❛ 𝓒𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝓕𝐎𝐔𝐑𝐓𝐄𝐄𝐍 ❜
𝗙𝗨𝗖𝗞! 𝗪𝗛𝗔𝗧'𝗦 𝗧𝗛𝗘 𝗦𝗟𝗔𝗦𝗛𝗘𝗥?! 🎃🪓
𝐏𝐑𝐄𝐒𝐄𝐍𝐓𝐒...
༉‧₊˚. ♯ 𝗛𝗔𝗟𝗟𝗢𝗪𝗘𝗘𝗡 𝗣𝗔𝗥𝗧𝗬! 𝗣𝗮𝗿𝘁 𝗼𝗻𝗲

¡Solo ten confianza, mírate bien,
eres todo un galán, macho alfa! 🔪

                         𝐂𝐎𝐌𝐎 𝐋𝐀 𝐅𝐈𝐄𝐒𝐓𝐀 𝐃𝐄 𝐇𝐀𝐋𝐋𝐎𝐖𝐄𝐄𝐍 𝐒𝐄 𝐇𝐀𝐁𝐈́𝐀 𝐀𝐑𝐑𝐔𝐈𝐍𝐀𝐃𝐎 𝐀𝐋 𝐃𝐄𝐒𝐂𝐔𝐁𝐑𝐈𝐑 𝐋𝐎 𝐐𝐔𝐄 𝐍𝐎𝐒 𝐇𝐀𝐁𝐈́𝐀 𝐏𝐀𝐒𝐀𝐃𝐎 𝐀 𝐄𝐓𝐇𝐀𝐍 𝐘 𝐀 𝐌𝐈́, Mindy y los demás quisieron preparar una a mi regreso de la misma temática de la noche de los muertos vivientes, no sé si era para despedirnos de la normalidad y regresar a la pesadilla después de una noche llena de luces y música o simplemente para olvidar el mal rato. Aunque si algo conocía de Mindy es que era una lunática de las películas de slasher.

Seguramente la fiesta no solo estaba hecha para celebrar mi regreso a la vida o como queráis llamarlo, sino, porque a ella le gustaba tener todo bajo control cuando pasaba un caso de estos, le gustaba sacar conclusiones y someternos a miradas inquisitivas bajo las luces de neón y ver comportamientos o rasgos que le haga sospechar realmente de que alguno de nosotros era el verdadero asesino. También estaba la parte en la que ella misma fuera la asesina y quisiera buscarnos puntos débiles y como no, el mejor sitio sería en una fiesta donde casi todos perdemos el rumbo de las cosas.

Pero eso ya lo sabía y no había venido a disfrutar tampoco, fue solo para no hacerles el feo de abandonarlos cuando se habían tomado tantas molestias y aunque no bebía como dije anteriormente y también me daba vergüenza bailar acompañada, esperaba disfrutar un poco después de todo y más sabiendo lo que nos venía por delante porque estaba segura de que los asesinos vendrían a acabar lo que no pudieron terminar. Y si Mindy venía a estudiarnos, que lo haga. Ethan y yo estábamos allí en el momento del crimen, ambos habíamos sido víctimas de Ghostface y eso nos convertía en inocentes y ahora, en supervivientes.

Aunque yo era una de esas supervivientes que podían confundirse con un muerto viviente con tantas heridas, por suerte no necesitaba disfraz para parecer un zombie.

También estaba el caso de que yo fuera una gran malpensada y pensara muy mal sobre las intenciones de Mindy pero viendo lo desconfiada e imaginativa que era ella no me sorprendería en absoluto que pensara que Ethan y yo éramos los verdaderos asesinos y hayamos puesto de coartada una base estratégica muy usada de "yo sangré, yo me libro" que consistía en hacerse la víctima en un delito mayor donde los verdaderos asesinos se autolesionan para pasar desapercibidos y así no sospechen de ellos. Claro que vosotros sabéis qué fue lo que realmente ocurrió. Y ni Ethan ni yo nos hicimos daño.

Aunque pensándolo mejor, no creo que Mindy llegara tan lejos. Aun así, sabía que no podía fiarme del todo de ellos y por eso, me sentía mal.

𝐋𝐀 𝐒𝐀𝐋𝐀 𝐄𝐒𝐓𝐀𝐁𝐀 𝐋𝐋𝐄𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐋𝐔𝐂𝐄𝐒 𝐃𝐄 𝐍𝐄𝐎́𝐍. Había música por todas partes como cabría de imaginar en una fiesta pero no pensé que llegaría a ser de tal magnitud. Al principio me sentí muy desorientada con tanto brillo y personas disfrazadas. Yo no me había disfrazado porque no hacía falta y si alguien me preguntaba tenía claro la respuesta: momia, muerte viviente, zombie. Así que llevé un traje negro y unas botas altas del mismo color que contrastaban con mi piel lechosa y los vendajes de tono marfil.

—¡Hey! —me saludó Anika, la novia de Mindy. Iba toda de rosa con tonalidades de neón y purpurina en la cara—. ¿Cómo te encuentras?

—Bueno, un poco en la shit pero bien. Recién salida del cementerio.

Había estado dos semanas recuperándome pero cuando salí del hospital y empecé a caminar casi se podía decir que llevaba bajo tumba unas cuantas centurias.

Anika se rió.

—¿Esto no te molesta? —pausó mientras buscaba a alguien disimuladamente con la mirada—. O sea, venir a una fiesta después de que por poco te mataran brutalmente.

Un poco bastante y más teniendo en cuenta que alguno de ellos era el asesino pero rechazar la invitación hubiera sido un golpe muy bajo y ellos sospecharían de mis propias sospechas. Lo bueno sería ir a la fiesta y andarte con los ojos bien abiertos.

—Cuando una se está con amigos, se olvida de los problemas —le mentí, sonriéndole. Ella me devolvió el gesto y me abrazó.

Me puse en alerta, sospechando de que podría sacar un cuchillo y clavármelo mientras me abrazaba pero no fue así. Me dio un beso en la mejilla y se despidió de mí al encontrar a Mindy.

—Disfruta de la fiesta, ¿vale? No te recordare más eso. ¡Solo olvídalo! —exclamó alzando una copa de vino con gesto amistoso para luego abrazar a Mindy. Esta me miró y me saludó con la mano. Le devolví el gesto.

—¡Espero que estés disfrutando de la fiesta! —me gritó desde la lejanía. Y a pesar de la fuerza con la que ejerció la frase solo me llegó un débil eco debido al gran barullo que había en la casa de Mindy. Entre las risas y la música tenía los oídos a punto de estallar pero aún así, asistí, haciéndole un gesto de agradecimiento.

No sé si Mindy estaba actuando o no pero se le veía sinceridad en su mirada. Puede que después de aquellos acontecimientos me haya convertido en una loca paranoica.

Caminé un poco en dirección al salón para ver si estaba el resto del grupito y me encontré con Chad y Ethan. El primero no tenía camisa y llevaba los abdominales al aire y un sombrero vaquero al más puro estilo western.

Parecía un stripper.

Ethan estaba a su lado con una especie de.... ¿yelmo en la cabeza? La verdad es que no sabía qué llevaba puesto pero parecía un niño pequeño.

Me encanta.

Me puse en modo stalker y avancé unos pasos hacia la parte trasera del salón, al lado de una pareja —que estaban dándose asquerosamente el lote— porque vi las intenciones de Chad con él porque observó a un grupo de chicas bailando delante de ellos, me quedé observando en la esquina más cercana así que no me veían pero yo sí a ellos desde atrás.

—¡Salud, bro! ¡Por el dúo dinámico de la torre auténtica, tercer piso del dormitorio 315! ¡Olé! —exclamó mientras hacía un brindis con Ethan en los pequeños vasos para los chupitos. Ethan se rió con él y le chocó el vaso. Me preparé para la diversión al saber que venía a continuación.

Cuando Ethan hizo amago de beberse todo el alcohol se le borró la risa y de forma disimulada escupió de nuevo todo el contenido al vaso, medio atragantado. Chad no se dio cuenta porque echó la cabeza hacia atrás para bebérselo todo de golpe. Me reí muchísimo con las muecas que hacía Landry cada vez que Chad le proponía un brindis y no lo rechazaba por pena para luego convertirse en una llama que escupía todo el vino que le daban.

Me fijé en que Chad, después de este momento inolvidable observaba de nuevo al grupo de chicas bailando. Chad era un chico bastante atractivo, guay, gracioso y confiado. Él veía a Ethan como un chico que le costaba socializar porque al fin y al cabo era verdad. Así que no me costó imaginar cuál sería su plan para intentar ayudarlo.

—¡Ahora! Hay que empezar a movernos y lo que hay que hacer es presentarte a unas amiguitas. Mira —pausó, señalando al grupo de jovenes—: ¡como esas de allí!

¿Por qué no te callas, Chad? Ethan está cogido.

Yo hubiera interrumpido esa conversación pero la verdad es que me escondí porque sentía curiosidad por saber qué iba a decir Ethan. Si de verdad le gustaba yo, esta era la oportunidad para saberlo.

Ethan no contestó.

—¿Está linda esa, eh? —siguió Chad, me fijé en que había puesto su punto de mira en una chica que recreaba a Harry Potter, llevaba la cicatriz de Harry en la frente junto con unas gafas finas, vestía con una blusa blanca y pantalones de cuadros. Era bastante linda. El estómago se me encogió por los nervios y en parte, me sentía mal por no confiar en Landry.

Pero en realidad, ¿cómo podía tener miedo de que me sea infiel si ni siquiera éramos novios? ¡Ni nos habíamos besado!

Quizá mi miedo era que eligiera a otra persona y se olvidara de mí.

—Es que... —Empezó a decir él.

—¡Al ataque, al ataque! —exclamó Chad, instándolo.

—Es que... no, no no creo que sea buena idea... —balbuceó Ethan, sonriendo por los nervios.

—¡Woof, woof! ¡Vamoooos! —prosiguió el vaquero Woody de Toy Story pero versión cachas dándole palmaditas en el pecho de hojalata a Landry.

—¡Jaja, cállate! —exclamó Ethan, intentando zafarse de sus manos porque le empezaban a hacer cosquillas por los hombros.

—¡Solo ten confianza, mírate bien, eres todo un galán!

En eso llevaba mucha razón.

—¿¡Qué!?

—¡Cualquier mujer te comería enterito!

En eso llevaba demasiada razón...

—¿De verdad? —preguntó Ethan. Lo peor es que no se lo creía.

—¡Claro que sí, macho alfa! —Chad le dio un codazo y pasó a la acción, captando la atención de la chica—. ¡Hey, hola! Mi amigo Ethan está galán, ¿verdad?

La chica les sonrió pero dejó ver su opinión al respecto. No estaba interesada en Ethan y les dio la espalda de nuevo. Bailando con sus amigas.

—¿Eso qué significa? —preguntó Ethan.

Eso significa que tenía las gafas empañadas.

Ella se lo pierde.

—Bah, no hagas caso —dijo Chad echándole el hombro encima.

—¿Uhm? —Aunque estaba claro que Ethan no estaba interesando en ligar. Nunca lo estaba.

—Que no estuvo mal pero puede mejorar —le tranquilizó Chad pero de repente vino Anika porque su hermana Mindy lo necesitaba.

Aproveché el momento para incorporarme.

—¡Hola, chicos! —Aproveché también que Anika se había ido con Mindy para mentirles. Era mi truco para que no pensaran que era una cotilla—. Perdón por llegar tan tarde, me había perdido por ahí.

—¡No te preocupes, zombieviviente! —exclamó Chad dándome un golpe amistoso en el hombro—. ¿Cómo te encuentras?

¿Zombieviviente?

Chad era un genio para inventar nombres extremadamente cursis.

💋🔪¡NO OLVIDES VOTAR Y COMENTAR SI TE HA GUSTADO ESTE CAPÍTULO! ¡ME AYUDARÁS MUCHO!🔪💋

También me puedes encontrar en Instagram como @misslefayy

༉‧₊˚. ♯ ¡ "👻" EN LOS COMENTARIOS PARA APOYARNOS!