Jimin miraba a Yoongi, él cuál estaba muy pensativo por lo que se acercó y lo tomó de las mejillas, el alfa miro la mirada preocupada de su pareja, la serpiente abrazo con suma delicadeza al pollito él cuál cerró sus ojos, era extraño, pero ambos estaban sintiendo una preocupación que no les gustaba para nada.

—No salgamos esta noche. —habló la serpiente. —quedémonos aquí.

—Yo siento que lo mejor es salir alfa. —lo vio. —algo me lo dice.

—Nos quedaremos toda la tarde aquí. —hablo Yoongi. —pero al anochecer saldremos.

—¿Qué será este sentimiento? —preguntó Jimin.

—No lo sé cariño. —respondió Yoongi. —pero si hay peligro de por medio no dudaré en protegerte.

—Alfa. —murmuró.

—Te protegeré con mi vida Jimin. —le dijo. —eres mi omega y haré lo que sea para que nada malo te suceda.

—No debe de hacerlo. —hablo Jimin.

—Lo haré porque te amo mi lindo pollito. —le beso una mano. —y porque no quiero darle el gusto a mi padre y a Layla.

La pareja se quedó ahí un rato, pero salieron a petición de Jimin para caminar un rato en el jardín para hablar un poco, ya casi se acercaba la fecha de su boda y parecían más emocionados los abuelos del omega que el omega mismo. Sabía que al casarse con el alfa estaría en peligro por lo de su herencia y mucho más si quedaba en estado, Yoongi miraba a Jimin él cuál no decía nada.

—No pienses por el momento en la boda. —hablo. —solo hay que concentrarnos en estar juntos y que nada malo suceda.

—Siento que algo malo sucederá en la boda. —dijo Jimin. —y que puede que alguno de nosotros salga herido.

—Lo evitaremos. —lo tomó de las mejillas. —es una promesa.

—Mis abuelos me preguntaron si ya sabe dónde será la luna de miel. —se rio un poco.

—Tengo muchos lugares planeados. —le dio un corto beso en el cuello. —pero me gustaría que tú eligieras el sitio.

Jimin río por las cosquillas que estaba recibiendo, por otro lado, una persona los miraba, su misión era averiguar qué sitio irían luego de la boda para exterminar al omega y luego al alfa. Yoongi seguía dándole cortos besos al omega él cuál solo sonreía por lo que estaba sucediendo, al fin tenían un momento de paz ellos dos y podían disfrutar de pasar un tranquilo momento de pareja.

—Me gustaría conocer su isla alfa. —dijo Jimin. —prometió llevarme un día de estos ahí.

—Entonces será ahí nuestra luna de miel. —le dio un corto beso en los labios.