˚。⋆୨O4. fanático de lo dulce ୧⋆。˚ ⋆

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capitulo 04.









Otro aburrido día de clases en el que Hayami se encontraba viendo el reloj para que el maestro ya avisará que la hora ya había acabado, moviendo su pie de manera constante por la desesperación que sentía. Lo único emocionante de ese día era que Sun la invitó a degustar un nuevo postre que había hecho en el club de cocina, ya que Hayami era siempre la que probaba las nuevas recetas que su amiga hacía, obviamente a Hayami le encantaba hacerlo porque dónde hubiera comida allí estaría ella y vamos, es Sun, todo lo que cocina le queda de maravilla. Luego iría a su propio club a terminar unas actividades que tenía pendientes.

Con una de sus manos jugaba con uno de sus largos mechones, enrollando su dedo en este y a veces tirando suavemente, mordiendo con suavidad su labio inferior, lo tenía un poco reseco a causa de los últimos días que habían estado algo calurosos, arrancando con sus dientes los pequeños pellejitos que se desprendían, necesitaba comprar un nuevo bálsamo hidratante para evitar que se le quebrantarán más.

«profe debería abrirse un canal de ASMR, su voz da un sueñito bien pesadón» Hayami decidió recostarse en su pupitre, ahora mordiendo su lápiz como de costumbre para evitar lastimar más su labio, pudo notar que todos estaban igual de ansiosos para que la clase acabará de una buena vez.

«cada vez habla más lento, lo hace a propósito» pensó un chico que se sentaba al frente.

«¿mi maquillaje estará bien? necesito ir a revisarlo, pero este señor no se apura» pensó otra chica que se sentaba enmedio de salón.

«que la hora dure más de lo normal debe ser obra de la reunión oscura ¡Están poniendo a prueba mi resistencia a situaciones de paciencia! demostraré que esto no es nada» pensó Kaido con determinación.

«tienen muchas suerte que esté aquí, ver a una chica hermosa y perfecta como yo hace que el esperar sea más fácil» pensó Kokomi mientras muchos de sus compañeros preferían ver a su diosa "prestando atención", los corazones de los chicos se sentían más tranquilos despues de verla, como ella estaba allí podrían estar unas horas más.

«deberia invitar a mi colega y al enano a comer ramen» como muchos que no prestaban atención, Nendo solo pensaba en que hacer en compañía de Saiki y Kaido, a la vez que rascaba dentro de su oreja con su dedo meñique.

⟨yare yare, todos están desesperados por salir, por mucho que lo quieran el tiempo no va pasar más rápido⟩

«yo ni quería ser maestro, debería estar en Hollywood protagonizando un drama familiar, así que ahora se aguantan escucharme hablar, criaturas del demonio»

⟨ni él quiere estar aquí⟩

─Te-teru-san ─Hayami al escuhar que la llamaba una voz temerosa, volteó su cabeza en dirección de la persona que resultó ser una chica que tenía dos colitas y usaba lentes. Si mal no recordaba el nombre de su compañera era Misato Mera.

─¿Pasá algo? ─cuestionó llena de intriga, posando sus amarillentos ojos en ellsa, causando un pequeño escalofrío en su compañera por la profunda mirada que Hayami tenía, era la primera vez que intercambiaban palabras, y eso que ya tenían varios meses de compartir el mismo salón de clase.

Tal vez era por su rostro llenos de ojeras como un oso panda que daba la sensación de que siempre estaba de mal humor y al intercambiar palabra alguna con ella recibirías un insulto, o tal vez era por el ceño fruncido que normalmente tenía cada vez que ingresaba a un lugar que creían que tenía un carácter amargado, Hayami podría ser malinterpretada de muchas maneras por su forma de ser. Hayami no era grosera con las personas porqué si, tenía sus motivos para serlo, no trataría mal a alguien de la nada, era cierto que miraba a todos feo, pero es que así era su cara, no lo podría cambiar, también que al momento de hablar era algo tosca y seca. Por eso algunas personas le tenían un poco de miedo para hablarle o acercarse, por lo que optaban por alejarse al instante. Ella no emanaba esa dulce y angelical aura que tenía Kokomi, estaba bastante lejos de ser una chica perfecta como ella.

Mejor así, anteriormente las personas sólo querían estar cerca de ella para estar un paso más cerca de Kokomi. Mientras que ahora era como un repelente de mosquitos, persona que intentaba acercarse con dobles intenciones, persona que salía huyendo rápidamente. Paciencia no tenía para lidiar con gente doble cara, tenía sus ventajas andar con cara de odiar a medio mundo.

─Se te calló está rica, nutritiva y muy tentadora barra de avena de tu mochila, se ve tan apetitosa ¡Prometo que se cayó!─expresó al instante nerviosa, temiendo que se le acuse de ladrona. Hayami vió como los ojos de Mera estaban llenos de deseo por aquél dulce, hasta podía ver un fino hilo de baba corriendo por su mejilla.

«pone la misma cara que yo cuando tengo hambre, pobrecita, la merece más que yo»

Había sido conmovida totalmente.

─Te puedes quedar con ella, tengo una extra así que esa es todo tuya ─dijo en un tono bastante tranquilo, notando al instante como la expresión de Mera cambiaba a una de agradecimiento, comiendo de inmediato la barra de avena mezclada con granola, claro, intentando ser lo más silenciosa posible para que el maestro no le llamara la atención.

Hayami había escuchado que Misato Mera tenía una situación económica algo difícil, por lo que por muy pequeño que fuera el gesto siempre era bienvenido. En esa parte tenía bastante suerte, no tenía que sufrir por bienes materiales, sus padres le daban un buen sustento económico cada quince días, aunque se lo terminaba gastando en nuevos mangas o en visitar nuevos puestos de comida. No se arrepentía, eran buenas inversiones que le daban unos bien merecidos momentos de felicidad.

«el money se hizo para disfrutarse, como dijo la canción: "I see it, I like it, I want it, I got it (yeah) I want it, I got it, I want it, I got it"»

A veces es bueno consentirse a uno mismo y Hayami no desaprovecharía esas oportunidades. También merecía darse sus lujos de vez en cuando.

«me preguntó si antenitas también estará aburrido» recostó su mejilla en su mano mientras observaba al de cabellos rosas anotar algunas cosas en su cuaderno, a diferencia de ella que había hecho algunos dibujos en las últimas páginas para intentar mantenerse despierta.

Aunque lo que el profesor estaba explicando era un tema al que le entendía, así que no se preocupaba para cuando llegara el momento del exámen, y si no le entendía buscaría un tutorial más tarde, no se compliquen tanto la vida chicos.

⟨la verdad es que no mucho, prefiero estar aquí a que me estén metiendo en muchos líos que llamen la atención⟩

«¿debería hablar más con él? la verdad me agrada»

⟨mientras no me sigas a todos lados sin darme un respiro⟩

«nah, va decir ¿y está random? no porque le haya ayudado un poco significa que sea cercana»

Hayami era alguien bastante desconfiada con las personas, más cuando estás se le acercaban de la nada de un día para otro, por lo que si fuera Saiki quien de repente estuviera siendo amable con ella se sentiría algo incómoda por el repentino cambio de actitud
─ignorandolo como si no existiera─, ya que no sería la primera vez que a través de ella quisieran estar a un más cerca de Kokomi. Por esas razones aún sentía que sería muy precipitado acercarse de manera tan casual al chico como lo hacía con Sun.

Era cierto que últimamente lo saludaba más seguido cada vez que ingresaba al salón y él le respondía con un asentamiento de cabeza, pero aún no estaba ese estrecho lazo de confianza como para decir que eran los mejores amigos del mundo. Bueno, hace mucho que no intentaba hacer nuevos amigos así que con eso se conformaba, que difícil es socializar siendo adolescente, no como el el kinder que solo te acercas a otro niño y le preguntas si quieres ser tu amigo a lo que te responde que sí y se ponen a jugar.

Hayami sentía en su interior que no le era desagradable a los ojos de Saiki. A pesar de que el chico hablaba poco no había visto alguna mueca de desagrado como las que usualmente ella hacía.

⟨vaya, es la primera persona que no se autonombra mi amigo⟩

«"think retail therapy my new addiction" la neta sí, para que psicólogo si puedo ir de compras»

Hoy era uno de esos días donde Saiki escuchaba que en vez de pensamientos, la cabeza de Hayami se convertía en un radio que transmitía música de todo tipo y en cualquier idioma, la joven escuchaba música bastante variada.

«"whoever said money can't solve your problems, must not have had enough money to solve 'em.
they say, "which one?"
i say, "nah, I want all of 'em"
TEMAZOOOO»

⟨no está tan mal⟩

─¿Qué te pareció? ¿Sabe rico? ─preguntó llena de ilusión a la respuesta de la contraria, se ponía algo nerviosa cada vez que hacía una receta nueva. No quería que se llevará una mal sabor de boca o un severo caso de diarrea a casa.

─Sunni, esto está ¡riquísimo! tus creaciones siempre endulzan un aburrido y estresante día ─alabó el gran talento que su amiga tenía en la cocina. Comiendo al instante otra de las muestras que reposaban en la bandeja, era un gran privilegio tener una amiga experta en la cocina.

─¡Qué alegría me da saberlo! creí que me había pasado del tiempo de cocción o que quedaría duro como roca. ─chilló abrazando con fuerza el brazo de Hayami. Para Sun era muy importante la opinión de la de cabellos azul oscuro, más cuando se trataba de probar recetas nuevas, su punto fuerte eran los postres, no podía permitirse que uno le quedará mal, más al ser la presidenta del club.

─Sabes que tus manos son mágicas, todo lo que tocas lo conviertes en una maravilla para el paladar, tendrán mucha venta. ─felicitó una vez más.

─Siendo así ¡Pasaré de inmediato la receta a los demás miembros! necesitamos dinero para comprar nuevas batidoras, las pobres ya están en las últimas.

─Cualquier cosa que necesites me puedes decir. Si necesitas ir a comprar más azúcar o moldes te puedo acompañar.

A Hayami podrían estresarle los lugares llenos de personas, sintiendo sofocante el como todos chocaban entre sí, pero no podía negar que le gustaba ir de compras, pasando horas observando todos los productos que exhibían en las repisas, tomándose su tiempo para elegir que comprar.

─¡Ay, Yamii, eres la mejor amiga que podría tener en el mundo! ─se le tiró encima envolviendola en un carameloso abrazo a lo que Hayami le dió leves palmaditas en la espalda─. Ten, llevaselos a Keiji, tal vez así recuerda que debe visitar a sus amigas más seguido ─juntó sus labios haciendo un puchero enojado.

Hayami comenzó a reír un poco antes la adorable imágen que tenía frente a ella, luego tomó la bolsita con las muestras, se despide de Sun y va en camino a su propio club. Inesperadamente ve a Saiki escondido en una esquina, bastante atento a todas direcciones. Últimamente se topaba más seguido con él, no se quejaba, era de las pocas personas que si se alegraba de ver, algo que nunca admitiría en voz alta.

«parece que una costumbre suya andar huyendo como ladrón de gallinas, JAJAJA»

Saiki se percata de la presencia de Hayami a unos cuantos pasos de distancia de él, pero no dice nada, sabe de antemano que ella no revelaría dónde se encuentra, ni haría un escándalo por verlo. Algo que le agradaba de la contraria es que podría pasar bastante discreta sin problema alguno, podía leer situaciones.

⟨no estaría huyendo si tú prima no fuera tan persistente en que le preste atención ¿no tiene nada mejor que hacer?⟩

Desde hace rato que estaba huyendo, por medio de telepatía escuchó el como la chica perfecta ideaba otro ridículo plan para poder sacarle un "ofu" o algo por el estilo. Era demasiado testaruda con ese asunto, habiendo tantos chicos que babeaban por ella justamente tenía que ser él a quien no dejara en paz.

Hayami con algo de diversión da unos pasos más cerca de él, se detiene en seco preguntándose si lo que está haciendo es lo correcto, ignorando su propio consciencia que le decía que mejor desistiera y fuera directamente a su club que ya iba en sobre tiempo, decide seguir su camino en dirección al de cabellos rosas.

─¿Sucede algo, antenitas? ─preguntó con tranquilidad, ya se le había hecho vicio llamarlo con ese apodo y cómo no había recibido ninguna queja por parte del chico, le decía así cada vez lo veía, en lo personal le gustaba decirle de esa manera.

Saiki no respondió, se limitó a negar con su cabeza, como de costumbre no hablaba mucho. Hayami que aún no estaba convencida del todo y algo entretenida con la situación, recostó todo el peso de su cuerpo en la pared, sacando uno de los dulces que Sun le había entregado, llevándolo en dirección del chico, creyendo que así podría saber el porqué se estaba escondiendo nuevamente, nadie se resistiría a un soborno dulce. Saiki impresionado y algo confundido ante tal acto la quedó viendo unos instantes.

«no me mires así que soy penuda»

⟨te estoy mirando normal... alto ¿cómo que penuda? ¿no será penosa? dislexica salió para pensar⟩

─No tienen veneno ─aclaró rápidamente al notar que la miraba con cierto recelo, carraspeó su garganta al sentir que su voz salió demasiado nerviosa, ni que se estuviera declarando a alguien y si lo hiciera no hablaría de esa forma, sería directa y segura─, son del club de cocina, puedes comerlo con total seguridad.

⟨no es que crea que tienen veneno, sólo me sorprende que me regales esto de la nada, no me quejo⟩

Saiki que tenía un punto débil por lo dulce, lo aceptó tomándolo de la mano contraria, llevándolo a su boca, sintiendo al instante como el sabor dulce se derretía en su lengua, amaba demasiado los postres, entraban en su lista de cosas que le gustaban, jamás se aburría de comer cosas dulces, en especial las gelatinas de café, eran de las mejores cosas que podían existir, podría comerlas a montones y jamás se iba a aburrir. Hayami podía ver que hasta brillitos salían de la cabeza de Saiki de lo mucho que estaba disfrutandolo, no pudo evitar sonreír con la escena que tenía ante ella. Parecía un niño pequeño que le acababan de dar un juguete nuevo.

«bueno, es momento de ir al club o Keiji me va estrangular, le enviaré un mensaje a Kokomi para que se vaya temprano ya que nunca visita mi club, tal vez porque todos están más concentrados en el origami que en ella, sin atención no vive»

⟨si voy con ella podré librarme de Teruhashi⟩

Teru ¿podrías enseñarme tu club?

«¿qué mi qué?

Inesperado, era la palabra que definía ese momento. Hayami nunca creyó que quisiera acompañarla a su club, a la mayoría de personas les resultaba aburrido, estar horas con papel intentando que diferentes figuras salgan y que muchas veces había que hacer más de un intento para que no fuera más que un pedazo de papel arrugado, en cierta parte relajaba pero a la vez frustraba un poco, a las personas sólo les gustaban las figuras ya hechas, al igual que las manualidades que se creaban. No pudo evitar sentir emoción, además de su querida Sun, nadie más ajeno al club se prestó tan casual para ir.

A decir verdad es que tampoco invitaban a personas a ir, preferían ser los mismos tres gatos de siempre, así mantenían el ambiente pacífico y sin inconvenientes innecesarios que alterarán el bonito ambiente que crearon.

Obviamente disimuló con perfección la emoción que sentía, más sus pensamientos la delataron.

«¡la gran e increíble Hayami te va mostrar como es la mejor haciendo origami! también hay que ser humilde y compartir conocimientos, nunca pierdan la humildad»

⟨como sea, solo llévame lejos de aquí⟩

─Por supuesto, vamos ─le dió otro de los postres hechos por Sun. Saiki sin pensarlo dos veces lo comió y comenzó a seguir a Hayami hasta el aula que pertenecia a su club. Ambos iban en silencio pero no uno incómodo, era de esos tranquilos en los que las palabras no hacían falta.

⟨espero no arrepentirme de ir⟩

«quien lo diría, antenitas es fanático de lo dulce, que lindo»

⟨¿"lindo"? ¿yo?⟩





























❰ 𝐝𝐚𝐧𝐢'𝐬 𝐧𝐨𝐭𝐞 ❱

holam gente linda, nomás decirles que muchas gracias por todo el apoyo que le están dando a este fic que tenía abonando pero que últimamente ando bien inspirada escribiendo.

me alegra saber que hayami les cae tan bien, me hace sentir una mamá orgullosa por haberla creado. en hayami intento reflejar lo que vendría siendo una adolescente que tiene sus problemas e inseguridades pero que tiene su manera de sobrellevar las cosas, además que a pesar de ser distante con las personas, con sus amigos no lo es, intenta demostrarles lo mucho que le importan.

cuidense, voten, comenten.

sayōnara 🌾🦋.

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