caer al suelo las bolsas que sabía que eran de marcas caras, todos se sorprendieron de ver al omega hablar de esa manera, pues normalmente se ponía sumiso y agachaba la cabeza. Las clases siguieron con normalidad y al finalizar llevaron al omega a la dirección donde estaban todos sus profesores y el director, él se sentó y los vio a cada uno.

—¿Sabes por qué te llamamos Park Jimin? —le preguntó el director.

—No. —dijo.

—Eres el mejor de la clase. —habló el profesor de matemáticas.

—¿Es una pregunta o una afirmación? —vio al profesor. —porque mis notas son desde cero hasta uno.

—Sabemos que eres el mejor de la clase. —dijo el director. —el colegio fue elegido para que el mejor estudiante participe en un concurso.

—En ese caso el mejor de la clase es otro. —se levantó. —yo no soy inteligente.

—Park. —habló el director.

—Si quieren que participe. —dijo. —quiero algo a cambio.

—¿Crees que estás en derecho a pedir algo? —lo señaló la profesora de química.

—En ese caso no puedo ayudarles. —se fue de la dirección.