- Había pasado una semana desde que SungHoon y Ni-Ki se habían conocido, Park cumplió su palabra de ayudar al menor con su celo y al tercer día que este término ambos acordaron la primera cita iniciando así el cortejo.

En aquella cita hablaron de las cosas más importantes que debían saber, que comida les gustaba más, colores favoritos, vestimenta preferida y su dulce favorito.

Solo eso tenía que saber por cualquier ocasión en la que les llegaran a preguntar algunas cosas, ya habría más tiempo para conocerse más.

Ambos tenían los mismos gustos en algunas cosas, Nishimura se sentía más emocionado por compartir gustos con su persona destinada, pero Park simplemente mantenía su comportamiento frío.

El alfa había hecho un contrato en dónde especificaba el cómo iban a estar viviendo una vez que se casarán y el cómo debía actuar Ni-Ki enfrente de las cámaras cuando estén juntos.

Park ya había resuelto varias cosas, todo estaba listo para anunciar el matrimonio de ambos.

El Omega había investigado más de su futuro esposo y en esa semana logro sentir algo de afecto por el mayor, eso sin contar que su lobo lo hacía sentir más cariño hacia el alfa.

Después de todo ambos estaban destinados así que iban a terminar juntos por las buenas o por las malas, aunque está vez había sido por las malas.

Solo había una cosa que ambos aún no se habían dicho y era en que trabajaban.

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— ¿Ya vas a llegar? — pregunto Park a HeeSeung por llamada.

— Si, solo que hay mucho tráfico y el modelo salió un poco tarde de su trabajo, pero ya vamos en camino — dijo el peliazul.

— Está bien, lleguen lo más rápido posible porque después tengo junta con el ingeniero en sistemas recuerda que tenemos nuevas computadoras que necesitan ser preparadas.

— Si lo sé Park, nos vemos después.

— Oye espera.

— ¿Qué pasa?

— Contrata a un nuevo ilustrador de videojuegos, el que había hecho los personajes renunció y ahora no tenemos quien los dibuje para el videojuego que se lanzará en dos años — dijo SungHoon.

— Dile a SuNoo que se encargue de eso, él no hace casi nada — dijo el mayor enojado.

— Si, si ya... no me hagas tu berrinche, solo trae al modelo y de lo demás me encargo yo.

— Bueno entonces adiós — el alfa mayor colgó antes de que el jefe pudiera decir algo más.

SungHoon se puso a trabajar en el nuevo videojuego diseñando una guía para ganar aquel juego, imaginando en cómo reaccionaría el público y lo que les gustaría ver.

Después de unos minutos la puerta fue tocada, Park dejo las cosas que estaba haciendo y se levantó de la silla arremangando las mangas de su camisa.

— Pasa — dijo el cenizo sentándose en la silla alrededor de la pequeña mesa de cristal que tenía en su oficina.

HeeSeung entro junto al modelo haciendo reverencia.

— Ya está aquí SungHoon... Él es Nishimura Riki — dijo el alfa quien se retiraba del lugar para que ambos hablarán.

¿Había oído bien?, ¿Ni-Ki?, Levantó su vista hacia la puerta acertando, era su Omega.

— Buenos días señor Park... — dijo el menor haciendo reverencia fingiendo no conocerlo, aunque ya era tarde, SungHoon había sentido sus nervios.

— Buenos días... Siéntate — Park se sentó frente al castaño y miro al menor quien también tomaba asiento.

Había algo raro, sentía a Riki un poco extraño, pero no podía saber bien lo que era, no tomo mucha importancia y saco sus hojas.

— Como ya te habrán dicho, necesitamos un modelo que ahora sea muy popular para las personas en este caso tú... — dijo SungHoon mirándolo fijamente.

Nishimura asintió y evadió la mirada del mayor.

— Queremos que seas la figura del nuevo videojuego, si lo anuncias y lo recomiendas será un éxito más de lo que se planea.

— Me parece bien señor Park, ¿El videojuego ya está listo para su venta? — pregunto el Omega.

— Si, ya todo está listo, solo necesitamos a alguien que lo anuncie.

— Está bien, solo dígame cuando empiezo y lo haré — Ni-Ki se quedó un momento en silencio, se sentía mareado y con ganas de vomitar.

SungHoon estaba hablando de nuevo pero el menor se sentía demasiado mal.

— Lo siento, solo un momento — el castaño se levantó rápido de su silla y corrió fuera de la oficina buscando un baño.

Esto se le hizo raro a Park, su instinto ya predecía lo que estaba pasando, pero aún no estaba seguro, fue detrás del Omega y se quedó afuera del baño escuchando como este vomitaba.

Mierda lo que faltaba, pensó SungHoon.

Entro al baño asustando al menor quien se estaba enjuagando la boca.

— ¿Por qué mierda no te tomaste la pastilla? — regaño SungHoon.

Ni-Ki bajo las orejas y retrocedió.

— Y-yo si me la tomé, pero... Creo que tarde un poco — respondió casi llorando, estaba asustado y no por él si no por su bebé.

— Me tienes harto Ni-Ki, me tienes estresado con todo esto de la marca y ahora un bebé... Solo me arruinaste la vida.

El menor no aguanto más y empezó a llorar mostrando lo débil que realmente era.

— No eres el único — dijo entre lágrimas.

— Eres un dolor de cabeza... — Park suspiro y gruño por lo enojado que estaba — Tendremos que adelantar la boda para que ninguno de los dos salga señalado por las personas.

El castaño asintió y limpio sus lágrimas, ambos estaban en su propio mundo que no notaron la presencia de un tercero.

─ ¿SungHoon, qué le estás haciendo al pobre? ─ Dijo el padre de Park

Riki se asustó y camino directo hasta el alfa abrazándolo en busca de consuelo, SungHoon no se negó y lo abrazo, debían fingir ser una pareja perfecta y al parecer la actuación había comenzado.

— No le hice nada papá... Él... Es mi prometido — dijo el cenizo sorprendiendo a su padre.

— ¿Ya tienes un Omega y no me habías dicho?

Al parecer el padre del alfa no había escuchado nada de lo que estaban peleando, eso los tranquilizó un poco.

— Es que la última vez que te presente a mi pareja que también era modelo no lo aceptaste — dijo el alfa menor haciendo referencia a YunHo.

— Pero eso era otra cosa diferente, a parte él me caía mal — dijo el alfa mayor acercándose a Ni-Ki — Tu eres un Omega muy lindo — hizo una pausa y se quedó viendo las orejitas del menor sonriendo ante lo tierno que se veía — Eres perfecto para mi hijo, ven aquí — lo tomo de la mano y lo jalo hacia él dándole un fuerte abrazo — Bienvenido a la familia pequeño... Ah... ¿Cómo he llamas?

El Omega tenía que agradecer al padre de SungHoon por desviar el tema y no preguntar por qué peleaban.

Sonrió un poco y limpio sus lágrimas — Riki, Nishimura Riki.

SungHoon simplemente se quedó en silencio al ver a su padre así, ¿Por qué a un Omega que odiaba lo trataba mejor que al Omega que antes (y aún) amaba?

— Ven conmigo hay muchas cosas que tenemos que hablar como futuros familiares — dijo el padre de SungHoon caminando junto a Nishimura mientras le preguntaba algunas cosas simples como el ¿Cómo se conocieron?

Cosa que ambos ya habían planeado para cuando ese momento llegará, aunque no pensaban que tan pronto.

Las cosas al parecer "iban bien" aunque el castaño sabía perfectamente que a pesar de que se enamore del alfa este le seguirá odiando.

No temía por su vida simplemente no quería imaginar cómo trataría SungHoon al pequeño hijo que ambos iban a tener, el bebé no tenía culpa de nada así que esperaba que el mayor lo aceptará.

Desde ese momento el Omega empezó a preocuparse por su bebé cuando en realidad debía preocuparse más por su vida...